Capitulo 11

238 34 4
                                    

Capitulo 11

- ¿Cierro la puerta? -preguntó Chad por la radio, al ver desde el monitor como el Omega no parecía querer atravesar.

-Espera, dale un poco más de tiempo - Contestó Osric, viendo el espectáculo directamente desde la vitrina.

....

-Jensen –volvió a llamar el Alfa – Vamos mi dulce y pequeño ondino... tú puedes hacerlo.

Y Jensen quería, ahora era consciente de ello, el realmente si quería ir del otro lado y conocer a Jared más de cerca... pero entonces ¿Qué iba a pasar? ¿Querría el Alfa aparearse con él?... ¿lo abordaría de inmediato?... era un Alfa sireno después de todo, y él un Omega, eso era lo que se esperaba. Demonios, incluso los humanos detrás del vidrio lo esperaban.

Pero Jensen no estaba seguro de eso, que tal si él no sabía cómo hacerlo, que tal si el Alfa se enojaba por eso... o qué tal si finalmente lo hacían... y si dolía... mucho.

Cada vez más asustado, Jensen finalmente se movió, pero no hacía la puerta, sino al lado contrario, alejándose rápidamente de ella.

Tanto el Alfa como el biólogo del otro lado de la vitrina suspiraron derrotados al unisonó, uno dejando escapar aire por la boca y el otro agua por las branquias (2).

-Está bien Chad, ahora puedes cerrar -informó Osric por el radio.

Emily también hizo un ruido de desilusión... sabía que podían volver a intentarlo después, el problema es que tras los dos fracasos rotundos con los omegas anteriores, los grandes cargos del centro estaban muy pendientes de este nuevo intento, y cualquier señal de que no estaba funcionando, podía acarrear la suspensión definitiva del mismo.

La repetición del ruido que se había escuchado antes provocó que el omega se detuviera de su huida haciéndolo voltear hacia aquella apertura notando como esta comenzaba a hacerse más pequeña esta vez.

Y simplemente sucedió, como si algo se activara, o se desactivara, el sireno omega salió disparado, nadando a toda velocidad hacia la compuerta, sin tomar siquiera en cuenta el riesgo de chocar de lleno contra una dura pared de hierro si fallaba o quedar atrapado por ella...

- ¡CHAD, ABRE DE NUEVO, ¡ABRE RAPIDO! - gritó al radio alarmado el biólogo al ver lo que estaba pasando.

Emily por su lado solo se acercó al cristal de la vitrina gritando a su vez al Sireno

- ¡JENSEN NO!

Y el mismo Jared profería ruidos que el omega no supo distinguir, mientras nadaba histérico a lo largo del cristal.

Todo fue demasiado rápido, Jensen logró llegar apenas una pequeña apertura antes de que la puerta se cerrase, quedando entonces atrapado en un muy angosto y oscuro túnel sin ninguna salida y siendo totalmente incapaz de moverse.

-Chad ¡ABRE! -volvió a gritar Osric aliviado de que el sireno no hubiese sido atrapado por la compuerta, pero ansioso sin saber si estaba bien o había salido lastimado.

-¡Lo estoy haciendo! -contestó el informático del otro lado –pero la maldita puerta se sella después de cerrar y tiene un retraso para abrir –Aseguró

Jared por su parte estaba ahora desesperado, al punto de que comenzó a intentar abrir la dura compuerta de hierro con sus propias manos jalando y empujando por igual, hasta que, al no ser capaz siquiera de moverla, comenzó a darle de golpes con su fuerte cola.

-Se va a lastimar -afirmó Emily preocupada ahora por el Alfa.

-Intenta distraerlo – le pidió Osric, aun comunicándose con Chad.

-¿Cómo? -preguntó la etóloga sin saber que hacer, más al no recibir ninguna respuesta, simplemente hizo lo primero que se le ocurrió... golpear el cristal y gritarle al Sireno. Con suerte esto enojaría suficiente al Alfa y lo haría reaccionar contra ella en lugar de contra la puerta.

No funcionó, el simplemente la ignoró, aun buscando desesperadamente la manera de abrir esa compuerta. Hasta que finalmente, el ruido sordo apareció de nuevo y la compuerta lentamente comenzó una vez más a abrirse.

Sin embargo, esta vez el Alfa no tenía la paciencia para esperar a que terminara de hacerlo, así que ahora teniendo un punto de sujeción y con la ayuda de la maquinaria, se agarró del hierro y jaló de este, usando toda la fuerza de un Sireno Alfa de más de dos metros (con la cola completa), hasta que dobló la cosa, pero creando el suficiente espacio para poder asomarse al estrecho lugar y tomar unas manos que se estiraron hacía él. El alfa atrapó al omega entre sus manos y lo atrajo, sacándolo de una, al parecer intacto.

Las branquias de Jensen se abrían y cerraban con rapidez por el momento que acababa de pasar totalmente retenido sin poderse siquiera mover en la oscuridad, cuando de repente volteo hacia arriba y se dio cuenta de que se encontraba entre los brazos de un Alfa que ahora tan cerca parecía aún mucho más enorme, mucho más imponente... y luego Jared lo abrazó, de una forma tan feroz y posesiva, cubriéndolo tan totalmente que no era muy diferente al estar atrapado en aquel estrecho túnel... solo que la verdad... se sentía mucho mejor.

(2) Aunque los mamíferos marinos respiran solamente aire saliendo a respirar a la superficie, en el caso de los Sirenos al tener parte de literal pez, estos tienen tantos pulmones que usan para respirar fuera del agua, y branquias que usan dentro y por las que toman el oxígeno directamente del agua.  

SirenosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora