¿Cómo pudiste?

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Los chicos seguían apoyando lo mejor que podían a Lilith, esperando que su malestar disminuya aunque sea un poco, aunque sabían que eso era improbable aún tenían esperanzas de que ella sea capaz de manejarlo un poco, solo un poco mejor.

Todo ese esmero de su parte no sirvió de nada cuándo Luz decidió abrir su boca.

+ ¿Quién es Eda? – esa frase, esa simple frase llenó de miedo a Lilith, tanto que le permitió ponerse de pie para intentar acercársele estupefacta.

+ ¡¿Qu-qué dijiste?! – un fuerte escalofrió recorrió todo su cuerpo, la cantidad de miedo que estaba sintiendo ahora mismo rivalizaba con su dolor físico. Ante la reacción de Lilith la pequeña Luz se asustó un poco, resguardándose detrás de Camilla.

+...Me da miedo – esas palabras perforaron el corazón de Lilith, destruyéndolo en incluso más pedazos que antes. En ese momento la impotencia se apoderó de ella, ya no pudo seguir caminando así que tras detenerse súbitamente volvió a caer.

No para llorar o golpear el suelo, tan solo este pequeño evento le arrebató todas sus energías, se vio en la necesidad de sentarse un rato para analizar la situación.

+... ¿Qué le pasó? – esa pregunta vino acompañada de una voz vacía, toda la determinación de antes parecía haberse esfumado, ante eso los chicos se quedaron en silencio un corto periodo de tiempo, evaluando que podrían decirle.

+ No lo sabemos, ella de repente empezó a actuar de esa forma y no hemos logrado curarla. Estamos tan preocupados cómo tu – Willow respondió la pregunta compartiendo algo de su desanimo. Solo algo, porque la magnitud de las muertes era algo que jamás iba a experimentar de la misma forma.

+... No importa, descubriré cómo solucionarlo... de alguna forma lo haré – Lilith volvió a recuperar algo de su determinación anterior, quería parecer fuerte aunque sea un poco pero esa actitud no iba a servir para evitar que los chicos se compadezcan de ella.

+ Lo descubriremos todos juntos, somos un equipo y no vamos a dejarte sola – Gus dijo eso con ánimo, esperando que con eso sea capaz de quitarle algo de su carga. Lilith lo miró con una pequeña sonrisa, agradecida de su apoyo.

+ Gracias por eso... – no sonaba del todo convencida con la idea de dejar que ellos se involucren, pero conociéndolos es seguro que lo harán de todas formas, aun así intentara alejarlos lo más que podía del peligro.

Los chicos por su parte asumían que Lilith no iba a dejarlos ayudarla, así que planeaban no hacerle caso sin importar lo que les diga. Todo era por su bien a fin de cuentas así que a la larga ellas les agradecerá.

Sin embargo algo que no iban a agradecer eran las palabras de Amity.

+ Perdón... – incluso en esta situación ella seguía disculpándose, eso levantó un poco la preocupación de Lilith ya que ella asumía que se disculpaba por no poder hacer nada por Luz, en cambio Willow y Gus tenían otra cosa en mente.

+ Bien Amity, habla – Willow se paró de brazos cruzados, recordó lo que estaba ocurriendo pocos segundos antes de que Lilith llegara, así que ya estaba preparada para escuchar a Amity, estaba dispuesta a ignorar y perdonar lo que sea que le diga ya que no podía ser tan malo, de pasó tienen cosas más importantes entre manos.

No pudo haber estado más equivocada.

Amity escupió de un solo golpe todos sus errores, sin pausa y con mucha prisa botó absolutamente todo, a diferencia de sus hermanos estaba más desesperada, más ansiosa al hablar pero aun así las lágrimas eran incapaces de salir. Por lo visto ya había agotado su reserva.

A cada palabra que ella decía la incredulidad de los presentes aumentaba, el asco, la rabia, la indignación, y más se apoderaban de ellos. Querían callarla, que se detuviera de una vez para que dejara de dañar su imagen, con lo que dijo era suficiente no hacía falta empeorar las cosas.

Nos OlvidasteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora