4.
Luego de llevar como unas cien páginas leyendo terminé durmiéndome. Eso apestaba. Los días eran tan aburridos y tan desdeñosos que me molestaba. No quería volverme anémica por dormir tanto. Pero no tenía nada más que hacer que leer un libro o pasar el rato en mi laptop viendo reseñas nuevas que me recomendaban a diario sobre L.J Smith.
Desperté cuando papá me besó la frente y entonces me di cuenta de que eran como las nueve de la noche. Me quedé unos quince minutos mirando el techo perdidamente y no se escuchaba ningún ruido en la casa, ni el de la televisión encendida ni gotas de lluvias lo que significaba que esta noche no iba a llover. O al menos así lo presentía.
Me levanté de la cama colocándome las pantuflas, sentía mucho frío y me dirigí hacia el armario para sacar un suéter y me pregunté si habían desactivado la calefacción. Fui hacia la habitación de mis padres y ellos dos dormían plácidamente abrazado el uno al otro.
Sonreí por inercia, apoyé la cabeza en el umbral de la puerta observándolos. Mi sueño siempre había sido tener a alguien igual a papá, tierno, consentidor y valiente. Alguien que se preocupara por mí como lo hacía por mamá y aquella muestra de afecto tan descomunalmente tierna. La vez anterior cuando había habido un asesinato en Fort Worth y papá nos mantuvo en casa por más de una semana antes de que pillaran al responsable y colocarlo detrás de las rejas lejos de Texas. Gracias a él todo en el pueblo se mantenía parsimonioso y sereno, ninguna cosa mala sucedía y todos eran súbditos de papá.
Le respetaban siempre, y esa era una de las razones por las que yo también me ganaba cierta reputación con los individuos del pueblo y algunos del instituto. Por supuesto yo jamás le conté nada a papá sobre Barry ni que técnicamente fui llamada como una llorona vulnerable en boca de todos o estaba segura de que él si fuera necesario los pondría detrás de las rejas para que dejaran de molestarme.
Y es que yo conocía a la perfección a papá y estaba segura de que él podría darlo todo por mí y por mi mamá. Si lo hacía por extraños obviamente lo haría por su familia. Yo amaba a mis padres, eran algo esencial en mi vida y sin ellos yo no podría estar acá de píe viendo su amor mutuo y vigoroso.
Eran las diez cuando no paraba de dar vueltas en la cama y supe que no podría dormirme.
La idea de salir de casa era atrayente, aparte de que no creía que nada malo fuera a ocurrirme después de todo. Iría al bosque y quedaba cerca de mi casa. Quizás podría explorar lugares nuevos
y no tendría el miedo de perderme ya que yo conocía mi bosque como si fuera una calle que pisaba a diario.
¿Y cómo no?
Si había vivido en ésta casa por más de un año y todo el bosque había sido explorado por Chloe Gilbert. Me coloqué un suéter mucho más abrigado de felpa que me cubría hasta el cuello y unas botas de algodón.
Tomé la linterna y salí por la ventana cautelosamente a que mis padres no escucharan el cerrar del balcón o se dieran cuenta de que yo no estaba en mi habitación.
Alumbré con la linterna cada paso que daba y quité algunas ramas que se ponían en mi camino. Me incliné para que éstas no picaran en mi cara y quedara con marcas en el rostro.
Vi como los árboles se iban alejando cada vez más y estaba esquivando los arbustos puntiagudos que más parecían ser un cactus.
Divisé la luz de la luna brillando como el rayo de un sol, sabía dónde esa luna se posaba en la noche. En la playa desierta que se encontraba en el extremo del sur.
Caminé haciendo que las ramas crujieran bajo mis pies y a medida que daba más pasos más me acercaba a la resplandeciente luna que me guiaba.
El miedo no estaba sucumbiendo en mí y realmente me pareció extraño ya que yo solía ser la persona más paranoica y miedosa del mundo.
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Dark Sides - Adaptada.
RomanceHolaaaaaa :) volvi! perdon por la tardanza ahora la voy a seguir subiendo! para los que quieren saber la escritora se llama KAT! es una buenisima escritora y yo de verdad que creo que tiene un talento!, pueden adaptarla si quieren solo aclaren que n...