Coincidir ©

Capítulo 27

13/Mayo/2019

Me desperté muy temprano para alistarme y alistar mis cosas, como siempre dejo todo para lo último, también tengo que salir antes de la residencia ya que tengo que ir al departamento de Dylan, con Anahí ya habíamos quedado en que yo iría a recogerla a ella y al auto, porque nos iríamos en su auto y yo manejaría, un viaje largo, que me va dejar agotada.

Sé que se estarán preguntando ¿Qué ha pasado con Thiago? Pues les respondo que nada, así es, desde que salí del karaoke muy enojada por lo que dijo esa chica, no he vuelto hablar con él, tampoco tengo mensajes o llamadas suyas, lo que me dice que ambos estamos de acuerdo en dejar un poco de espacio entre nosotros, espacio para reflexionar un poco lo que pasó anoche y en que fallamos, porque ambos fallamos en algo, y tampoco tuvimos mucha comunicación para solucionarlo antes de que creciera el problema.

Ni siquiera le voy a echar solo la culpa a Thiago, que fue quien se besó con otra persona aparte de nosotros dos, porque yo no supe tomar el tema de forma más madura, era lógico que Isabel quería provocarme, y dejé que lo hiciera respondiéndole de manera violenta, también fui demasiado grosera con Thiago, exploté de manera verbal con él, y no se lo merecía. Es que, no es por tener una excusa, pero nunca había sentido lo que sentí anoche cuando vi a Isabel besando a Thiago, como un vacío en mi estómago que además sentía que me quemaba un poco, una sensación desconocida y horrible.

Dejé de pensar en eso y seguí con mi tarea. Cuando ya estaba lista tomé mi mochila y salí de la residencia, camine hasta el departamento de Dylan y cuando llegué le envié un mensaje a Anahí diciéndole que ya estaba abajo, para que ella también bajara.

—Buenos días—me saludaron ambos al llegar a mi.

—Buenos días.

—Ya estoy lista. Les diré lo del embarazo a nuestros padres—me dijo Anahí.

—Oh ¿Estás segura?

—Si, ya lo hablamos—se señaló a ella y a su novio—Y decidimos que era momento de que todos lo supieran.

—¿Los chicos también?

—Dylan les diera mientras yo no estoy.

—Creo que la idea es que lo digan juntos ¿no?

—No, cada quien sabe cual es la mejor forma de decirle a sus familias.

—Si así lo quieren, entonces apoyo su decisión—les sonreí.

—Gracias—me dijeron al unísono.

Tomé las llaves del auto y fui por él, así dejarles la suficiente privacidad para que se despidieron. Mientras estaba en el siento de piloto esperando a Anahí, mi celular vibró, haciéndome saber que me había llegado un mensaje.

Pianista Metiche: Hola, buenos días. Joder, no sé ni como empezar con este mensaje, de verdad entiendo que estés enojada conmigo, sé que la cagué, no con intención, pero lo hice. Isabel era una amiga con beneficios hace mucho tiempo, dejé de verla incluso antes de encontrarnos en el bar aquella noche, no sabía que volvería a aparecer y mucho menos que haría lo que hizo. También entiendo la forma en que reaccionaste, sé que fue lo que te dijo, y lamento que haya tenido que tocar el tema de tu madre, más porque no sabe lo que sucedió realmente. De nuevo, lamento mucho todo lo que sucedió.

Suspiré pesadamente al terminar de leer el mensaje. Teclee en mi celular rápidamente para responder.

Ailana: Hola, buenos días. Ambos hicimos algo mal anoche, no supimos tomar la situación de la mejor manera. Yo también lamento mucho la forma en que te hablé, exploté contigo, y no debí hacerlo.