Cross the Line {Cursed-Blessed}

CAPÍTULO I ISCALE

CAPÍTULO I
ISCALE

El Sol se encontraba en su punto más alto, el príncipe Jongseong llevaba días cabalgando en compañía de varios hombres y mujeres. Según le había ordenado el rey Kingyo antes de partir de Erontios, al suroeste del reino se encontraría con otros hombres que lo estaban esperando en la frontera para partir hacia las Tierras Inhóspitas.

Luego de varios días viajando, lentamente la extensa llanura por la cual cabalgaban dejó su verdor atrás para convertirse en tierras más áridas, con poca flora y fauna.

—¡General! ¡Hay algo enfrente! —anunció un chico de cabellos rubios que cabalgaba a su lado.

Jay entrecerró los ojos intentando ver lo que se encontraba más allá. Delante de ellos habían varias carpas y personas quienes voltearon a verlos al escuchar los cascos de sus caballos acercarse. Al llegar al campamento, la gente los recibió con miradas hostiles, cosa que incomodó un tanto al muchacho, pues no esperaba ser recibido de esa manera.

Un hombre alto, musculoso y con múltiples cicatrices en el rostro se paró sin miedo a ser atropellado delante del caballo del joven príncipe, haciendo que el animal se detuviera abruptamente y se parara en dos patas, por consecuencia, el resto de los equinos también se detuvieron. 

—Soy Park Jonseong, hijo del rey Sigli y la reina Amarilis , príncipe del valeroso pueblo de Nostriel y general del Ejército de Pandora —se anunció el rubio sin perturbarse ante la mirada que aquel hombre le daba—. Solicito hablar con su teniente. —El hombre lo examinó de arriba abajo para luego dar media vuelta e iniciar a caminar.

—Síganme —se limitó a decir el extraño.

Caminaron durante varios minutos entre las tiendas del campamento hasta llegar a una carpa singular, pues esta era más grande, alta y todas las banderas de los reinos de Hypen adornaban su entrada.

Jay descendió del caballo de un salto y volteó a ver a su segundo al mando.

—Aguarden aquí mientras hablo con el teniente. —Su subordinado asintió ante sus órdenes y la transmitió hacia el resto del ejército inmediatamente.

El príncipe de Nostriel caminó detrás de aquel misterioso hombre que los había conducido hasta ahí en primer lugar. Dentro de la carpa había varios objetos, mesas, armas, mapas y armaduras de toda clase. Apenas pusieron un pie dentro, varios de los hombres y mujeres presentes voltearon a verlos.

—¡Teniente Carwell, el príncipe Park Jonseong ha llegado! —anunció el guía.

La gente se hizo a un lado lentamente hasta dejar a la vista a un hombre aún más alto y musculoso que el primero, su larga barba castaña estaba trenzada y sus ojos azules resaltaban gracias a que se encontraban pintados con un típico color negro. Jay se acercó a este y extendió su mano.

—Park Jonseong, príncipe de Nostriel y general del Ejército de Pandora. —El hombre lo examinó con desconfianza.

—Cirrus, a un lado, no me dejas saludar apropiadamente al príncipe —dijo una voz femenina detrás del hombre, este se movió a un costado dejando ver a una chica.

Jay la observó sorprendido, la muchacha era joven, de largos cabellos negros con reflejos rojos los cuales estaban agarrados en múltiples trenzas, piel de color chocolate y profundos ojos negros; un arete circular cruzaba por su nariz y el tatuaje en forma de águila que llevaba en su brazo izquierdo le hizo saber al chico que ella no sólo era parte del pueblo de Nostriel, sino que también tenía un alto rango en el ejército.

—Teniente Carwell Kuma, es un honor conocerlo, su alteza —saludó la chica haciéndole una reverencia, acción que fue imitada por el resto de los presentes.