Capitulo 16

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-Y entonces, ¿Fue exitoso? -Chad preguntó extrañamente ansioso, mientras veía a Osric analizar el video del apareamiento de los sirenos de forma minuciosa.

El biólogo tardó un momento en contestar, prestando total atención a las imágenes frente a él, hasta que de repente se dio la vuelta hacia los otros dos en la sala.

-Oh si -exclamó finalmente con una enorme sonrisa – ¡Sin duda fue un acoplamiento exitoso!

Los gritos de júbilo de sus compañeros no se hicieron esperar, mientras chocaban las manos y proferían exclamaciones emocionadas... ¡finalmente había funcionado!

-Tengo que ir por algo

Fue Emily quien informó, saliendo del pequeño lugar hacía la sala conjunta, donde sacó una botella de un pequeño refrigerador bar para luego volver rápidamente con ella en las manos.

-¿Champange? -preguntó Chad asombrado.

-O si, sin duda nos lo merecemos -sonrió ella –han sido meses de este proyecto, problema tras problema, ¡pero finalmente ha funcionado!

Chad no quiso volver a ser tildado de aguafiestas al hacer notar que realmente solo se podía hablar de éxito total cuando hubiese una cría. Después de todo, los científicos merecían un festejo ahora mismo luego de todo lo que han pasado... Demonios, el mismo lo merecía también.

-Chad, ¿podemos tener un resumen de la grabación para enviar ahora mismo? -preguntó Osric sin dejar de trabajar aun cuando recogía la copa espumosa que Emily le ofrecía. -Los directivos deben de tenerla ahora para que detengan todos los planes de traslado.

-Si -afirmó el informático –enseguida te la mando a tu correo.

El biólogo agradeció con un asentimiento y una sonrisa.

-No puedo creer, pasamos semanas vigilando, y al final en el momento, nos lo perdimos... si no fuera por la grabación -habló la etóloga mientras tomaba de su propia copa, admirando una vez más el video.

....

Sin embargo, pronto el asunto de no estar ahí para el apareamiento, careció de total importancia, cuando este se repitió solo unas horas después y otra vez tras unas horas más, y de nuevo apenas al amanecer...

De hecho, en los siguientes días, los sirenos apenas parecían poder mantenerse separados, apareándose constantemente, tanto como tres o cuatro veces por día, siempre lo hacían apenas después de despertar, en ocasiones antes del almuerzo, no mucho después de la comida una vez más, y luego, jugaban un rato, para aparearse de nuevo antes de irse a dormir.

-Me gustaría tener su energía –dijo Chad al ver en la pantalla de monitoreo del tanque como el Alfa y Omega acababan de separarse de las colas luego de un nuevo apareamiento.

-Bueno, están de luna de miel, es normal –fue Emily quien habló con una sonrisa, haciéndole compañía al informático en la vigilancia mientras Osric tenía una junta con los directivos.

Chad puso unos ojos a la chica, pero prefirió dar una mordida al sándwich que esta le había regalado en lugar de contestar su observación.

-Y lo mejor es que a este ritmo, no tardaremos en tener una cría exitosa... la primera en cautiverio –afirmó ella antes de darle una mordida a su propio emparedado.

-Eso espero –fue Osric quien habló esta vez desde la puerta, y mostrando no muy buen humor.

Se acercó hasta los otros dos, tomando una papa frita del cuenco de la etóloga.

- ¿Qué pasa? -preguntó ella – ¿están presionando de nuevo?

- ¿Pueden hacer otra cosa? -contestó el biólogo encargado mascando con agresividad.

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