15.El rescate!

135 50 31
                                    

Alan y Eitan están totalmente renuentes a que me entregue. Emma por su parte es la única que está pensando con la cabeza fría y por lo menos entiende de qué hay que rescatar a mi madre.

Ya ha pasado una hora y media desde la llamada y aún no solucionamos el tema y todos estamos en desacuerdo. Solo queda aproximadamente unos 35 minutos antes de recibir la llamada con las indicaciones.

Me retiro a mi habitación ya que, no vamos a resolver el tema porque yo no estoy dispuesto de ninguna manera ya abandonar a mi madre y los Weters no están dispuestos a dejarme ir.

Entro al baño y en doy una ducha rápida al salir me coloco un Jersey y encima de este el abrigo negro que tanto me gusta que le pertenecía a mi hermana, para abajo un pantalón ajustado a mi cuerpo y unos tenis negros, mi pelo como siempre suelto.

Me coloco en mi cama esperando a que suene el celular. Tengo bien claro que haré hasta lo imposible porque vuelva a casa sana y salva.

—Se lo que piensas hacer—Me sobresalto ya que se suponía que estaba sola.

—Aaa eres tu—Digo algo desanimada ya que quería estar sola y pensar tranquilamente en todo lo que iba a hacer.

—Recuerda que estoy aquí para orientarte.

—Tambien vas a decir que es una locura que me entregue.

—No iba a decir exactamente eso, pero si, saldrán muchas cosas mal si haces lo que estás pensando.

—Ellos no me dejaran ir, tengo que hacerlo.

—No Lizi, piensa con claridad.

—No lo sé pero tengo que intentarlo no puedo quedar de brazos cruzados.

—Lo se y también sé que nada de lo que te diga te va  hacer cambiar de opinión así que presta atención a lo que te voy a decir.

—Vale.



(…)

Hace un rato me llamo me dijo donde me recogerían y que fuera sola. Me escape por la ventana de mi habitación, ya que aún estaba la escalera. Espero que no se den cuenta aunque en el fondo quiero que si, que se den cuenta y vengan, pero algo dentro de mí no podía aceptar el plan que ellos me propusieron, no podía poner en riesgo la vida de mi madre.

Llevo no más de 4 minutos esperando en el lugar acordado. Veo a lo lejos una auto negro con las ventanas pintadas, frena justo en frente, me habré la puerta y subo. No se si he tomando la mejor decisión pero ya no hay vuelta atrás.

Sin darme cuenta me colocan una capucha en la cabeza, el viaje se me hace una eternidad, siento como el carro para, oigo voces y de pronto me agarran de los brazos y tiran de mi hacia abajo.

— Imbécil tratarla bien— oigo como le gritan al chico que me agarró.

—Lo siento señorita— dice  mientras me quita la capucha.

Miro a mi alrededor, no reconozco el lugar, hay por lo menos 5 personas junto a mi. El chico que está a mi lado con la capucha en mi mano, es alto tiene el pelo rubio y sus ojos, no se porque pero en dan tranquilidad no se parecen a ninguno de los otros que están presentes. Hay dos hombres cerca del auto y justo al frente está el.

—Erick—su nombre sale de mi boca con un sabor amargo.

—Helizabet, me sorprende que me reconozcas ahora.

—Como olvidarte pedazo de mierda, donde esta mi madre. —pregunte directa.

—¡Traiganla!—da la orden y de repente veo a mi madre salir de adentro de la gran casa.

Salgo corriendo hacia ella y la abrazó con todas mis fuerzas.

—Lo siento mamá, lo siento tanto—digl llorando mientras la abrazó aún.

—No tengo nada que perdonarte amor, al contrario bebé.—Veo como sus ojos se llenan de lágrimas.

—No te guardo recor madre, me lo merecía, no te preocupes por eso. —La beso en al frente.

—¡Que patético reencuentro!—dice el molesto chico que tengo justo atrás.

—¡No es asunto tuyo!—Digo mientras agarró a mi madre por el brazo.—nos vamos.

—Enseeio crees que te dejaré que te vallas—rie a carcajadas—tenemls un trato Helizabet ella se va, tú te quedas.

—Como sé que llegará sana y salva a mi casa.

—Porque te doy mi palabra y yo siempre cumplo, ya te dije que no me interesa tú madre.

—No confío en ti, iré con ella hasta la casa y regresaré—dije apretando aún más fuerte el brazo de mi madre.

—No cariño, no permitiría eso—Dice mi madre mientras nos mira nerviosa.

— Mamá tranqulizate confía en mí, tengo 18años tienes razón caundo dices que siempre seré tu niña, pero está niña tiene que enfrentar su destino y este es el momento.

—Nena, está gente son muy peligrosa.

—Lo se mamá, confía en mí por primera vez en tú vida.

—Bla bla bla—dice Erick mientras mueve las manos en forma de burla.—Cual de las dos es más patética. Bien iremos, pero no intentes engañarme porque no seré tan amable con tu madre la próxima vez.

—No habrá próxima vez, tienes que prometerlo, volveré contigo pero no tocatas a mi madre ni a Yei nunca.

—Lo prometo, pero seras mía por siempre.

≈Esta noche será larga

Subimos al auto y al momento nos colocaron las capuchas, mi madre y yo tenemos las manos agarradas.

—¿Te trataron bien?

—Si, no te preocupes mi vida, no me tocaron ni un pelo.

—Es un alivio, me estaba volviendo loca pensando en que te harían daño.

Mi madre y yo seguimos ha mando todo el camino, pero de pronto el carro frena.

—Esta es la entrada de la ciudad la dejaremos aquí.—Dijo está voz fría que me eriza solo de escucharla.

—Vale entiendo, ¡mamá te amo!— Aquellas palabras me sorprendieron a mi misma, hace tiempo no las decía.

—Mama te ama más amor, eres mi tesorito. Cuidate mucho y regresa pronto a casa.

Nos abrazamos por dos minutos aproximadamente en los que aprovecho para decirle algo en el oído y le pasó un papelito.

—Ha sido suficiente ya estoy alto de tanto sentimentalismo por hoy— Erick la jala hacia abajo.

—¡Mamá llama a Alan el vendrá a buscarte!

No se si en escucho ya que el auto arranco, alejándome de mi madre, de mi ciudad, de Yei y de toda la seguridad que podía tener, alejándome de los Weters. No sabía si entregarme era la mejor solución pero ya está hecho. Pero en mi corazón tengo esperanza porque se que no me dejaran, no me abandonaran, harán todo lo que esté en sus manos para ayudarme.

≈Espeeo que sea pronto≈ pensé imaginando la cara de angustia que tendrá Alan en este momento.

Paso más o menos los mismos minutos que antes, me bajan del auto y me quitan la capucha, el primer rostro que veo es el del chico alto con voz aterrorizante.

— Bienvenida  al círculo rojo Helizabet.


Hola, feliz fin de año, hoy es 31 de diciembre y por ser un día tan especial hice doble actualización así que corre, pasa al próximo! !

Espero que esté les haya gustado,🥰

No olviden votar y comentar si fue así💕

Alan ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora