—Creo que me voy a dar una buena ducha—soltó Aiden apartándose de la mesa y la enorme pila de papeles.
Llevaban alrededor de dos horas buscando información del tal Sowler en los registros del gobierno a los que había accedido la hermosa Meliza en cuestión de minutos.
Ya habían logrado marcar en el mapa varios puntos que ellos definieron como de "interés" para el perverso investigador privado. Sin embargo, habían quedado varados, sin encontrar ningún patrón reciente o algo que denotase algún tipo de movimiento por parte del hombre, por lo que el chico de cabello color nieve encontró oportuno la idea de darse un baño en un intento por refrescar su mente.
—¿Quieres compañía?—ronroneo en respuesta Meliza obsequiandole un guiño de ojo.
Al oír aquellas palabras, el rostro de Luca palideció, mientras observaba a sus dos compañeros de investigación frente a ellos con su mirada gris tormenta desorbitada.
El hermoso chico de cabello color nieve sonrió de forma lupina antes de responder.
—Sería un placer chica en llamas, pero la ducha de Dorian es muy pequeña para dos personas—respondió Aiden, uniéndose al hilo de la conversación—¿Necesitan algo?
El chico de mirada tormentosa susurró por lo bajo en un escaso susurró inaudible "No" sin embargo, tanto Meliza como el chico de cabello blanco como la nieve lo ignoraron, al igual que lo habían estado haciendo durante toda la noche.
—Es una lastima—ronroneo de forma melosa la chica de cabello color vino, mientras seguía con la mirada a Aiden de camino al baño. Cuando regresó la vista al frente se encontró a Luca con el ceño fruncido—¿Qué ocurre?
El chico de mirada gris tormenta negó, sin embargo el ceño fruncido no abandonó sus facciones.
Meliza era inteligente y astuta, sabía perfectamente que le ocurría al ex agente, más aún, ella misma había estado provocando esa reacción en él ignorándolo durante la noche y coqueteando con Aiden.
Necesitaba con urgencia hacerlo ver y reconocer sus sentimientos y emociones para aclarar la situación, evitando así más melodramas.
—¿Tardarán mucho en llegar?—preguntó él con frivolidad.
—No lo sé...¿Preguntas para saber cuánto tiempo tienes con Aiden en la ducha?—ronroneó ella fingiendo desinterés mientras limpiaba una uña bien afilada.
—Necesito terminar de armar este jodido rompecabezas... se que falta algo, algo clave para encontrar a Daphne... y no logro verlo—escupió el enfadado.
Meliza sabía muy bien que aquel mal humor se debía en parte a la ausencia de Daphne, pero también a la evidente ignorancia que recibió por parte del hermoso chico de cabello color nieve.
Pero conocía a Luca demasiado bien como para saber que él jamás lo reconocería abiertamente, el ex agente no se mostraría vulnerable ante las emociones, no otra vez.
—Y seguirás sin descubrirlo por un buen rato más, hasta que llegue Dorian al menos—respondió ella arrastrando las palabras—Entonces...¿Qué harás con el tiempo que tienes? No creo que seas tan tonto como para pasarlo observando un pedazo de papel sin información relevante.
Luca río de forma cínica mientras entornaba su mirada tormentosa hacia ella.
—¿Quieres un revolcón para matar el tiempo?—se burló el ex agente.
—No hablaba de que mates el tiempo conmigo—ronroneo la hermosa mujer de cabello color vino apartándose de la mesa, yendo hacia la puerta principal—Iré abajo a despejarme y fumar un cigarro... llamaré a la entrada antes de subir.
Y al finalizar está última oración, ella salió al exterior del penthouse de Dorian, dejando a Luca solo con sus palabras aún flotando en el aire.
Solo en compañía de Aiden, quien se encontraba tomando una ducha.
ESTÁS LEYENDO
Besos de Medianoche 2: Caos
Storie d'amoreLa agente Daphne Moon es secuestrada por el obsesionado investigador privado, Erick Sowler. Dorian y Luca comienzan su desesperada búsqueda mientras lidian con la llegada de Aiden y la cacería de la agencia, quienes buscan al exiliado agente por inf...