Capítulo 7

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Narra Eric:

Me sigue ignorando. que no debo ser prejuicioso pero ella tiene ese algo que me atrae de ella, su personalidad, sus ojos, su sonrisa, sus comidas deliciosas y su ternura, es muy cariñosa pero no solo conmigo, también con Pedri , aunque a veces me da esa puta sensación de molestia verlos tan juntos, abrazados o riendo. Antes que Ainhoa se enojara conmigo le pregunté si le gustaba Pedri , me sonrió, lo negó y me dijo no me preocupara que solo me cocinaba a , reí de tanta ternura.
El punto es que la cagué mucho con ella. Cuando me preguntó si no podía pasar nada con ella porque ella no es modelo debí negarlo, me tomó por sorpresa y no pude mentirle, todas las chicas con las que eh salido son altas, piernas largas y sensuales, delgadas, bien vestidas, cabello y maquillaje siempre arreglados y a la moda. Ainhoa es todo lo contrario, no puedo negar que Ainhoa es preciosa, tiene una piel lisa, largas pestañas que adornan sus hermosos ojos color miel verdosos, es una mezcla muy rara pero le hacen ver hermosa, tiene una bella sonrisa y unos labios carnosos que cada vez que me habla me entran unas ganas de probarlos, pero me toca aguantarme.
Y bueno, debo decir que lleva dos días sin hablarme y se siente mal. Discutimos el domingo en la noche y para que me disculpara, el lunes me levanté a las 9 am y le preparé el desayuno, cuando ya tenía todo listo golpeé su puerta pero no recibí respuesta, después de varios intentos abrí la puerta y la habitación estaba vacía, voy a salir del cuarto cuando una idea se cruza por mi mente, un escalofrío recorre mi cuerpo y se me hace un nudo en el estómago. Fuí directo a sus cajones y por suerte su ropa estaba ahí. Casi se me salió el corazón al pensar que ella podría haberse ido. Desayuné solo y sin ganas, creo que me acostumbré a la presencia de ella que con solo su sonrisa ilumina todo el departamento. Pasé todo el día en casa solo, esperando a que llegara a casa para poder disculparme, porque aunque la conozca hace poco le tengo mucho cariño y me hace sentir mal estar así con ella. Eran pasadas las 8 pm y me quedé dormido en el sofá sin darme cuenta, tenía frío pero el sueño me ganó. A la mañana siguiente, cuando me desperté tenia unas tres mantas encima y la tv apagada. Al menos no me odia tanto, aún se preocupa por y me arropó para que no pase frío. Me levanto rápidamente y voy corriendo a su habitación emocionado y con una gran sonrisa, para llenarla de besos por su carita y apretujarla en un abrazo, siempre lo hago cuando estoy muy agradecido con ella, sobre todo cuando cocina exquisiteces, aunque ahora no era la misma ocasión pero el mismo sentimiento. Llevada un día completo sin probar sus deliciosas comidas, un día completo sin verla y sinceramente la eh extrañado mucho. Abro lleno de emoción la puerta de su habitación pero el sentimiento de decepción vuelve a aparecer. No está.
Dieron las 6 de la tarde y ya estoy más que nervioso y preocupado porque nosé nada de ella, llamo a su teléfono está apagado y nadie sabe donde está. Llamé a Pedrihace un rato y tampoco sabe de Ainhoa , se preocupó y hace poco llegó a mi departamento. Antes de entrar dió un par de vueltas por las calles buscandola pero no la encontró. ¿Qué estará haciendo si no conoce mucho la ciudad?, ¿Con quién estará si no conoce a nadie?, ¿habrá comido bien hoy?, ¿y si conoció a alguien y está con él?, ¿y si le paso algo y...¡mierda! La incertidumbre me esta comiendo la cabeza sobre todo las últimas dos ideas, hasta que la puerta del departamento se abre suavemente. Es ella. Viene con un par de grandotes libros en sus brazos y con cara de sueño, pero apenas nos ve cambia su expresión a espanto, quizás por nuestra cara de preocupación.
-Llevo horas llamándote,Pedri salió a buscarte por las calles, tienes el puto teléfono apagado y no te veo desde ayer... ¿donde carajos estabas?- pregunto desesperado.
-En la biblioteca Nacional estudiando- dice seria- y mi celular murió el sábado en la noche cuando llegasta borracho, lo llevaba en mi mano cuando te empujaba y sostenía como podía, pero resbaló y cayó al suelo, murió- se encoje de hombros. Camino hacia ella y la abrazo, realmente me tenía muy preocupado. Cuando la suelto un poco la observo y ella me mira fijamente a las ojos, sin ninguna expresión, es realmente preciosa, tenerla tan cerca solo me hace querer besarla y no soltarla más, pero Pedri me saca de mis pensamientos.
-Nos tenías preocupados peque, creo que tendré que ponerte un chip de rastreo en el cuello por si vuelves a desaparecer- dice mi amigo y ambos ríen, pero Ainhoa ríe a carcajadas, lo que me contagia y río con ellos.
Cuando Pedri se va de casa, tomo a Ainhoa de un brazo y la llevo al sofá. Le pido perdón y le explico que me tomó por sorpresa ese día y por eso no respondí de inmediato, ella no parece muy convencida pero no me discute. Y , le mentí. No quiero perder su amistad y cariño, se a convertido en una persona muy importante para , debo admitir que me gusta, pero no estoy preparado para admitirselo a ella ni mucho menos a los demás, y si no le mentía volvería a desaparecer y no quiero. Llámenme egoísta, pero la quiero conmigo el tiempo que pueda.

Decisiones   ~ Eric Garcia~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora