CAPÍTULO VEINTICUATRO
_____ SMITH
Sus labios sobre mi estómago...
Mi corazón a mil...
Mis ojos se cierran disfrutando su contacto
Se me escapa un suspiro
Vuelve a mis labios y, tira de mi labio inferior. Baja nuevamente y empieza a repartir besos en mi estomago, desciende poco a poco y...
Su celular suena.
Abro los ojos y mi respiración es mala, muy mala. El sabor amargo vuelve a mi boca y el enojo me vuelve a tomar. Me quito las sábanas de encima porque tengo calor y me quedo mirando el techo en la oscuridad iluminada levemente por la luna que se nota muy poco.
Me remuevo sobre la cama y me pongo de lado para conciliar nuevamente con el sueño, pero solo recuerdo pequeñas escenas de mi y Aidan hace unas horas. Mi boca se seca y vuelvo a experimentar el nudo en mi vientre que me hace sentir inquieta. Me siento en la cama haciendo un poco de ruido y miro la cama de Aidan que está en frente mío pero en una esquina.
«Esta durmiendo plácidamente dándome la espalda mientras yo ando acá obligándome a conciliar el sueño»
Lo de hace horas estaba—recalco ESTABA—, tomando una ruta en la que ambos no queríamos ponerle un stop. No queríamos hasta que una bendita llamada entro. Desvío la mirada de Aidan y me siento en la orilla de la cama. La bendita llamada era de Hannah. La primera, vio quién era pero no le importó y volvió a besarme y yo lo seguí. A la segunda llamada tomó el celular para colgarlo pero lo tomé de sus manos para ver quién era y toda mi calentura se fue a la borda al ver su nombre y como estaba escrito. Estaba como «Hannah amor ❤️✨» Sentí repulsión y me aparté inmediatamente ya con la cabeza fría.
Estaba a nada de...
Oh, Dios.
La llamada me había hecho entrar en razón y sin decir nada, me levanté del sillón y me fui al cuarto. Aidan me llamaba pero simplemente sentí nervios y enojo. Me entraron las ganas de llorar cuando pensé que solo me usaría para ellos pero, inmediatamente pensé mejor y me negué, él no haría eso. Esto había fluido entre ambos.
Me puse mis sandalias y me levanté para ir al baño que había acá. Antes, me fijé en la hora, eran las dos de la mañana. Caminé hacia el baño y me vi frente al espejo. Solté un suspiro y abrí el caño para mojarme las manos. Me incliné para poder mojar mi cara. Con mis manos mojadas, las pasé sobre mi rostro, me quedé así por unos minutos hasta que volví a enderezarme y tomé la toalla que estaba colgado a un lado y me sequé.
Cuando volteo para volver a verme al espejo, al hacerlo suelto un gritito cuando veo a Aidan parado en el umbral de la puerta y recostado sobre este con los brazos cruzados sobre su pecho. Su cabello revuelto y sus ojos aún un poco entrecerrados.
Solté un suspiro y me apoyé en el lavamanos y negué con la cabeza.
—Me asustaste, Aidan
—No fuera así si no te despertaras a las dos de la mañana y vienes acá haciendo mucha bulla
Entrecerré los ojos indignada— Hice la menor bulla posible, no quería interrumpir tu dulce sueño.— bufé.
Me voltee y caminé pasando por su lado para salir y volver a acostarme.
—¿Por qué no puedes dormir?— preguntó
—Porque no—respondo sin detenerme. Llego a mi cama y me acuesto ignorando su mirada.
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Tu Mirada [Aidan Gallagher] [Libro 1 y 2] (✔)
FanfictionTenía problemas, demasiados con que lidiar, pero encontró esa luz que jamás creía encontrar, es como si su vida hubiera dado un giro completo al verlo a los ojos...Solo su mirada... «-Dicen que el amor es abstracto pero yo lo tengo justo frente mío...