Capitulo 32:

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-Eres y serás la mejor parte de mi vida. Y siento que nunca me arrepentiré de haberme entregado tan locamente a ti. No te imaginas el amor que siento por ti- Sonreí dulcemente y lo besé para sellar mi trato.

-Esta bien princesa, creo que llegó el momento. -dijo sonriendo alegremente.

-Momento para que?- dije divertida, me encantaba verlo sonreír.

-Bueno...-suspiró- tengo algo para ti, pero antes te contaré todo para que entiendas porqué te lo voy a dar, bueno?- asentí para que prosiguiera. Por mi mente no me pasaba alguna idea de lo que me iba a dar Luke.

-Bueno, estoy un poco nervioso por esto pero lo haré- suspiró profundamente de nuevo, sus manos temblaban un poco- Cuando mi mamá enfermó recuerdas que fui a visitarla?

-Si, lo recuerdo- dije.

-Bueno -prosiguió- ese día llegué por la tarde a la clínica, si alcancé a llegar. Cuando entré a la habitación estaba muy mal y ya se veía demasiado agotada para soportar un día más. Así que me dijo-suspiró, sabía que era un tema difícil así que tomé su mano para que se sintiera seguro junto a mi, el la tomó de vuelta fuertemente- "Mi amor, el ciclo de mi vida ya esta por terminar, pero tu apenas inicias. Sigue trabajando juicioso o busca un trabajo con el que te sientas cómodo", nunca le dije a mi madre en que trabajaba, pensé que tenía ya suficientes problemas para que yo fuera uno de ellos, ella siempre me decía que hubiera querido verme ser un profesional pero yo no fui a la universidad así que nunca le pude cumplir su deseo. Yo estaba lleno de mentiras, pero ese día se dió cuenta. Me dijo "cariño yo sé en que trabajas y sé que nunca fuiste a la universidad pero todavía tienes tiempo de hacerlo, sé que haces en tu vida y con cuántas mujeres te metes, eres un hombre y sabes como haces tus cosas. Sin embargo lo que en verdad deseo para ti es que encuentres a la mujer indicada, que la valores, la ames con la misma intensidad con la cuál yo te amo. Que cuando la mires no importa si tuvieron problemas en el pasado porque estar junto a ella hace que todo se solucione y sientas paz en tu corazón. Sólo a ella, esa con la quieres envejecer le darás esto, sólo si es la indicada".- entonces Luke me entregó una cajita negra- Vanessa para mi siempre serás la indicada- sonrió tímidamente.
Lo miré extrañada con los ojos aguados, abrí la cajita que contenía una reliquia valiosa, un anillo de oro con detalles de perlas blancas.

-Luke que es esto?-nunca había tenido en mis manos una joya tan valiosa.

-Es una tradición en nuestra familia. Y te juro que no me importa si te vas y todo esto termine, sólo...sé que en el futuro cuando me case, si algún día lo hago, no me arrepentiré de habertelo entregado a ti y no a ella. Preciosa, con esto quiero que entiendas lo importante y valiosa que eres para mi, y estoy seguro que mi madre estaría orgullosa de que estés a mi lado. -Sonrió de nuevo, pero esta vez con un poco de dolor en ella.

-Luke, me siento tan alagada y en serio muchas gracias esto es...woo. Pero, cariño no necesitó que me demuestres nada, yo sé con tan sólo mirarte que me amas igual como yo te amo- le acaricié el rostro y lo traje hacia mi acercando nuestras bocas, uniéndolas como tanto me gustaba, entonces el se recostó encima mio apoyado en sus brazos para no caer completamente sobre mi. Besandome intensamente, enseñándome su amor hacia mi y yo le correspondía con gusto. Lo amaba tanto que no me importaba en ese momento sufrir en un futuro. Me segué a la idea que algún día esto terminaría y me dolería como el infierno, pero no me importó porque me di cuenta que lo valía todo. El lo valía todo.

Me dió pequeños besitos en la cara mientras yo reía por la sensación. La noche cayó acompañada con el frío intenso, pero estábamos tan juntos que nuestros cuerpos alcanzaban para calentarnos.

-Preciosa...creo que debemos de entrar. Odiaría si te resfrias- dijo separándose del beso. Hice una mueca de disgusto.

-No, no te alejes de mi- lo junté otra vez a mis labios, y en medio del beso le dije - quiero coser tu boca a la mía, porque allí es donde pertenece.

El sonrió y me mordió el labio deslizandolo entre sus dientes.

-Hagamos una cosa preciosa, yo te llevo a la habitación mientras me das muchos besos, de acuerdo?- Sonreí con satisfacción y estiré mis brazos. Me tomó de la cintura y me levantó colocandome a horcajadas, como chimpancé sobre él. Le besé el cuello, la oreja y finalicé en los labios en el corto camino del patio a la habitación.
Abrió la puerta y luego la cerró detrás de nosotros, me colocó delicadamente encima de la cama y me hizo señas para que me apartara un poco, lo hice y se acostó al lado mio, entonces me recosté encima de su pecho abrazada por él.
Extrañaba tanto esa hermosa sensación de sentirme completa, que ni el mas mínimo detalle te podría arrebatar ese momento de satisfacción y felicidad.
Me sentía afortunada y dichosa, algo extraño en mi vida desde hacía ya mucho tiempo. Con mi dedo índice trazaba sobre su pecho el signo de infinito, demostrando que no importara que pasara, Luke siempre sería mi primer y tal vez mi último amor.

Quien iba a pensar que hace unos meses atrás era una chica normal de diecinueve años sin aspiraciones ni saber que hacer con mi vida, con un novio bipolar y unos amigos normales al igual que yo, viviendo sólo con mi hermana o a veces simplemente estando sola, porque así me sentía a pesar de estar rodeada de personas, me sentía sola.
Ahora era una joven de veinte años con un novio realmente valioso, apuesto, posesivo, amoroso, con un manojo en su mente pero con tanta seguridad lo cuál amaba, y la forma en la que me miraba, bastaba.

-Preciosa?- dijo el.

-Si?- respondí aún en mis pensamientos. Distraída.

-Algún día imaginaste casarte con un..secuestrador como yo?- simplemente soltó.

-Obvio que no. Para serte sincera, yo no creía en eso de conocer al amor de tu vida o juntos por siempre, para mi todo eso siempre me paració algo relativo, un ciclo mas. Hasta que te conocí y entendí que realmente existe eso del amor de tu vida- giré mi cabeza para ver su celestial rostro, el me miraba con su expresión llena de amor y besó mis labios con tanta ternura, tal como siempre lo hacía.

-Bueno ahora dime, que pensaste cuando me viste- se rió un poco. El era tan guapo y claro que lo sabía, a veces era tan creído.

-Bueno, cuando te ví pensé que eras un idiota, altanero, prepotente y malcriado.- me miró un poco dolido. A veces es bueno bajarle el ego.

-Auch, eso fue un golpe bajo-me reí con ganas.






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#MartesDeCapitulo? Hola chiquill@s. Espero que estén bien, bueno ayer no pude subir porque he tenido mucho trabajo y no había terminado el capitulo pero bueno mejor tarde que nunca. Espero les esté gustando y muchas gracias por leer. *Besos Imaginarios* ヽ(*≧ω≦)ノ

Mi LadrónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora