Leigh.
Salí de la ducha y no bajé a cenar, le envié un mensaje a Nicole diciendo que dormiría porque me dolía la cabeza, ha dicho que me dejaría cena en el microondas. Acabo de despertar y luego de bajar en busca de algo de comida, he decidido volver a subir y encender mi vieja laptop.
Recuerdo que cuando comencé mi relación con Nicole quise borrar todo recuerdo tortuoso de Matt que me impidiera seguir, lo hice por ella y por mí, más por mí que por ella... Pero se entiende.
La laptop vieja estaba guardaba en el armario en una caja donde dejaba los pocos recuerdos que quise conservar de Matt, su cómic, su móvil, una camiseta que usaba para dormir, sus gafas y la laptop. Lo demás fue donado... Y en esa donación, un montón de bolsas y cajas... Allí se fue todo mi amor a Matt, porque ya había encontrado a quien completaba mis esquemas y superaba toda expectativa mal formada se amor que Matt Greer creó en mí. Nicole me enseñó a amar en serio, me dio cosas que Matt jamás siquiera hizo, Nicole me contuvo desde un inicio, y eso me ha creer que tal vez... Ella absorbió todo lo negativo que yo era... Y la he enfermado.
Suspiré.
Rachel me asegura que yo no he tenido nada que ver, que deje de culparme por la depresión de Nicole, que el hecho de haber estado deprimida porque perdí a mi marido con depresión no me volvía una culpable de lo que le sucedía a Nicole... pero... ¿Quién sabe? Sólo Nicole sabía realmente... Y ahora ni siquiera ella podría explicármelo.
No quise gritarle hace rato, no quise discutir, pero todo es tan pesado para mí constantemente, no dudo que para ella también pero... Realmente estoy tratando todo el tiempo, y no puedo dejar de culparme de forma absurda cada vez que pienso en que ella no recuerda nada... Mientras que yo anhelo que ella recuerde cosas que probablemente la seguirían lastimando.
La laptop se encendió con un documento abierto que jamás acabé.
"Todos me dicen que lo superaré, la gente dice que no es el fin del mundo, pero... ¿Por qué se siente como si lo fuera?"
Suspiré leyendo aquello, y encontrándome igual que como cuando perdí a Matt. Perder a Nicole es repetir errores... Dios debe odiarme para permitirme fallar dos veces, no debería ocurrir así, pero no puedo rebobinar lo que ha pasado.
—La gente dice que no es el fin del mundo, porque no es el fin de su mundo. —Leí.—Ellos no tienen que aprender a vivir en un mundo que acabó... Tú sí. —Sentí mi mentón temblar.
Cerré los ojos aferrándome a los recuerdos con Nicole... Que irónico.
Flashback.
—¿Qué hay en esa laptop?—Preguntó Nicole viendo como acomodaba nuevamente la caja de Matt en nuestro armario. —Sé que la caja es de Matt, pero la laptop era tuya.
—Sí, es que... —Me detuve y volví a sacarla dejando la caja color marrón sobre la cama donde mi novia estaba recostada con las piernas abrazadas a las sábanas blancas. —Tengo muchas cosas que me recuerdan a Matt, y... Además de las fotografías de nuestra boda que he bajado de la nube y he preferido dejar aquí.
—¿Y... Aún las ves?—Preguntó algo insegura.—No me molesta, es sólo que... Me gustaría saber.
—No, pero de vez en cuando leo algunas cosas...—Me senté a su lado y encendí la laptop. —Y noto lo mucho que ha cambiado mi vida para bien. —Admití.
Ella sonrió algo orgullosa de saber que la razón por la que yo era actualmente feliz se debía a todo lo que me ha entregado.
—¿Por mí?—Preguntó tomando mi cintura logrando que suba a su regazo.