𝙵𝚛𝚎𝚎𝚍𝚘𝚖 | Hopemin |

Capítulo 5

—Oliv, pásame el azúcar, querida.— la voz de su madre se escuchó en la cocina.

Estaban preparando la mezcla para hacer mermeladas. Serían para la feria de finales de verano.

—Voy, mamá.— la chica hizo lo que le pidió y volvió a lo suyo de triturar las moras.

JiMin continuó con su trabajo de cortar las manzanas. Pero su mente no estaba allí.

Normalmente sería el más animado en ello, realmente amaba hacer todo esto para la feria.

Pero esta vez, parecía más interesada Elizabeth, quien odia cocinar y realmente es un desastre.

El sonido de la radio de fondo era lo único que llenaba el espacio incómodo.

Las tres chicas se miraban entre sí, haciéndose señas y preguntas con mímicas o muecas.

—JiMin, cariño...— la madre llamó y no obtuvo respuesta, el chico estaba concentrado viendo hacia la ventana, mientras pelaba una manzana sin siquiera ver —Hey, hijo...— tocó su brazo y finalmente obtuvo una respuesta.

Pero el filo del cuchillo rosó la palma del pelinegro, cuando se exaltó. Obteniendo una gran herida allí.

—¡Dios mío, JiMin!— su madre se asustó cuando miró tanta sangre.

El chico se quedó quieto viendo aquel desastre y como las manzanas se manchaban de rojo. Suspiró y caminó al fregadero.

No era la primera vez que obtenía una cortada, había tenido peores, en realidad.

—No es para tanto, mamá, y no grites, me duele la cabeza.— pidió, mientras lavaba sin cuidado la piel rota.

—Creo que de verdad se murió desde que se fue al bosque.— susurró Olivia. Siendo escuchada por JiMin.

El chico le dió una mirada seria, su hermana no sabía nada, no debía andar hablando de más, siempre se mete en problemas por ello.

Su hermana gemela la reprendió —Olivia, será mejor que guardes silencio, JiMin tiene muchas cosas en mente, ahora es el dueño de la granja, es normal que esté distraído.— Elizabeth siempre era así, prefería ver la cosas desde otro punto de vista en lugar de chismorrear.

Es seria cuando debe serlo.

—Iré a cubrir esto, para luego continuar.— apenas dijo JiMin y subió las escaleras en dirección a la habitación.

—Creo que todo está mal con él... Después de pasar la noche afuera, papá ha estado encima suyo y JiMin parece nervioso alrededor suyo.— opinó Elizabeth.

La madre se quedó en silencio pensando en todo lo que estaba pasando, normalmente no se metía en esas cosas, pero su esposo parecía yendo en el sentido incorrecto.

Su esposa sabe que el hombre es bastante estricto, así siempre fue desde que sus hijos fueron adoptados desde pequeños. Pero últimamente parecía odiar todo lo que hacía JiMin y eso, estaba mal.

Su hija tenía razón, JiMin parecía atemorizado de estar al lado de John.

JiMin bajó las gradas de nuevo —Iré por la gaza que se encuentra en el establo, no hay en el baño.—

Y salió, colocándose las botas.

Caminó rápido al establo de los caballos, tomó la gaza y la colocó con el esparadrapo, para dejarla segura.

Ónix comenzó a llamarlo, desesperado por salir de allí. Llevaba días sin salir más allá del corral. Ese había sido su paseo en la última semana.