oblivion [NamJin]

38. ¡corre!

—¿Y qué hace mi omega? —se sentó un alfa abrazando a Taemin por sus hombros— ¡Ey, Jin, Mark!

—Min-Ho —rugió Mark—, has arruinado el buen ambiente, esfúmate —sacudió su mano para que se fuera

—Yo sé que estás molesto porque no te cortejo Mark, pero no seas tan cruel.

—Agh —viro los ojos—. Los alfas no se pueden meter en este lugar ¿o no Jin?

—Hmm... —el rubio dejo de tomar su lechita rosa y de leer la revista de moda que compartía con Mark—, bueno, hoy es domingo ¿no?

—¿Y eso que?

—Que todos los domingos el internado es abierto, pueden venir visitas y a los alfas se les permite entrar a nuestra área, así como nosotros —se señaló—, podemos ir a su zona, así que técnicamente no ha roto ninguna regla.

—Ah, olvide eso.

—Vale —sonrió victorioso el alfa— ¿Y bien? No me contestaste Taemin.

—¿Sabes? Estás tocándome sin mi consentimiento, eso se considera romper las normas —hablo mientras seguía leyendo—, esfúmate.

—Pero.

—Ya oíste —dijo con felicidad Mark

—Como sea —bufo y se paró—, de todos modos, no venía solo a verte a ti.

—Ah, qué triste —hablo sarcásticamente tomando una papa frita

—Quiero hablar contigo, Jin.

—¿Yo? —se señaló

—Sí, es... de cierto tema.

—Amm... —el omega volteo a ver a Taemin para ver si él le negaba o algo por el estilo, no obstante, este seguía leyendo—, si no tardas mucho, con gusto podemos hablar —se paró de su asiento y siguió al alfa

—¿No te molesta? —pregunto Mark

—¿Qué?

—El alfa que te corteja se acaba de llevar a tu amigo, yo me sentiría triste o al menos incómodo.

—Da igual —encogió los hombros y dejo de leer para observar a Mark—, esto de cortejarme no va a durar, se cansará.

—Uy, claro —rio—. Te va a pasar lo mismo que con Jin.

—¿Hablar de qué? —ladeo su cabeza

—Supe que ayer viste a Won.

—Ah, eso, bueno —rasco su nuca— ¿Sucede algo?

—Me gustaría saber si tienes su nuevo número.

—¿Nuevo? —asintió el alfa—. Amm... nunca hablamos por mensaje, prefiere mandarme cartas.

—¿No hablan por mensaje?

—Antes lo intenté, pero, nunca llegaban mis mensajes, era... extraño.

—No llegaban —repitió con voz baja—. Bueno, y... ¿El número de Taemin?

—Lo tengo, pero sucede lo mismo con... —se interrumpió—, aguarda, ah —chasqueo los dedos y negó con su cabeza—, no te lo voy a dar.

—Anda Jin —rogó—, Mark no me lo va a dar a menos que le regale algo o le traiga un alfa, y, es poco probable que exista alguien que quiera cortejarlo, además de que Tae nunca, de verdad, nunca, lo haría.