Gemelos a la obra

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Los gemelos estaban teniendo muchas dificultades para mantener a raya a sus Abomatrons. A diferencia de Amity ellos no tenían una defensa tan sólida, como lo único que disponen a su alrededor es pura tierra por más que la endurezcan no servirá por demasiado tiempo, así que les tocó improvisar mucho.

Usaron múltiples ilusiones para aturdir a Kikimora, de esa forma ella no podía darles instrucciones a los Abomatrons y se permitían maniobrar un poco mejor, ahora se podían enfocar en tratar de escapar de los Abomatrons. Por lo visto tenía órdenes de capturarlos por encima de encontrar a Skara y Boscha, de otra forma hace tiempo hubiese usado los otros 14 Abomatrons a su disposición para revisar la casa.

De hecho ellos se habían dado cuenta que Kikimora no podía lastimarlos, varias veces ella ha hecho un par de círculos mágicos con claras intenciones de atacarlos pero siempre los deshacía, los Abomatrons solo intentaban capturarlos a pesar de tener muchas armas distintas, se estaban limitando a usar su única arma no letal, disparar masa de abominación para capturar.

Eso era bastante útil para ellos, significa que por lo menos sus vidas no corrían riesgo, al menos a corto plazo. Así que tan solo debían concentrarse en derrotar o distraer a los Abomatrons en lo que Amity regresa, fácil ¿verdad?

+ ¡Ahhh! – pues no, no lo era.

Aunque distraían a Kikimora al ahogarla en un mar de tornillos los Abomatrons seguían atacándolos. Son lo bastante independientes para seguir atacando sin órdenes en tiempo real, por más que solo intenten capturarlos siguen siendo una amenaza considerable, más aun cuando son 10 de ellos.

Los disparos literalmente provenían de todos lados así que debían permanecer en constante movimiento, usando algunos hechizos de por medio para defenderse y retrasarlos aunque sea un poco.

Intentaron usar un fuerte hechizo de agua y luego hielo para intentar congelarlos por completo, solo obtuvieron unos 10 seg de respiro ya que les fue fácil romper el hielo.

Crearon un muro en frente de un grupo de ellos, movieron tierra, la mojaron y luego la calentaron rápidamente. Ya que funciona cómo defensa pensaron que rodear algunos de ellos con eso debería retrasarlos, pues, resulta que sus disparos a quemarropa son lo bastante fuerte para destruir en un instante los muros, así que de nuevo obtuvieron solo unos pocos segundos de respiro.

Lo único que lograron en realidad fue que los pierdan de vista, aunque de nuevo, eso solo fue así por un par de segundos, los Abomatrons rápidamente los localizaron y continuaron con su ataque, cosa que ya los estaba hartando.

A pesar de sus constantes distracciones ellos aún eran capaces de ubicarlos sin problema, eso estaba elevando sus niveles de frustración hacía el cielo, ya que querían dejar de correr sin sentido debían descubrir la forma en que los localizaban y detenerlo.

Así que empezaron con lo básico. Crearon mucha agua y con un hechizo de fuego igual de fuerte la evaporaron en un parpadeo, al envolverse en un poco de hielo con una capa de tierra por encima fueron capaces de soportar la ola de calor que se generó con esa explosión, con eso los Abomatrons no deberían verlos.

El siguiente paso fue crear varios clones para que caminaran en distintas direcciones, hubiesen podido crear más clones pero solo querían ver si ellos seguían el sonido.

La respuesta fue un sí de momento, atacaron primero a los clones pero poco después los atacaron a ellos, eso se debió a que ellos no podían quedarse quietos donde estaban, por más escondidos que estén sería estúpido permanecer en un lugar conocido, por eso decidieron moverse a una zona segura para evitar un posible ataque, el precio de esa decisión fue un disparo que rozó la cara de Edric.

Nos OlvidasteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora