Coincidir ©

Capítulo 15

09/Marzo/2019

—No entiendo, si ayer nos vimos—se quejó Thiago.

—Ella dejo claro que quería verme a mi—me burlé.

Steffany llamó a Thiago para saber como le iba pero Camille pasó al teléfono y apenas escucho que yo estaba con él le exigió que tenía que ir a visitarla, que también llevara a Brian, pero hoy era su día con su padre, el cual vive ocupado y es muy complicado que los saqué así que tiene que aprovechar. Fue difícil que entendiera pero al final lo hizo.

—Que mala eres, Fiona, te robaste a mi mejor amigo y ahora te estas robando a mi sobrina—se hizo el indignado.

—Qué te puedo decir, Metiche, todo el mundo me adora—puse un mechón de cabello en mi espalda con un aire de suficiencia.

—Sobre todo tu ego, es lo que más les gusta.

—Estoy aprendiendo del mejor ¿no? Señor "Está camisa me hace ver más guapo de lo que soy", "Todas viene por mi", "Deberías estar agradecida de tener un novio tan guapo, no todas Fiona, no todas tiene esa suerte"—imité sus palabras.

—Estás aprendiendo, Fiona, como dices, del mejor—río mientras parqueaba en la casa de Steffany.

—No te emociones, Metiche, el estudiante puede superar al maestro.

—Si el maestro lo aprueba.

—Aprobaré—aseguré—Así tenga que jugar sucio—bajé del auto.

—Cada quien tiene su carta bajo la manga—lo escuché decir.

—Así es, y yo encontraré la manera para aprobar y superar a mi maestro—dije cuando ya estaba a mi lado enfrente de la puerta.

—Suerte con eso.

—Gracias, pero espero no necesitarla—presioné el timbre.

Al momento la puerta se abrió dejándonos ver a una Steffany sonriente y una Camille eufórica que al instante que me miró se lanzo a mis brazos.

—¡Tía Ailana!

—Hey pequeña, al parecer me extrañaste—le di un beso en la cabeza.

—Mi tío no quería traerte antes— acusó a Thiago.

—Tu tío es un envidioso, pero hoy vine y soy toda tuya. Hola Steffany—salude a la chica que solo nos miraba.

—Hola Ailana.

—Hola tío, hola hermano, nos alegra que estés bien—Thiago se auto saludo.

—Ya no te quiero—Camille hizo un puchero.

—Ahora todo el mundo solo quiere a mi novia, soy insignificante para la sociedad.

—Que dramático, mejor entren— Steffany nos hizo campo para ingresar a la casa.

Camille me arrastró a su cuarto sin siquiera decir algo, Thiago y Steffany se quedaron abajo. Jugamos con las muñecas y a las princesas por un muy largo rato hasta que ya estaba cansada y me pidió que la peinará.

—Tía.

—Dime.

—¿A ti te peinaban cuando eras más pequeña? Así como yo.

—Si, mi mamá lo hacía cuando tenía 5 años.

—¿Todavía lo hace?

—No, ya no puede.

—¿Por qué?

—Porque tuvo que hacer un viaje muy largo.

—¿Ella no te quiere?—sonreí por su pregunta.