Capítulo 3

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Parece que mi amiga vio mi cara pálida y fue hacía a mi. 

-¿Qué te pasa?- susurro al ver el teléfono en mi oreja.

A Stephi no le he contado nada de mi vida pasada y ella tampoco ha echo preguntas, creo que dedujo que irme a vivir tan lejos era por una razón y más que ni siquiera lo pensé dos veces. 

En cuanto ella se comunico conmigo y me felicito porque había obtenido el puesto me dijo que tendría 2 semanas para dar una respuesta y al instante respondí que si, a la semana de esa llamada yo iba llegando a Londres.

-¿Sigues ahí, Camila?- la voz de la persona que me hizo muy feliz volvió a resonar en mi oreja. -Te conozco tan bien, se que en estos momentos estás congelada- se río.

Se río.

El muy maldito se río.

Dice conocerme bien y me hizo daño de la peor forma y todavía me llama como si nada y se ríe.

Ya no es sangre lo que corre por mis venas. Es hielo.

-No estoy congelada y creo que no me conoces del todo bien, porque si lo hicieras sabrías que no causarías el mismo efecto en mi ya- la voz me salió más ronca de lo que imagine por la rabia. -Y si lo hicieras, jamás me hubieras marcado porque no me importaría lo que tengas que decirme- Colgué.

Mire a mi amiga que me veía con los ojos abiertos y la mandíbula hasta el suelo. Ay Stephi, hay tanto que no sabes y que solo por esta noche se quedara así.

-Me iré caminando, créeme la borrachera ya se me bajo.

-Luego hablaremos y no te hagas- me dio una mirada amenazadora, -pero, ¿estás bien?

Mi corazón se hizo pequeño, Cloe, mi ex mejor amiga me hubiera dejado de hablar hasta que le contará todo y jamás me hubiera preguntado lo que Stephi hizo.

Viví toda mi vida con gente tan falsa. No se como es que nunca me di cuenta.

Lo hiciste, pero decidiste ignorarlo, a eso se le llama conformismo.

Si bueno, no podía refutar mucho con ese argumento.

-Lo estoy, luego te lo contaré todo pero esta noche solo necesito ir a dormir.

Salí del bar y en el transcurso a mi casa me puse a pensar. 

Como siempre, a veces no es tan bueno.

Él me marcó, me hablo y escuche su voz después de varios meses. Sabía que algo había cambiado pues a pesar de que pude escuchar su voz esa pizca de esperanza que siempre había en mi ya no estaba y me sentí, en parte, orgullosa de eso. Sin embargo, mi estomago se revolvió solo de pensar en que el pensó en mi y me marcó, tomo de su tiempo para ver por mi. Aún así, el único sentimiento que siento era rabia.

***

Tuve una semana libre, mi jefe se fue de viaje a Nueva York a terminar con unas reuniones, así que me la he pasado en mi departamento en pijama casi todo el día solo llenando informes y acomodando la agenda de mi sensual Marcus.

He recibido llamadas de diferentes números, por alguna razón que yo desconozco mi familia ha querido contactarse conmigo y es realmente odioso y molesto que hagan eso, ¿por que hasta ahorita?

Hubo un tiempo en el que mi estado emocional estaba por los suelos, fue justamente después de la muerte de mis padres. Entre en un estado de ansiedad donde yo casi ni dormía y me la pasaba llorando, aún recuerdo eso y hablarlo solo hace que llore, pero jamás lo he hablado con nadie.

¿Por qué lo harías si tu único apoyo emocional te trato de la mierda?

En aquellos tiempos solo lo tenía a él, pero no era tan bueno como parece.

Siempre fuiste tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora