Capitulo 37

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Yuuji dormitaba en la cama, cuidaba de Satoru, pero el cansancio empezaba a ganarle y necesitaba un descanso. Se acostó al lado del alpha y trato de refugiarse junto a él.

Había pasado una semana, desde la gran batalla. El mundo empezaba a hablar de ellos como los protegidos del mar. También su relación era motivo de chismes, la mayoría mal intencionados al oír que el albino tenia pareja y odiar ese hecho.

Pero ahora en la paz de la post batalla, todos parecían mas alegres. El ambiente relajado, había vuelto y las fiestas con alcohol, bailes y cantos volvieron.

Aquel enfrentamiento donde Gojou salio vencedor, dándole de nueva cuenta el titulo del mas fuerte de los mares, dejó un gran estandarte y miedo a sus enemigos, para que no volvieran a pensar en atacarlo.

Además el rumor del omega... claramente ya se había ganado un respeto por todas sus hazañas, dándole el nombre de "la reina de los mares"

Así que era un suicido cualquiera que se quisiera meter con la pareja más poderosa del mar.

Suguru... sobrevivió, sí. Pero su vida se vio perdonada con la condición de ser el protector de por vida de Yuuji, aunque el omega se negó, tuvo que ceder por el mal trago que le daba, saber que si se negaba, la vida del mejor amigo de Gojou quedaría en sus manos.

Claro que Megumi se encargaría de vigilarlo. Por otro lado, desmantelaron a los lideres del comité pirata, verdaderamente solo eran un estorbo, no tenían poder y solo veían por su propio interés, Gojou sin mucho trabajo los hizo apartarse y si no morían.

Ahora en su momento de paz, Gojou por fin se dejo vencer por todo el esfuerzo físico y ha estado descansando y curandose a manos de Yuuji, que también ha estado comandando la flota entera.

Ha mantenido en silenció sus dolores y miedos, porque no quería que lo separaran del alpha. Nanami, fue quien curo a ambos, mientras la doc de la tripulación de Gojou ayudo a los demás.

Itadori agradeció ese hecho, porque enterarse de que tuvo un aborto espontáneo por la batalla y el estrés, era algo que no quería que nadie mas escuchara.

Su hermano se entero por accidente y aunque no eran muy unidos, lo consoló y apoyo, ya que Gojou seguía inconsciente. Sukuna no pidió disculpas por todo lo que hizo, pero cuido por unos días al omega y le contaba anécdotas de su madre... trataba de animarlo a su manera y funciono.

Al notarlo con la alegria de siempre, se marcho para su siguiente plan y esta vez iría a molestar a su familia con sangre de reyes. Su plan seguía siendo obtener poder y eso no cambiaría, aunque si prometió visitarle con frecuencia.

Al no tener a su hermano, lo dejo pensar con claridad sobre el bebé. No le dolió ya que realmente no estuvo consciente de si quiera el embarazo. El cachorro apenas y debió tener una semana, era claro que no sobreviviría... pero la noticia le había hecho despertar un deseo que no tenía.

Era prudente desear tener una familia? El alpha a su lado había proclamado varias veces quererlo como pareja y también querer hijos... él no lo había pensado nunca, ya que su plan nunca fue salir de su isla.

Ahora tenia amigos, una tripulación, poder, dinero y pareja?

Porque eso eran no?

-Que sucede?- la voz ronca de Gojou lo asusto, pero volteo rápidamente y choco con esos ojos azules que amaba.

-Que susto...

-Lo siento, estabas muy concentrado.

-Yo...- se avergonzó al recordar sus pensamientos.

Grito del marDonde viven las historias. Descúbrelo ahora