Por ti siempre.

Capitulo 1: 8 de Abril de 2025

Kevin 10:46am

Puedo verlo todo desde la cima de este estúpido edificio. El borde se siente como un límite. O más bien como una línea de división. Marcando el fin y el inicio de realidades distintas. La vida y la muerte. Cruzando el borde, se expande el cielo manchado de nubes. Por debajo se extiende el terreno con cientos de hectáreas pertenecientes a mi madre, cientos de hectáreas que algún día me pertenecerán. Mas cerca de mí se puede escuchar, de forma estruendosa, la fiesta que empecé ayer por la noche. El patio sigue lleno de gente, fuera y dentro de la piscina, a pesar de que ya sea de día, siguen enfiestados, tomando y fumando. Como si de eso dependiera su vida. Bueno, no soy nadie para criticar ese estilo de vida.

Suelto el cigarrillo de entre mis dedos, y bajo la mirada manteniendo el equilibrio en el borde de la terraza.

–Kin, esto no es necesario, no hagas estupideces ¿Qué harán tus padres si se enteran? –Escucho la voz de Franco a mis espaldas.

–Me importa un carajo, Fran.

–Bueno, entonces piensa en mí, me sentiré culpable por lo que pase.

Me irrita que Franco se este comportando así, decido ignorarlo por completo.

Respiro hondo, y al suspirar le muestro el dedo del medio. Salto del borde y dejo que la gravedad me lleve. Al caer siento el viento en mi rostro, dándome una sensación liberadora. Mientras la adrenalina recorre mi cuerpo, mis venas, mis huesos, cada mínima parte de mi disfruta de esto. Hasta que el agua me envuelve en un abrazo frio, mientras llego a tocar el fondo. Aun estando bajo el agua se siente la piscina llena de cuerpos de desconocidos, con plata de sobra gracias a sus familias ricas. Al sacar la cabeza hacia la superficie la música me llena los oídos. Todo el mundo presente vio mi salto, y están enloquecidos con eso. Alzo mis brazos al aire, gozando de sus aplausos y silbidos. Tal vez piensen que soy egocéntrico por eso, pero no, solo disfruto de la atención que me corresponde.

–¡Te dije que lo lograría! –Grito tratando que mi voz se oiga por encima de todo el escándalo –¡Mis padres no tienen forma de enterarse, Katy desactivo las cámaras!

–¡Sos el puto amo! –Logra gritar Franco.

–¡No, soy el puto rey!

Veo como Casey se acerca al borde de la piscina, así que hago lo mismo.

–Dios mío, Kin, uno de estos días vos y Fran se van a matar.

–Para nada, de eso se van a encargar las drogas y el alcohol.

–Bueno te aseguro que ahora querrás estar muerto, tu madre vino –mira todo lo que nos rodea –. No creo que quieras que Mónica vea todo esto.

–Carajo, ahora voy.

La llegada de mi madre significa el fin de mi paz. Le encanta hacerme visitas espontaneas, cada que necesita un favor. O darme una noticia de mi padre, con un comentario despreciando y criticándolo. Eso nunca puede faltar.

Cruzo el montón de gente llegando hasta la extensa entrada. La cual está mucho más tranquila, con sus arbustos a los costados del camino pavimentado, que empieza en la reja plateada hasta llegar a la puerta principal del edificio. Las únicas personas son los guardias, y mi madre, la famosa empresaria Mónica Cerver. Al verme interrumpe la conversación que estaba teniendo, dando la orden a los guardias para que se vayan. En verdad me gustaría que se quedaran, esta mujer sabe cómo ponerme los pelos de punta, desde pequeño.

–¿Qué sucede? –Pregunto.

–¿Tanto te cuesta saludar con un "Bonjour"? –Su respuesta es tan seca como su mirada –solo vine a hablar.