POTENTIAL DADDY❞ jjk

❝Vacaciones❞

09

—¡Kim! ¡Chicos!

Rosé agitaba la mano en el aire y mantenía su mochila bien apretada con la restante, trotó dejando a Jungkook atrás para que estacionara la camioneta mientras ella se reunió con aquél trío que tanto le había agradado.

Luego de la reunión, intercambiaron números e integraron a Rosé con ellos en clase, las horas libres e incluso la invitaban a salir con ellos a comer en una que otra ocasión ya que disfrutaban su compañía, además, ella se acopló a ellos muy fácil, sobretodo a Kim.

—No vas a creer la mierda que estamos viviendo en este instante— le dijo Taehyung una vez se saludaron todos, Jungkook también se acercó— ya se fueron.

—¿Cómo?

—Eso, ya se fueron todos— Jimin señaló los espacios dónde se suponía estarían los autobuses— la hora de encuentro era a las ocho cuarenta y dos de la mañana, llegamos a las ocho en punto y el que vigila el parqueadero nos dijo que los buses partieron a las siete.

Jungkook revisó la hora en su reloj de muñeca y arqueó una ceja, eran las ocho y media, se suponía que tenía que revisar que todos estuvieran, suspiró, alejándose para hacer algunas llamadas y así preguntar qué sucedió. Pero antes, señaló a la cafetería.

—Vamos a esperar allí en caso de que llegue alguien más, y a desayunar, que Rosé tiene hambre hace dos horas— con el teléfono en la oreja, sonrió divertido— Kim, las agujetas.

Observó a sus pies, desatadas. Bufó, luego se preguntaba por qué vivía en el suelo y con moretones en el cuerpo.

—Dame acá— Taehyung le pidió que levantara el pie, lo haría el mismo— Kim no sabe atar sus agujetas, no entendemos por qué nunca aprendió.

—¿Es de verdad?

—Lo es, cuando lo logra por ella misma, no le queda bien, se sueltan— Jimin se colocó en sus cuclillas, revisando el nudo restante en el otro zapato— pronto llegará el día en el que pueda sola.

Mientras ese día llegaba, ellos dos seguirían haciendo el trabajo por ella. Rosé tomó el brazo de Kim una vez terminaron, caminando hasta adentrarse en la cafetería y Jimin les contaba que Jeseol le había hablado, diciendo que era lo más raro del mundo.

Se hacía el ciego o realmente lo estaba, no sabían.

Rosé dejó a Taehyung pedir algo por ella, diciéndole también que podía pedir por Jungkook y mientras esperaban, Jimin decidió que quería tener fotografías de los momentos como ese.

—Mm, ayer estaba espiando las cosas de Jungkook para ver si podía encontrar las respuestas del exámen que tendremos luego de esto— dijo la rubia, como si no fuese nada malo— no encontré nada, pero si pude notar que eligió a Taehyung para ser quien lo ayude en el proyecto de maestro- estudiante de final de carrera.

El mencionado levantó los puños al cielo muy emocionado, así que aplaudieron contentos por él, aquél proyecto era algo muy importante pues básicamente contaba como experiencia para el futuro, le daría muy buenas referencias.

—Diablos, es la mejor noticia del año.

—Si, pero intenta actuar sorprendido cuando te lo diga porque me pidió que no dijera nada— bebió de su té frío, disfrutandolo— ahí viene, tampoco mencionen su humor pésimo, estos días ha tenido problemas y todo le molesta.

Kim no se había percatado de su presunto mal humor, sólo se había sorprendido de verlo con ropa más casual, lo cuál no debería pues era lógico, iban a un sitio con playa, el calor en todo su esplendor, por supuesto que ese era un factor que no parecía detenerlo de usar manga larga.

Suspiró con pesadez.

—Todos se han ido, así qué, propongo llevarlos a todos en la camioneta y con suerte llegaremos a la par de ellos o incluso antes pues están atascados en el tráfico.

—¿Y cómo llegaremos antes?

—Jungkook conduce como si fuese el último día en el que va a respirar— Rosé le entregó su bebida achocolatada y él aceptó, gustoso— y también conoce otras rutas para llegar.

—¿Y si hay espacio para todos?— Kim se mostró preocupada y apenada, no quería molestar.

Pero el maestro asintió, despreocupado.

—Claro que sí, tres en los asiento traseros y uno de copiloto. Andando.

Fue a pagar, Rosé observó con complicidad a los dos varones y asintieron al mismo tiempo.

—Kimie, espero que no te moleste si quiero ir atrás con los chicos— se tocó la nariz— Jungkook realmente conduce muy rápido y adelante solo me dan más náuseas.

La castaña solo asintió, tranquila.

—Está bien, me gusta viajar de copiloto— terminó su malteada viendo a la ventana.

Por supuesto que Jimin y Taehyung habían puesto en contexto a Rosé, ella era cercana al mayor, podía ayudarlos, sin embargo habían tomado la decisión de continuar con sus tácticas de conquista sin decirle una sola palabra a Kim para evitar ponerla nerviosa.

Tal vez así ella actuaría de manera más natural, estaría más calmada y no alerta todo el tiempo a lo que tenía que hacer para acercarse a Jungkook. Simplemente ser ella misma.

Y Kim creía que ya se habían rendido con ese diario de Potential Daddy como si sus amigos realmente tiraran la toalla sin sacar sus mejores armas. Jimin había notado que a Jungkook parecía gustarle más la mujer natural que al mismo tiempo era elegante, se dió cuenta de ello la noche de la reunión por la manera en la que se quedó viendo a Kim llegar a su encuentro.

Usarían eso a su favor, además, Kim era naturalmente atractiva, no sería algo complicado.