Capitulo 20

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Una vez que estuvieron nuevamente seguros en el fondo del tanque, y con esa cosa "camilla" fuera de su territorio, Jared pudo finalmente volver a respirar tranquilo, sin embargo, tal sensación desapareció al volver a ver a Jensen, y notar la mirada claramente molesta y dolida de su sireno.

-Lo siento mi ondino, te juro que no planeaba hacerte daño... no hay manera de que te lastimara a ti.

El sireno omega no contestó, simplemente se dio la vuelta y comenzó a nadar alejándose del Alfa, que desde luego lo siguió de cerca.

-Jensen por favor –volvió a intentar el más grande.

-Estoy cansado, solo quiero estar tranquilo -habló finalmente el omega en tono cortante, para luego sin más volver nadando hasta su roca, donde Jared por su tamaño no podía seguirle.

Jared suspiró, ahora también agotado de todo... de los humanos que no los terminaban de dejar en paz, su preocupación de lo que le estaba pasando a su sireno, y su creciente necesidad imperante de protegerlo de todo a cada segundo, que, para colmo, este no entendía.

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Unas horas más tarde, Osric estaba nuevamente en el área interna del tanque de los sirenos, Emily estaba ahí con él una vez más, ayudándolo con las cosas que había traído, pero sin acercarse demasiado.

- ¿Estás seguro que quieres hacer esto solo? - preguntó la científica, conectando un par de cables.

-Si, entre menos personas él se sentirá menos cohibido.

-Cohibido no es la palabra que usaría –expresó la chica recordando el reciente comportamiento totalmente fuera de sí que había estado mostrando el sireno Alfa. - ¿Y qué tal si te ataca?

El biólogo negó con la cabeza.

-No lo hará, los alfas son más brabucones que realmente peligrosos, los verdaderos ataques por sirenos han sido contados.

-Si, dile eso a la camilla y la grúa. - rodó los ojos Emily.

Osric solo sonrió.

-No debes preocuparte, tampoco estaré lo suficientemente cerca para que pueda hacerme daño.

-Igual... solo, cuídate -solicitó ella, antes de terminar lo que hacía y salir del lugar, dejando solo al científico.

Este tomó aire y valor, y finalmente comenzó con su plan.

- ¡Jared!... ¿Puedes venir? -gritó con fuerza la orilla del tanque, usando un altavoz para estar más seguro de ser escuchado.

No hubo respuesta ni movimiento alguno.

- ¡Jared! - intentó una vez más - ¡Solo necesito hablar contigo!, ¡Sera solo un momento!

Una vez más, ninguna señal de respuesta.

- ¡Jared, es sobre Jensen!... ¿Quieres que dejemos en paz a tu amigo?... ¡Ven y habla conmigo!

Si, tal vez Emily y el resto del equipo tuvieran razón y esto fuera una tontería. Pensó Osric al ver como su plan era un fracaso... y estaba por apagar el altavoz cuando el sonido inminente de agua chapoteante lo hizo regresar sus ojos al tanque.

Y ahí estaba, tan majestuoso y hermoso, el sireno Alfa había aparecido, mirándolo con evidente desconfianza y saña, pero sin atacar, solo observando.

-Hola -sonrió el biólogo verdaderamente contento, aunque pronto se dio cuenta que debía hacer esto rápidamente, antes de hacer al sireno perder la paciencia. -Antes que nada, siento lo que pasó hoy -aclaró Osric levantando las manos en señal de sumisión –Entiendo que te molestaras, no debimos intentar alejar a tu omega de ti, te prometo que no lo volveremos a hacer.

Era difícil saber si Jared lo estaba escuchando y entendiendo o no, desde que su talante no cambiaba en lo absoluto, con su misma expresión adusta y algo amenazante. Pero aun atenta.

El biólogo sabía que tenía que seguir intentando.

-Sin embargo, Jared, tenemos que revisar a Jensen.

El amagó de ataque apareció casi de inmediato, dejándole más que claro ahora que el Alfa ciertamente lo estaba entendiendo, pero también poniendo al biólogo en alerta, dando incluso un paso atrás y levantando una vez más las manos.

- ¡Espera! -continuó el hombre sin bajar las manos –Jared tú sabes que algo le está pasando... lo has visto también.

Increíblemente, el sireno Alfa volvió a detenerse y escuchar luego de esas últimas palabras. Osric supo entonces que iba por buen camino.

-No queremos hacerle daño -prosiguió entonces- solo queremos saber que le pasa... porque ha dejado de jugar contigo, queremos saber si está bien. En este lugar tenemos aparatos para averiguarlo, y cosas para curarlo si está enfermo. Es... es como cuando tu llegaste ¿Lo recuerdas?, tu cola estaba un poco lastimada por la red, te pusimos algo que hizo que se curase.

El talante del Alfa finalmente se suavizo un poco. Obviamente estaba interesado en lo que el otro hablaba.

-Mira – entonces señalo el hombre a uno de los aparatos que tenía a un lado, un ecograma portátil -usaremos esto, no hace daño, vez – se levantó la camisa y puso la paleta sobre su estómago –esto deja ver dentro del cuerpo, así vemos si esta todo bien. Usaremos esto con Jensen y veremos que le está pasando.

Tras esto, Osric procedió a mostrarle algunos otros aparatos que pudieran necesitar usar, así como algunos medicamentos, explicando detalladamente cada cosa.

El Alfa pareció escuchar todo con atención, o al menos se quedó muy quieto mirando mientras el otro hablaba.

-Lo vez, nada va a lastimarlo, incluso tú también vas a poder estar aquí, con él, mientras lo revisamos... siempre y cuando no lastimes a nadie claro – aclaró el biólogo de buen tono – Entonces... que dices Jared ¿Nos dejas ver que es lo que está pasando con tu omega?

Una vez más, el talante del Alfa no cambió, la mirada seguía intensa y seria, hasta que, sin emitir ningún sonido, simplemente se zambullo, dejando una vez más al Osric solo.

Y así estuvo por un rato, simplemente parado viendo hacia el tanque que permanecía sereno. Cuando de repente otro chapuzón.

Jared emergió de nuevo, pero esta vez no venía solo, justo a su lado, Jensen lo acompañaba. 

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