Tóxiko[LYANNO]

Chapter 36.✅

Al día siguiente.

—¿No piensas decir nada?.

—Lyanno, me acabo de despertar y honestamente no tengo ganas de poner mi atención en problemas desde tan temprano.

—¿Problemas?

—Pues aunque duela escucharlo es como se siente esta noticia, serán toda la bendición que quieran pero no...

—¿No qué?

—No es el momento,¿por qué te cuesta entender?

—No me cuesta entender, Harmony.—seguí preparándome el café hasta que me di cuenta de que no debía hacerlo porque supuestamente era perjudicial.—Pero tienes que pensar con cabeza.

—Claro..me lo dice el que pensó con el bicho y por eso nos vemos en esta situación ahora.

—También querías, no me pongas toda la culpa a mi ahora.

—Por eso me tomaba las anti.

—Para lo que te sirvieron..

—Exacto.—sonreí falsamente.

—¿Por qué no hablas de una vez, que quieres decir que te estás guardando tanto ah?

—No esperaba esto y no tenía intención de ser madre y que me acusases de haber hecho dios sabe qué para quedarme embarazada me molestó porque me hace pensar que no conozcas a la persona con la que estás, yo no necesito amarrarte a ti ni a ningún hombre ni mucho menos ser tan porqueria para poner una vida inocente en peligro por algo así.—por su expresión pude ver que estaba algo incómodo, esperaba notar arrepentimiento pero no pasó.—Y el jodio' complejo de salvadores que tienen ustedes los "hombres" me tiene aborrecia', si tanto te encojona y tanto dudas entonces agarras la puerta y te vas para el carajo y ya yo te envío la invitación del baby shower o del velorio según se me canté del toto,total..si hubiera sido un plan hubiera fracasado,¿no?, pendejo.

—Deja de hablar mierda, Harmony.—me agarró por la muñeca.—Piensa bien lo que dices porque te puedes arrepentir después.

—¿Y tú, te puedes arrepentir después?

—Ya te pedí disculpas.

—Suelta, me haces daño.—dije ignorando lo que dijo.—Suelta.

—No voy a dejarte sola y no es por un complejo de salvador sino porque también es mi bebé y tengo el mismo derecho que tú.

—Pero no lo quieres, Edgardo, ¿quién querría el bebé de una loca que dejó de cuidarse para amarrarlo umm?.Nadie sería tan pendejo.—tensó la mandíbula.—¿Me equivoco?

—Ya, deja eso.

—Cabrón.—el cambio en su expresión me asustó.

—Ya, Harmony, se acabó.Tranqulízate .

—No me toques.—pedí cuando intentó acercarse a mi.—Tengo que irme.

—¿A dónde?

—A un lugar,¿qué te importa?

—Harmon...—pero no le deje terminar,salí de la casa con algo se prisa.