Olivia Greyson
—¿No deberías estar en la universidad? –pregunto mientras como de mi cereal–
Jaden, con cara de dormido está intentando hacerse unas tortillas, que ya se le van quemando dos.
Él me fulmina con la mirada y suelto una carcajada.
—¿Querés que lo intente? –pregunto acercándome hacia él–
Niega y cuando llego a su espalda, lo abrazó por detrás y le doy un beso a su trabajada espalda, en una muestra de cariño.
Son las ocho y algo de la mañana. Nos acabamos de levantar hace poco, aunque en realidad ya estábamos despiertos solo que Jaden no quería dejarme ir, y él no quería levantarse.
Así que como pude, lo traje hasta la cocina para que me cocine algo. Pero la idea de las tortillas no es muy buena que digamos.
Comienzo a darle más besos por el lado lateral de su espalda y subo hasta su hombro, claramente poniéndome en puntitas porque no llego.
—¿Seguro? –pregunto y él asiente con una sonrisa, cuando la tortilla sale intacta de la sartén–
Lo miro contenta y festejo.
¡Una tortilla decente!
Dejo de abrazarlo y corro hacia la cocina.
—¡Olivia no corras, te vas a caer! –me regaña al pelinegro–
Agarro una bandeja de jamón y queso, y se la lanzo para que la atrape, por suerte lo hace.
Me acerco de nuevo y lo observo como me prepara el aperitivo.
—Todavía no puedo comer tanto jamón –murmuro para que no le ponga tanta cantidad–
Él me mira y me sonríe, con su dentadura perfecta.
—Está bien, lo partimos a la mitad –seguiere y asiento–
Minutos después ya estamos de nuevo en la cama.
Comiendo tranquilamente de nuestras tortillas y el cereal que se lo está devorando Jaden.Lo miro comer, parece un pequeño niño comiendo. Varias manchas de una salsa que le puso a su tortilla decorando su definido pecho, al igual que sus largos y varoniles dedos. Varias gotitas de la leche salen salpicadas para la cama, ensuciando está.
Sonrio al notar cuanto lo extrañé. Verlo desayunar ya era una costumbre para mí, que tan solo en una semana de su ausencia me había olvidado las malas costumbres que tenía de manchar todo.
Él sigue en ropa interior, y de tan solo bajar la mirada siento mis mejillas arder al pensar en lo que pasó anoche. En lo que hicimos anoche.
Jaden simplemente lo deja pasar, no habla del tema y es algo que le agradezco, porque siento que moriría de la vergüenza hablando de eso con él. Lo hacía con Nick, pero con Jaden es diferente. Yo lo veía como un amigo, un hermano mayor como Anth, pero meses después me dí cuenta que el cariño que le tenía no era tan familiar, o solo de amigos.Me acerco a darle un beso cuando termina, y al separarme se queda mirándome con las manos en mi cintura.
—¿Estás bien? –pregunta confundido–
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𝐃𝐎𝐍'𝐓 𝐆𝐈𝐕𝐄 𝐔𝐏 | #𝐑¹
Teen Fiction«Terminada» (segundo libro en mi perfil) 𝐃𝐍𝐆𝐔|| ¿Puede ayudarla? ¿Puede ayudar a esa chica de ojos celestes a olvidar su pasado y ser feliz con él? ¿Ella va a dejarse? Está historia es un Fanfic que se puede leer como tal, sin problema, porque n...