Años atrás...
Se podía sentir la tristeza en la mansión Malfoy, hacia mas de dos semanas que la señora de la casa no había salido de cama, el ambiente se sentía aun mas pesado y triste inundando cada habitación de esta.
Como todos los días, Draco camino hacia su habitación, el sabia mejor que nadie que las esperanzas eran pocas, y prefería pasar el mayor tiempo posible a su lado.
Entro a la habitación viéndola en la cama con su mirada perdida.
Draco y Astoria Malfoy habían tenido un matrimonio casi perfecto, se amaban desde hace mucho tiempo y no había nada que los hiciera separarse... hasta ahora.
—Buenos días, cariño. —murmuro sentándose a su lado.
Ella lo miro con una media sonrisa y cerro los ojos al sentir las caricias que el le proporcionaba en el cabello.
—¿Cómo amaneciste hoy?¿Como te sientes?
—Estoy cansada. —murmuro.
—Te traeré tu medicamento, estoy seguro de que eso te levantara un poco.
—Draco. —tomo su mano débilmente al ver como intento levantarse.
—¿Qué pasa? —la miro.
—Ya no necesito el medicamento. —murmuro negando.
—¿De qué hablas? —pregunto.
—Es hora. —asintió.
—Astoria, no digas tonterías. —rio sin gracia. —Iré por tu medicamento y te sentirás mejor.
—No Draco. —negó. —Solo quédate aquí conmigo.
—Astoria. —murmuro.
—Ven siéntate.
Draco obedeció sentándose a su lado, sentía ese nudo en la garganta quemar, aunque quería evitarlo sus ojos no tardaron en llenarse de lágrimas solo al verla.
El creía estar preparado para esto, era algo que tarde o temprano iba a pasar, pero ahora no quería dejarla ir.
—Escucha Draco, hay algo que tienes que saber. —tocio.
—No, no tienes que estar tranquila. —murmuro. —Se que me amas, tanto como yo a ti. —beso el dorso de su mano.
—Es algo más. —suspiro pesadamente.
—No quiero que te fatigues. —negó. —Estoy aquí, contigo.
—Draco... no soy quien realmente crees.
—Astoria no hagas esto. —negó. —Eres una excelente mujer, excelente esposa. —beso su frente. —Y excelente madre.
—Es que... Scorpius. —murmuro mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.
—Tranquila. —murmuro. —Yo cuidare de el de la mejor manera, el tendrá todo el cariño que se que le quieres dar, el es mi prioridad, no tienes que preocuparte por eso.
—Perdóname. —murmuro. —En el pasado hice muchas cosas de las cuales me arrepiento.
—Tú lo has dicho, el pasado es pasado y no tenemos que hablar de esto y menos así.
—Traerá consecuencias. —murmuro por lo cual Draco difícilmente escucho.
—Prefiero quedarme con la persona de la que me enamore. —murmuro antes de besar su sien. —Prefiero quedarme con los recuerdos buenos que me diste, el pasado no me importa ya.
—Te juro que no quería que eso pasara. —sollozo.
—No me importa. —negó. —Tu eres la luz que ilumino mi vida en los momentos mas difíciles, y ni siquiera el pasado que dices puede cambiar lo que siento por ti. No hagas esto. —negó.
—Te amo. —murmuro.
—Y yo a ti Tori, y yo a ti. —suspiro.
Lentamente sintió como su mano dejo de apretar la suya y en ese momento comenzó a llorar aferrándose a su cuerpo.
Ella se había ido.
Y Draco ni siquiera sabía todo lo que le esperaba.
ESTÁS LEYENDO
𝐏𝐞𝐧𝐢𝐭𝐞𝐧𝐜𝐞| 𝐃.𝐌✔
Hayran Kurgu𝐏| Serie de ejercicios laboriosos o públicos impuestos por los sagrados cánones al culpable de ciertos delitos. -Te vas a arrepentir de todo lo que me hiciste pasar.-sonrió.-Y yo seré tu penitencia en carne y hueso por siempre, por que no, el no ve...