Volvamos un poco en el tiempo, una pequeña Angie de 3 años se encontraba en el parque, primera vez que iba sola sin compañía de Carlos y los niños no querían jugar conmigo hasta que llego Karla, una niña de 4 años que venía vestida con unos jeans geniales y una playera de mi caricatura favorita, mi timidez desapareció y me acerque a hablarle y ahí fue cuando nos volvimos inseparables.
_______________________________
Actualmente, estaba en la sala con un niño pequeño jugando con sus carritos, ambos sentados en el suelo, sin idea de que hace Carlos arriba.Ahora nos importa de mas o que?
Sonó el timbre de la puerta y Rafa salió corriendo. Al abrir la puerta, una señorita rubia disfrazada de algo parecido a una pastorcita apareció.
--¿Qué se supone que traes puesto?-- cuestione al ver que mi amiga venía vestida como si quisiera invitarme a una obra.
Las ridiculeces se le daban bien
--Pues estaba ayudando a mi mamá con un negocio de promoción, pero el chisme me llamo--entro a la casa como si fuese suya directo a la cocina.
--¿Quién invito a la loca?--dijo Carlos al bajar.
--Creo que yo, pero no estoy segura--mencione observando como Karla abría la nevera y se robaba mi helado.
--¿Con el permiso de quién?--comenzó a acercarse a mí al ver que Rafa nuevamente estaba con sus carritos.
Uuuu tensión me gusta
--No sabía que necesitaba el permiso del moco--avance eliminando el poco espacio que quedaba entre nosotros y él me sostuvo de la cintura.
--¿Desde cuándo son tan cercanos?--la voz de Karla me regreso a la realidad, di un paso atrás y voltee a verla.
--¿Cercanos?, no somos cercanos-- miré nuevamente a Carlos buscando que me ayudara.
--Claro que somos cercanos, somos hermanos--me abrazo por la espalda colocando sus manos en mi estómago --verdad hermanita--
No puedo pensar si me abraza
Trague saliva que no sabía que mantenía en mi garganta, la tensión entre ambos estaba extraña, pero agregar que alguien más nos viera era intimidante.
--Están muy extraños-- camino hacia nosotros --pero no se que ocultan-- nos señaló con sus dedos observándonos desde muy cerca.
--Ven, juega conmigo-- el pequeño Rafa tomo a Carlos de la mano y lo llevo a la sala.
Amo más al pequeño
--¿Qué me ocultas Angie?-- volvió a comer el helado robado
--De eso te quería hablar-- jugaba con mis manos a la vez que hablaba de la forma más susurrante posible.
--Lo besaste-- asentí sorprendida de la capacidad de mi amiga para adivinar las cosas. --Dios Angie, pero eso no es todo ¿cierto?--
Me asusta
--No--me acerqué a su odio y le conté mi nuevo secreto --Lo hicimos--
--No juegues, ¿cuándo?-- me miro esperando una respuesta y como si leyera mi mente se respondió a ella misma --¿hoy?-- menciono y se tapó la boca con ambas manos --Ya eres una zorra-- comenzó a brincar como niña chiquita.
Me asusta pero me gusta
No se si eso es bueno o malo, pero mi cuerpo se relajó enormemente al no ser regañada por mi amiga, digo si a ella no le importo que tuviese sexo con mi "hermano", a mí tampoco debería importarme ¿no?.
ESTÁS LEYENDO
A. M. I. G. O. S.
RomanceLa misma historia de siempre: amor, pasión, tragedia y conflictos, todo esto colocado en la cabeza de un humano que piensa de más las cosas cada vez que las recuerda; dando como conclusión a una historia con muchas revolturas, personajes que no tien...