The Auction

Capitulo 6

• Capitulo Seis •
Correcto

LA SUBASTA
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MATTHEW

Estuvimos un largo tiempo en la plaza, Sara me dijo que no tenía hambre así que no ha comido nada, sigue estando un poco callada y la entiendo completamente, no la quiero presionar con preguntas así que dejaré que ella me platique de ella cuando esté lista. A decir verdad, tenía mucho entusiasmo de compartir con Sara mi fetiche de DDlg, probablemente no sabía nada del tema ya que casi nadie habla de eso en público, me gustaría intentarlo con ella y experimentar más cosas...

—¿Te parece si vamos a casa?—hablé.

—Casa...—bajo su mirada.

—Te aseguro que estarás a salvo, no temas—sus ojos se encontraron con los míos, sus pupilas se dilataron bastante y ella solo desvió la mirada al instante.

Tome su mano y regresamos al auto, ella atrás, yo manejando, cinturones de seguridad etc etc, puse un poco de música para hacer el ambiente más relajado, Sara se quedó callada todo el camino mientras miraba a la ventana, yo la veía por el retrovisor repetidas veces sin que ella se diera cuenta, su perfil era tan bello, su nariz perfecta, pestañas bastante largas, labios rojos, todo en ella era bastante tierno y lindo...

Es solo una niña, Matthew..contrólate.

Ese pensamiento rondaba por mi cabeza cada segundo, mi pecho se apretaba cuando pienso en eso..es una niña apenas, no me estoy aprovechando de ella, solamente que me gustan chicas como ella, inocentes y con un corazón sincero es todo lo que necesito.

—Sara—la llamé, ella reaccionó y me miró por el retrovisor.

—¿Si?

—¿que edad tienes?

—Cumpliré 18 el siguiente mes—no es tan malo...

—Perfecto—seguí manejando, ninguno de los dos habló hasta llegar a casa.

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SARA

Sinceramente todavía no me daba toda la confianza este hombre, se veía bastante tenebroso con ese estilo tan apagado, su mirada fría, era tan alto como un puto poste de luz, su voz grave y ronca, literalmente todo el daba escalofríos, aparte de que yo no tengo confianza con casi nadie, a tal punto de desconfiar de mi propia familia...

(...)

(...)

(...)

Llegamos a la casa de Matthew, era extremadamente gigante y moderna, había ventanas gigantes por todas las paredes y el interior se veía ordenado y limpio, abrí mi boca en O como sorpresa y Matthew rió.

—Te gusta mi casa, ¿Huh?

No le respondí y solo me quede mirando a todos lados.

—Puede que agregue un par de cosas más—dijo tranquilo cerrando el carro.

No despegue mi mirada de la enorme casa color negro con blanco, todo el pasto estaba totalmente verde y bien cuidado al igual que los arbustos al rededor.

—Oh y espera a que veas el interior—Matthew agarro las llaves de la casa y abrió la puerta principal—Adelante—entre a la casa, estaba fresca y olía a colonia de hombre.