Renacer [Ran x Smiley]

I

La primavera era una época hermosa. Era la estación que recordaba el renacer de las flores, el amor en el aire y la luz en el cielo. Para la Toman no significaba nada, solo problemas, simplemente era una época para pelear, proteger y defender sus convicciones. La pelea de la Toman contra Tenjiku estaba a la vuelta de la esquina. Smiley lo sabía y estaba con el corazón roto.

A Nahoya Kawata le gustaba Muto Yasuhiro. Su amistad nació en medio de peleas y reuniones. Ambos se habían hecho amigos a razón del carácter explosivo de Smiley, eso animaba a Muto. Ambos eran capitanes de la Toman por lo que se cuidaban el uno al otro, Muto veía a Nahoya como un buen amigo, Smiley veía en Muto una posible pareja. Esta ilusión terminó el día en que apareció Haruchiyo Sanzu. El chico delgado de cabellos largos y sedosos había sido dejado a cargo de Muto. Y sin darse cuenta ambos empezaron una relación de amistad que fue evolucionando rápidamente. Nahoya creía que podía contra el chico silencioso, pero estaba equivocado.

Muto los había traicionado junto a Sanzu cuando llegó el momento de enfrentar a Tenjiku. Nadie lo sabía, pero una persona estaba dispuesta a traerlo de vuelta.

Nahoya sin decirle a nadie decidió ir a la guarida de Tenjiku en busca de Muto. Estaba en la boca del lobo, su acto de valentía no era el primero en la Toman, ya antes Chifuyu hizo algo parecido. Con la esperanza de que el caso de Chifuyu se pareciera al suyo fue a buscar respuestas de Muto.  Una vez allí pandilleros lo miraban de pies a cabeza, lo habían reconocido, el capitán de la cuarta división de la Toman estaba frente al cuartel de Tenjiku exigiendo ver a Muto Yazuhiro.

A varios les enervó su actitud valiente, altanera, grosera y su gran sonrisa. Los cuchicheos se hicieron presente, tanto que llegó a los oídos de los altos mayores de Tenjiku, naturalmente a los oídos de Muto y Sanzu. Les causaba gracia como un chico así se le ocurría algo así, o estaba desesperado y quería hacerse el héroe o era estúpido.

Muto le hizo saber a Izana que sería él quien se deshiciera de Smiley, el asunto era personal. Por poco y se niega, porque era claro que el pelinaranja estaba buscando pelea. Al final dejó que Muto fuera con Smiley para aclararle lo que fuera. Todo esto ocurrió a los ojos de los reyes celestiales. Nahoya pronto captó la atención de el mayor de los Haitani, a él le fascinaba los rebeldes y obstinados.

Muto y Nahoya estaban frente a frente. Nahoya tenía los nervios de puntas, no había visto a Muto desde que lo había rechazado. Sí, un par de noches antes de la traición de Muto, Smiley confesó sus sentimientos por el rubio de pelo corto. Muto rechazó los sentimientos del muchacho argumentando que ya tenía algo con Sanzu, además que pronto desaparecerían a la Toman.

Muto le dejó en claro que no quería nada de él, por el bienestar de Sanzu. Eso lo había enfurecido y decepcionado todavía más, pero seguía queriéndolo cerca a pesar de todo. Un baldazo de agua fría de nuevo le cayó al saber que se había unido al bando enemigo. 

Allí estaban los dos ex-amigos frente a frente.

—¿Eres realmente estúpido o qué diablos te ocurre? Creí que te había dejado en claro que no te quería cerca 

—¡Eso ya lo sé!... lo sé muy bien, pero aún me cuesta entender porque te fuiste de la Toman, se supone que somos amigos, esto es realmente lo más estúpido que has hecho Muto. Y no me vengas con más mierda, regresa a la Toman, no me importa si es con Sanzu, pero no quiero creer que traicionaste a Mikey.

—¿Quién te crees que eres Nahoya? estar con la Toman solo era momentáneo, me da igual lo que pienses, te salvé el trasero por última vez, vete

Muto estaba por darle la espalda y regresar a la guarida de Tenjiku, pero un jalón tosco hizo que diera la vuelta y recibiera un fuerte golpe en la mejilla. Muto estaba en el suelo atónito. Smiley fijo su mirada sobre él por un momento, pero luego solo se resignó y se alejó de él.

—eres un imbécil...estaba dispuesto a defenderte idiota

Eso fue todo.

Smiley dejó de lado su rostro sonriente y lo cambió por un rostro inexpresivo. Estaba decepcionado. Quería salvar a alguien que no estaba dispuesto a ser salvado. 

Smiley se alejaba del lugar bajo la atenta mirada de los altos mandos de Tenjiku. Izana torció su sonrisa, estaba molesto, ¿cómo un chico así terminó por hacer caer a su subordinado? Por lo que articuló un movimiento en su mente. El punto central de la Toman, sus capitanes, se encargaría de un par, incluyendo al chico de sonrisa inmutable.

Por otro lado, Ran Haitani se debatía porqué ese chico tan lindo y atrevido se había aventurado a ir a territorio enemigo, por alguien como Muto. Ran era consciente de que era un enemigo, pero no hay nada más divertido que ir por aquello que era peligroso y prohibido. No había restricciones para él. Así lo visualizó todo el tiempo.

Smiley ya en casa se hecho a pensar en su cama. Angry hizo su aparición frente a él, estaba preocupado y no le había avisado de su llegada.

—¡hermano llegaste! estás bien... ¿qué pasó? ¿lograste hablar con Muto? 

Angry se mostraba ansioso a razón del interés de su hermano por traer de vuelta al chico que le gustaba.

—ese pedazo de idiota...realmente es un traidor, no quiso volver a pesar de que le dije que podía traer a Sanzu con él, no vuelvo a hacer algo tan...tan patético y estúpido—

Smiley tenía un semblante alegre, pero la vena de la frente era visible para su gemelo. Realmente estaba decepcionado y furioso.

—tenemos que ganarles Sou, debemos ganarles en su juego sucio y arruinarles la fiesta

—sabes que no me gusta pelear...pero si se trata de la toman siempre te ayudaré, así que cálmate ¿sí? Muto no merece que te preocupes por él, y menos en estas circunstancias —Souya se dedicó a dar palmaditas en el hombro de su hermano.

Sabía que era un peligro que tuviera la cabeza caliente a razón de la furia que sentía a razón de Muto.

De una decepción a otra, simplemente el destino tenía algo en contra suya. Sin embargo, la vida le traería sorpresas y momentos extraños justo después de aquella batalla. Souya había participado activamente, pero Smiley sufrió una emboscada. Sin embargo, las peleas, las vistas minuciosas y las leyendas que rodeaban a los gemelos hizo que fueran el blanco de otro par de hermanos.

Sin importar la victoria de la Toman, esta había sufrido una serie de cambios entre ellos la inminente disolución y un saldo sangriento en ambas filas. Esta disolución de forma irónica unió a otros y separo a otros. Uno de aquellos lazos fue entretejiéndose entre los Kawata y los Haitani, con una obvia iniciativa por la constante insistencia de uno de los Haitani.
La historia pronto nacería y cambiaría para el par de hermanos. Como las flores que empiezan a brotar en primavera.