Por ti siempre.

Capitulo 34: 19 de Diciembre de 2025

Camilo 17:32pm

–¡Oh, mierda! ¡No me jodas! –Es lo único que Eli logra exclamar cuando le cuento a ella y a Damián que pasare Noche Buena en lo de mi suegra –¿Es en serio?

Asiento con una expresión en mi rostro que deja ver como mis nervios se apoderan completamente de mí.

–Espera, ¿Festejan navidad? –Pregunta mi hermano.

–Pues sí, la familia de Kevin es religiosa, especialmente Mónica –releo el mensaje –. ¿Debería ir?

–¿Por qué no irías? –Exclama mi hermano.

–Porque Mónica me da miedo.

Damián suspira mientras se pasa una mano por el pelo, que ahora le llega un poco más que a los hombros.

–¡Camilo! –El grito de Eli me sobresalta –solo es tu suegra, además iras con Kevin, no creo que pase nada malo.

–Aun así.

Mi mamá abre la puerta de mi habitación y se asoma con una sonrisa.

–Me llaman del trabajo, y Esteban se fue a comprar con Magi, asique se quedan solos.

–Está bien, ma –le digo sonriendo.

Se despide y nosotros volvemos a nuestra charla. Terminan de convencerme para que vaya en Noche Buena. Seguido de eso, Eli nos cuenta que en unos días saldrá con Katy. Aunque no está segura de sí es una cita o no. Desde hace un tiempo que ambas se están coqueteando indirectamente y su energía de tensión sexual es abrumadora.

∞ ∞ ∞

24/12 20:42pm

La mansión en la que vive Mónica es enorme e imponente frente a nosotros. Se encuentra en la costa rodeada de rejas electrificadas y macizas. Tiene un sendero de piedras que llevan hasta la entrada de la casa. Es de dos pisos, y en todo su alrededor hay balcones de las mismas piedras que tiene el sendero. Las habitaciones tienen grandes ventanales de marcos negros. La puerta esta pintada de blanco, frente a ella hay un tapete que dice "Il ne faut que de la force, du succès et du pouvoir"

–¿Cómo te sientes? –Pregunta Kevin.

–¿Es muy tarde para irnos?

–Estarás bien –toca el timbre de la puerta –yo me asegurare de eso.

Quien nos abre no es Mónica, sino un joven rubio, de ojos café que no parece tener más de 17. Está vestido formalmente con una camisa blanca y pantalones negros.

–Señor Cerver –saluda agachando un poco la cabeza, vuelve a su postura derecha y continua –. La señora Cerver lo está esperando a usted y compañía en el comedor...

Me mira y luego vuelve a mirar a Kevin, dejando escapar una sonrisa. A lo que Kev voltea los ojos, divertido.

–Déjate de payasadas, mi madre no está cerca, no tienes que ser tan formal, detesto eso –. Extiende su brazo y lo abraza como si fuesen amigos de toda la vida –. Él es Camilo, mi novio, Cam él es Charlie, su padre trabaja para mi mamá hace años, y empezó a trabajar acá hace poco.

–Si, un gusto, Camilo –se me acerca ofreciéndome su mano, le devuelvo el saludo.

–Igualmente, Charlie.

–Que bien que la señora Cerver me dejo irme en cuanto ustedes llegaran, no sé qué tan bien pueda salir esto.

–Si... –Exclama Kev con un quejido –será mejor que ya entremos, Cam.