Defensora de la Humanidad (Jean x Lectora)

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Al final, 218 reclutas llegaron al día de la graduación.

- ¡Entregad vuestros corazones!- todos hicimos el saludo del rey.- Los reclutas que os graduáis, tendréis tres opciones. Podéis escoger uniros a la Tropa de Guarnición que protege las ciudades y refuerza los muros. Al cuerpo de exploración, cuyos miembros arriesgan sus vidas más allá de los muros. O a la policía militar, que controla a los ciudadanos y mantiene el orden bajo las órdenes del rey. Solo los diez mejores de esta promoción que estamos apunto a anunciar tendrán derecho a unirse a la Policía Militar.- suspire orgullosa de todos mis años de entrenamiento.- A continuación anunciare a los diez cadetes que han obtenido los mejores resultados de toda la promoción, dad un paso al frente cuando diga vuestro nombre.- di un último vistazo a todos mis compañeros.

Quede en quinta posición, una por detrás de Annie y por delante de Eren, sonreí orgullosa al escuchar que Jean y Marco quedaron también entre los diez mejores, me sentí relajada al saber que podrían entrar a la policía militar y vivir la vida en paz que querían.

Suspire aburrida mientras veía como Jean y Eren se peleaban.

- ¿Qué harás Armin?

- Me uniré a la legión de reconocimiento.

- ¿Es lo que deseas?

- Lo se... soy débil físicamente, es un auténtico milagro que pasara el simulacro de batalla que es nuestro examen.

- Fuiste el que más nota saco en el teórico, aprovecharías más tus cualidades en la en la guarnición, es lo que dijo el instructor.

- ¡Prefiero morir a ser una carga!- me quede impactada por lo que dijo, pero no le respondí porque llegamos donde estaban hablando Eren y Mikasa. Los cuatro nos fijamos en que Hannes nos miro desde lejos y los tres que me acompañaban hicieron el saludo del rey.

Comenzamos a hablar con tranquilidad con el nuevo capitán de la guarnición, hasta que empezamos a hablar de mi padre y Eren se desmayó. Junto con Mikasa y Armin conseguimos cargarlo hasta su cama. Convencí a Armin y Mikasa de que yo me quedaría con él hasta que despertase.

- Te desmayaste y tuvimos que cargarte hasta aquí.- le informe cuando le vi abrir los ojos.- Parece que tuviste un mal sueño.

- No recuerdo lo que soñé...- llevo su mano a la cabeza.

- No te esfuerces en recordar a papá.- acaricié su cabello.

Subimos a lo alto de los muros a preparar los cañones, había varios compañeros que no esperábamos ver allí, pero se ve que el discurso que dio ayer Eren les hizo cambiar de opinión sobre en que cuerpo alistarse.

- La humanidad está preparada para dar el golpe y ganar.- apoyé mi mano en el hombro de Eren.- Mamá será vengada, todos los que han muerto en sus manos serán vengados.- en cuanto acabe de hablar una enorme cabeza apareció delante nuestra, desprendiendo un vapor caliente que me hizo retroceder hasta caer del muro, utilice el equipo de maniobras para engancharme en la pared.

- ¡Debemos abatirlo!- Eren comenzó a subir a toda velocidad.

- ¡Sasha, encárgate de mantener a salvo a Samuel, que cuatro equipos vayan a preparar los cañones reforzados! ¡Preparaos para luchar!- seguí el mismo camino que había seguido mi hermano antes. Cuando llegue al tope de la muralla me coloqué al lado de Eren.

- No te veía desde hace cinco años.

El titán movió su mano estampándola contra los muros, enganche mi equipo en su brazo y desenfundé mis cuchillas, corrí por su brazo y note como le costaba moverse, era grande, pero demasiado lento, justo al contrario que yo.