CAPÍTULO DIECIOCHO

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CAPÍTULO DIECIOCHO

_____ SMITH

Abrí los ojos y vi oscuridad... me dolía un poco la cabeza. El lugar no me parecía familiar y me levanté de golpe, mire a mis lados desconcertada y vi a Emma descansando a mi lado, una manta nos cubría, vi el reloj que había en esta habitación y...

—¡Santa madre bendita!—jadeé al ver que eran las diez de la noche, me paré tan rápido como pude que terminé cayendo de boca abajo contra el suelo, me quede unos segundos sin aire pero me recuperé al instante, al igual que Emma se había despertado

Me levanto y ella se sienta en la cama, se frota los ojos y mira nuestro alrededor

—¿Qué hora es?— pregunta tranquila

—¡La diez de la noche! ¡La hora perfecta para que, mamá, nos castigue!— ella abrió los ojos tanto como pudo y se levanto

Ella prendió la luz que nos cegó a ambas y tomo mi celular y el suyo que estaba en la mesita de noche

—Nos vamos a morir— reviso ambos celulares a la vez— Oh hermana, estamos muertas— dice dramáticamente— veinte mensajes de mamá en tu teléfono y diez llamadas en el mío— me miro asustada

—Apresúrate— abrí la puerta con cuidado y me di cuenta que habían personas en la sala, las luces estaban prendidas. 

Caminamos por el pasillo peinándonos el cabello con las manos y entrecerramos los ojos por la fuerte luz. Mace estaba en el sofá echado mientras comía chocolates, Parker sentado en el suelo mientras jugaba "solitario" con las cartas sobre la mesa pequeña y de vidrio a la vez que hablaban y Aidan estaba sentado en una esquina del sofá con los brazos y piernas extendidas y la cabeza hacia atrás con ojos cerrados. Parecía cansado.

—....entonces le dije: ¡Como te detesto!— habla Mace— y ella me respondió gimiendo placenteramente mientras seguía sobre mi moviéndose majestuosamente, lo juro, fue perfecta en sus movimientos. Bueno, me dijo:— le tapé los oídos a Emma e hice una mueca de disgusto— Yo se que me deseas... Y bueno, en una parte era cierto, y con eso,— hizo una pausa con una sonrisa pícara— Dios— echo la cabeza hacia atrás como si recordara— con eso fue el final de mi eya...

—¡Santa madre!, Cállate, Mace— Aidan se froto la cara— Ninguno, te prestamos atención— menciona

—Yo sí, —Parker habla aún mirando sus cartas

—Que... asco— los tres voltearon a vernos, liberé a Emma, quien tenía una cara de asco. Bueno, al menos intente que no escuchara nada.—Eso fue... asquerosamente asqueroso— Emma seguía indignada, su cara lo decía todo— Que asco— siguió susurrando

Aidan se levanto de su sitio y se acerco a nosotras, trague grueso, él me miraba fijamente, mis ojos deben estar hinchados por mi llanto y mis mejillas rojas. A mi hermana también le pasaba cada vez que despertaba; sus mejillas tenían un leve color rojizo

—Mi mamá me va matar— fue lo primero que dije

—Si, sobre eso— dijo y sacó su celular,— Mmm— murmuró revisando y luego chasqueó los dientes— Sí, ya llegó, llamó hace como media hora preguntando por ustedes, le dije que sí, no tengo idea de como consiguió mi numero pero bueno

—¿Que mi mamá, qué?— dije atónita— Bueno, asegúrense que en mi lápida diga "Fue una hija muy desobediente e irresponsable, pero, se le quiso"— dije sarcásticamente, Aidan frunció el ceño

—¡Oh!— dijo Parker y añadió— ¿Qué color te agrada más? ¿Rosado, azul, celeste o negro?

—Negro— no es que me gustara ese color, solo que era perfecto para mi día— ah, y asegúrense de que Emma lleve un vestido color blanco, amaría que todos fueran de ese color en vez de negro, ah y también que cuando esté en mi ataúd, tenga un lindo vestido negro y no tenga maquillaje, aunque solo por ese día...— hablaba por hablar, estaba asustada por mi madre....

Tu Mirada [Aidan Gallagher] [Libro 1 y 2] (✔)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora