Siempre fuiste tu

Capítulo 18

Llevo casi media hora viendo fijamente el techo de mi habitación mientras estoy tirada en mi cama con mi bata de baño y me cabello enrollado en una toalla.

Después de encontrarme con una pelirroja despampanante y un Marcus frío y distante, Stephi me contó lo que la gente sabia sobre la historia de los dos ya mencionados.

Aquella hermosa chica se llamaba Stella Miller, esta y Marcus se conocieron porque la empresa Lancaster apoyo cuando los Miller tuvieron problemas económicos. Gracias a esto los caminos de Stella y mi adonis se cruzaron. Lo que sigue en la historia es sumamente normal, ambos comenzaron a salir y al final terminaron teniendo un noviazgo.

Parecían ser la pareja perfecta, ambos siendo demasiado hermosos y ricos, lo sorprendente de esto es que Marcus no hacía relaciones con nadie pero al parecer realmente se enamoro de Stella ya que la respetaba, amaba, cuidaba y le daba su lugar como su novia.

A los 8 meses de relación todo se fue por el caño porque el único que se enamoro fue el ya que Stella lo engaño con su hermanastro. Los rumores dicen que Marcus la visito de sorpresa por el cumpleaños de la chica y la encontró en la cama con su hermanastro de ella misma.

Después de esta trágica historia Marcus volvió a hacer el mismo que era antes de Stella y como ya lo dije, el no hacía relaciones. Así que si, lo que teníamos el y yo era y siempre será una aventura. El seguía enamorado de ella y su mirada de hoy lo demostraba.

El timbre suena haciendo que saliera de mi transe, me vestí fugazmente y salí para abrir la puerta la cual al ver a la persona detrás de esta, hacia que quisiera volver a cerrarla.

-Tenemos que hablar- mi jefe estaba delante de mi en su típico traje que lo hacía lucir realmente apuesto y deseable.

-Solo dime si es cierto lo que oí porque sabes que lo sé- hable para no dejarlo pasar.

Tristemente descubrí que me había enamorado de Marcus y lo peor no era solo eso, que yo sabía que con el si era amor, que mis amores pasados no eran nada comparado con lo que sentía por la persona que tengo enfrente.

-Lo es y de eso quería hablar- por su tono de voz sabia que no venia a decirme que mi amor por el era correspondido.

-Habla.

-¿No me dejaras entrar?- intento entrar pero se lo negué.

-Ya se lo que me dirás así que dilo de una maldita vez- solté de forma brusca y con mis ojos ardiendo para no derramar ninguna lágrima.

-No puedo, de verdad no puedo Camila yo lo sien...

-Esta bien, lo entiendo y lo acepto- una lágrima cayó sin poder evitarlo pero aún así seguí hablando -Mañana me presentaré como su asistente y el trato será solo laboral, usted me llamara señorita López y yo señor Lancaster. Linda noche- dicho esto le cerré la puerta en la cara y me recargue en esta hasta que oí el sonido del auto arrancar y supe que se había ido. Supe que había terminado.

Y volví a sentirme estancada como si tuviera tantos sueños y metas por cumplir pero a la vez no los tuviera. Están ahí pero cuando doy un pasó para lograr estar más cerca, todos mis sueños dan otro pasó para alejarse. He tratado de ser buena persona siempre, respetuosa y amable, procurando no hacer daño a nadie pero siento que las personas que son todo lo contrario a lo que yo he luchado por ser, por lo que he pasado etapas de autoconstruccion, son las que más han logrado salir.

Me asusta si soy sincera, porque tengo en mi ser una batalla, y aunque suene ridículo me siento como si en mis hombros estuviera por un lado un diablito diciéndome que sea todo aquello que no quiero, que considero malo. Mientras que por otro extremo tenemos a un angelito diciéndome que todo estará bien y que pasará, que me alegre y que sienta que cada quien corre su propia carrera. Que yo estoy en mi carrera y tengo que enfocarme en ella. Pero mierda, ¿a quien hago caso?
Que jodido es este caso.

Pero a la mierda, tenía que enfocarme en esa entrevista de trabajo.

Me despido del primer hombre que ame de verdad pero lo hago porque me amo más a mi misma.