🔥 ADVERTENCIA 🔥
Este relato tiene alto y explícito contenido sexual
—Ummmm, Ei, ¿eestoy muy borracha?, o en verdad estoy vvviendo a Bakugō y Asuka-chan coggiendo allá? —Pregunto Ashido tratando de enfocar la vista, consiguiendo que un adormilado Eijiro espabilara un poco.
La pareja casi ni recordaba donde se encontraba, pues habían tomado tanto que la noche estaba tornándose demasiado difusa. Sólo tenían claro que habían acabado de follar y tenían pensando irse a dormir, pero cuando Kirishima liberó a la rosada y esta se giró para acomodarse, vio como alguien muy parecido a Bakugō, con una chica muy parecida a Asuka, se levantaban de la silla donde se encontraban para empezar a coger de pie en medio de la habitación.
—Mmmm, creo que tieness razón... —Respondió el peli rojo parpadenado repetidamente para poder ver mejor, y durante algunos minutos, ambos guardaron silencio quedándose fascinados con el espectáculo, empezando a calentarse con aquel baile de cuerpos y concierto de quejidos hasta que Kirishima no pudo aguantar más y empezó a masturbarse invadido por una nueva clase de excitación.
—¿Quieres hacerlo otra vezzz, Ei? —Murmuró la rosada acercándose para ayudarlo a complacerse, sin apartar tampoco la mirada de su pareja favorita, pero entonces, una idea cayó como un rayo en su cabeza haciéndola sonreír de manera maliciosa. —¿O... te gussstaría ir y acompañarlos?
Tensándose en el acto, el peli rojo volteó a ver a su novia con las cejas elevadas, creyendo por un segundo que le había leído el pensamiento.
—Siempre te ha gustado Bakkugō, ¿no? Deberías appprovechar la oportunidad, jejeje. —Declaró Mina tomando el miembro del oji rojo para apretarlo, haciéndolo quejarse de placer aumentando su ritmo cardiaco de manera escandalosa.
—¿Y tú qqqué? ¿Irás por Kiyama? —Replicó él acercándose para lamer el labio inferior de su chica, tan ebrio, tan excitado, que no consideró los peligros de querer hacer realidad una de sus fantasías.
—No, tengo una mejor idea. —Dijo ella con voz melosa, y se acercó al oído de su novio para comentarle lo que quería.
En definitiva, las botellas de vodka que habían comprado estaban haciendo estragos esa noche, pues no pasaron más de unos cuantos segundos de conversación para que el de dientes puntiagudos se levantara y fuera al encuentro de la pareja.
Como era de suponer, Katsuki dio un respingo al sentir un cálido aliento rosarle la nuca, y recordando repentinamente que no estaban solos, volteó su cabeza pero sin dejar de embestir a Asuka.
—Joder, pelos de mierrrrda, qué coño estás haciendo. —Espetó el rubio molesto, pero no lo suficiente al estar demasiado bedido como para comprender bien todo. —¿No ves qqque estoy ocupado?
Kiyama no pareció notar absolutamente nada, pues el placer y el alcohol estaban ejerciendo tal control sobre ella, que su atención estuba únicamente centrada en las sensaciones de su cuerpo.
—Sí, pppor eso pensé... en venir a ayudarte un poco. —Explicó el peli rojo empezando a pasear sus manos por el pecho del rubio, haciendo que este gruñera irritado.
—Joder, Kirishima, vvvete a la mierda. No me interesan las vergas. —Bramó él sacudiéndose levemente del agarre de su amigo, pero su molestia seguía demasiado aplacada como para actuar como normalmente hubiera hecho. —Déjame follar a mi chica en paz.
—Pero me dijissste una vez... que te excitaba que te miraran, ¿no? —Replicó Eijiro a modo de tanteo, recordando nebulosamente aquella vez que ambos se habían abierto para hablar de sus fetiches.
Y para regocijo del héroe resistente, Bakugō detuvo sus movimientos y se quedó en silencio unos instantes, al parecer estando lo suficientemente desinhibido como para considerar las posibilidades.
—Escucha pelo picho, joderrr, no sé qué puuuuta mierda tienes en la cabeza, pero si llego a sentir algo en mi mallllldito culo, te jjjjuro que no van a encontrar tu puto cadáver. —Respondió el cenizo reanudando sus embestidas a Asuka con más vehemencia, haciendo que ella gimiera más alto y la excitación de todos los presentes aumentara de sobremanera.
—Hey, perrrvertido, ¿entonces en verdad te gusta tener público? Jajajaaaa, ¡me encanta! —Soltó entonces Ashido haciendo notar su presencia al fin, haciendo que el héroe explosivo gruñera más fuerte y casi blanqueara los ojos al ver que ella al parecer los estaba grabando.
—Jodeerrrr, maldita mapache. Tú y el peeelos de mierda están putamente locos. —Jadeó mientras daba una pequeña sacudida a Asuka para acomodarla mejor sobre su verga, sacándole otro grito agudo que les encantó a todos.
—Ufff, sí, Bakkkugō, eres tan masculino... —Murmuró Ejiro al oído de su amigo consiguiendo que la piel de este se erizara, y que el cenizo empezara a soltar una sarta de palabrotas mientras jadeaba más fuerte y follaba a Asuka con más rapidez, sólo consiguió aumentar la excitación de Kirishima hasta hacerlo llegar al borde.
—¡Sí! ¡Córrete, Ei, quiero verte! —Exclamó la peli rosa empezando a tocarse también, pensando en ese instante que estaba en el cielo de la perversión. —¡Haz venir a Asuka, Bakugō, siempre he querido verlo!
Y casi como si hubieran sido órdenes para ellos, los deseos de Mina se hicieron realidad, haciéndola sentir tan eufórica, tan absurdamente excitada, que el impulso de levantarse superó a sus deseos de grabarlo todo, lanzándose a los brazos de su novio para que este la atendiera y pudiera unirse también a la fiesta con uno de los mejores orgasmos de su vida.
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Ok, tengo tanta vergüencita de haber escrito esto, que lo único que voy a aclarar esque este relato es una pequeña continuación de la historia de mi libro "Irrompible": Una noche loca.
Adiosh! 🏃♀💨
PD: Sí, en mi headcanon, Kirishima y Ashido son bisexuales.
Nos leemos mañana!
