Epílogo

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Los días de agosto se fueron volando tan rápido que ni si quiera me di cuenta. El primero de septiembre papá estuvo nuevamente con nosotros en casa. No paramos de darle besos y abrazos por todos lados, estaba contenta, de que la operación hubiera resultado tal y como lo habíamos esperado.
Las cosas estaban yendo bien,
mamá me había pedido disculpas por haberme golpeado, me había reconciliado con Sky, y papá estaba nuevamente a nuestro lado.
Habían pasado algunas semanas desde que Justin había decidido alejarse de mí,
y yo ya habría tomado mi decisión. Por más que doliera,
la familia estaba primero antes que cualquier cosa. Por más que mi alma estuviera viva, todo dentro de mí estaba podrido. Sentía que no tenía corazón, él se lo había llevado consigo. Le había regalado todo de mí, empezando por ese pedacito de inocencia hasta llegar a lo más monumental de mí. Mi corazón. No sabía nada de Justin desde hace dos semanas,
y la verdad es que no sentía deseos de hacerlo. No quería seguir atormentándome.
Lo amaba con todo mi ser, y no sabían como me estaba sintiendo ahora mismo. Las personas me juzgaban por llorarle, pero, ¿Quién podría llegar a comprenderme verdadaramente?
Nadie.
Nadie sabía lo que era alejarse del amor de tu vida. Porque él lo era.
Cada día pedía con clemencia hacia Dios que pudiera volver a unirnos. Porque lo deseaba. Hubiera deseado que estuviese por siempre a mi lado, pero, ¿Qué podía hacer?
No sabía nada de él, había desaparecido de la faz de la tierra sin siquiera dejar una huella de sí. No podía explicar lo que ahora mismo sentía. Desolación absoluta, me sentía perdida en un mundo tan grande como éste.
La pesadilla que había tenido por última vez me indicaba que era un aviso. Justin se había alejado de mi lado y había quedado con papá. Entre sus brazos. Pero, era horrible tener que confesar que no quería estar entre ellos. Quería a Justin a mi lado, besándome, haciéndome el amor, gritándome, viendo su vena sobre la frente. Quería ver a Justin romper cosas con cólera, quería ver su sinceridad.
Nunca podía creer que podría enamorarme de esta manera tan reiterativa.
Sabía que mamá, y papá, cuando me miraban a los ojos se compadecían de mí misma. Porque hasta yo misma lo hacía. Lo necesitaba, y hasta un ciego podría darse cuenta de ello.
No creía poder superarlo nunca.
Estábamos en un picnic familiar, mamá le hacía el avión a Sammy mientras carcajeaba. Papá se reía con constancia, me alegraba tenerlo nuevamente aquí. Junto a nosotros. Aunque me entristecía que no pudiese tener su vida anterior, no podía trabajar hasta que el doctor le diera la autorización.
Todos estaban tan felices, que podría ser patógeno. Y me odiaba
por ser la única depresiva en la familia.
Pero no podía hacer nada, ¿Verdad? Mi única felicidad se había marchado por siempre de mi lado sin dejar huellas, más que la de sus labios sobre los míos.
Aún recordaba sus expresiones cuando hacíamos el amor, cuando sonreía y entonces entraba a un mundo nuevo. Cuando me besaba y todo se transformaba a color de rosa, cuando me poseía y tocaba las nubes con las yemas de mis dedos.
Estuve absorta mirando el escrupuloso pasto donde una vez habíamos hecho el amor. Sonreí instintivamente, y mis ojos se llenaron de lágrimas.
Lo extrañaba como el infierno. Aún recordaba la sensación de sus labios contra los míos cuando se había despedido de mí. Todo apestaba.
Me hubiera encantado tanto que Justin hubiese sido de otra manera... ¿Qué hubiera pasado si habría sido normal, y no con sus lados oscuros para afectarnos la vida a todos? ¿Qué pasa si hubiera nacido con otra esencia? ¿Él estaría ahora a mi lado?
Me quité las lágrimas con rapidez para que mis padres no notaran que nuevamente lo hacía.
Lo más inquietante de todo, era que yo nunca había descubierto sus misterios. Nunca me habría revelado nada, más que tenía algunos enemigos. Pero eso no era suficiente.
Yo quería saber más de él.

De sus lados oscuros.

«El destino nos tendrá preparado muchos obstáculos, pero juntos podremos derribarlos».
Sólo si alguna vez nuestros pasos volvieran a cruzar.
Pero tenía las esperanzas de que algún día nos volveríamos a encontrar. Y cuando fuese ese día, nunca lo dejaría ir.

¿FIN?

Dark Sides - Adaptada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora