Después de unos minutos llegamos a la casa de lucia, baje del auto, pero aún me negaba a entrar.
Olivia: la verdad no creo que sea necesario que espere aquí, puedo tomar un taxi y esperare afuera de mi casa.
Lucia: no creo que sea buena idea, así que entre por favor.
Lucia abrió a puerta y me indicó que pasara, yo aún me encontraba un poco dudosa pero no tenía otra opción que entrar.
Era un pequeño departamento, pero muy lindo además de que estaba impecable, todo estaba perfectamente ordenado y olía muy bien.
Lucia: adelante, tome asiento mientras voy por las cosas para limpiarle la herida.
El doctor había dicho que cada tres horas deba limpiar la herida para evitar que se me infectara.
Mientras lucia iba por las cosas yo aproveché para enviarle un mensaje a mi hermana, le dije que había tenido un inconveniente con mi auto y que había tenido que venir a la casa de una compañera para hacer un trabajo. No pensaba contarle lo que había pasado porque de hacerlo ella se lo diría a mi madre y ella se preocuparía demasiado.
Lucia: ¿le gusta la pizza? Es que no tengo nada preparado para comer, ¿está bien si pido pizza?
Olivia: amm pues si si, si está bien.
Lucia: vale
Después de pedir la pizza lucia me pidió me recostara en el sofá, se puso en cuclillas a mi lado y levanto mi playera, apenas rozo mi pie con la yema de sus dados y sentí como mi corazón se aceleraba, mi piel se erizo y ella lo noto.
Lucia: ¿tiene frio?
No tenía ni un poco de frio, por el contrario, sentía demasiado calor sentía mi cara arder y solo por ese pequeño rose.
Olivia: si, un poco
Lucia: voy a cerrar la ventana y prender la calefacción.
Olivia: bueno
Después de cerrar la ventana y prender la calefacción lucia volvía a ponerse a mi lado, comenzó a limpiar la herida cuidadosamente.
Lucia: tiene muchos tatuajes
Olivia: si unos pocos
Lucia: ¿sabe cuántos son?
Olivia: no, ya perdí la cuenta
Lucia: y es el único lugar donde tiene
Olivia: también en la pierna
Lucia: ¿y son tantos como estos?
Olivia: quizás un poco mas
Lucia: jamás lo habría imaginado, siempre la veo usando alguna sudadera.
Olivia: aunque quisiera no podría mostrarlos dentro de la escuela
Lucia: ¿por qué no?
Olivia: tengo que cubrírmelos porque de otra forma no podría entrar a la escuela
Lucia: pero que tontería
Olivia: pues así me lo dijo la antigua directora
Lucia: pero ahora yo soy la nueva directora y yo no tengo ningún inconveniente con eso, así que ya no tiene por qué ocultarlos
Olivia: ¿lo dice de verdad?
Lucia: sí, claro
Olivia: gracias, gracias por eso y por haber estado en el hospital conmigo, por traerme a su casa y por curar mi herida.
Lucia: no tiene que agradecer, lo habría hacho por cualquier otro alumno.
La pequeña sonrisa que se había formado en mi rostro desapareció al escuchar esas palabras, al mismo tiempo que sentía como si me estuvieran apuñalando nuevamente, pero esta vez cientos de cuchillos dirigidos directo a mi pecho, fue una sensación que desconocía totalmente y que era terrible.
Sonreí forzadamente
Olivia: es cierto, pero aun así se lo agradezco.
Vi la cara de lucia y podría jurar que vi arrepentimiento en ella, pero no dijo nada.
Se hizo un silencio un tanto incomoda, hasta que escuche un sonido provenir de mi sudadera que estaba a un lado, saque mi celular ya que era de donde provenía dicho sonido, era mi hermana mes estaba llamando. Tome el teléfono y conteste
Yuts: estoy afuera de la dirección que me enviaste
Olivia: tan rápido
Yuts: si, Salí un poco antes del trabajo, ¿sales o toco el timbre?
Olivia: NOO, no no, ya salgoHola a tod@s los que leen mi historia.
Primero que nada, me gustaría comenzar agradeciéndoles su apoyo, la verdad es que soy totalmente nueva escribiendo, aunque lo más seguro es que ya se hayan podido dar cuenta de ello ya que mi redacción no es muy buena que digamos, sé que los capítulos son muy cortos pero la verdad que ya casi no me queda tiempo para escribir y por eso mismo me gustaría preguntarles si la historia les está gustando o si de plano no es muy de su interés.
De saber que si les gusta seguiré haciendo espacio para escribir y así poder continuar con la historia.
Gracias y saludos 🙂
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Los ojos de Lucia
RomanceEra la directora de mi universidad, y sin duda de quien menos imaginé enamorarme.Pero no todo es tan fácil. Lucia una mujer de 36 años y heterosexual que jamás tuvo interés por las mujeres, ahora se enfrenta a un nuevo sentimiento por una alumna de...