Ya había pasado una semana desde lo ocurrido, y aunque para muchos la paz ya se encontraba reinando en sus hogares; para mi era todo lo contrario. Debía terminar con unos cobos sueltos que aún quedaban esparcidos por ahí.
-Señor Park lo esperan en la sala de juntas- expreso mi secretaria a través del comunicador.
-Voy en seguida- dije de manera educada.
Con cuidado ordene los documentos necesarios para la reunión, esta sin duda seria una muy interesante.
-Hermano tienes todo?- pregunto Joel una vez que me encontraba fuera de mi oficina.
Asentí.
-Todos están en la sala?- dije acomodando un poco mi saco.
-Si, y la verdad quiero que esta mierda acabe de una vez. Ya me esta dando jaqueca- una mueca se dibujo en su rostro. Odiaba tanto como yo esta situación.
Y cabe mencionar que al igual que él, yo también quería terminar con todo esto lo más rápido posible. Ya quería volver a mi hogar al lado de mi mujer y mi hija.
Desde lo que paso con la mierda de Choi, mis instintos protectores han aumentado considerablemente. Ha había situaciones incluso en las que Flor me reprocha que estoy siendo muy paranoico. Sin embargo, no quito esto. No pienso dejar que las alejen nuevamente de mi, no podría vivir con ello.
Joel movió su cabeza en manera de apoyo. Por mi parte relaje mis músculos y como todo un cazador di la señal a mis hombres para que abrieran la puerta del lugar donde se llevaría a cabo la reunión.
Todos giraron sus cabezas al momento que el sonido de la puerta abriéndose retumbo en el lugar.
Algunos tensaron sus cuerpos cuando hice acto de presencia. Eso más que todo me produjo cierta satisfacción. Con pasos firmes, fui ingresando más en la estancia, no iba a dejar que estos idiotas acabaran con mi confianza. Casi muero de la risa al darme cuenta como el rostro de más de uno de los presentes comenzó a mostrar arrepentimiento de estar hoy en esta sala.
Por un instante observe a Lombard, el cual rodó los ojos frente a la situación. Le resultaba divertido todo eso.
Desgraciado.
Las ganas de estrangularlo no se me quitan desde aquella vez que quiso intentar tomar lo que me pertenece. No obstante, en este momento debo actuar con astucia. Su presencia, para mi desgracia, es importante ahora. Por lo cual debo mantenerme calmado y alejar por un instante todo mi repudio hacía el.
Dejando de lado esto, me vi en la obligación de concentrarme en las personas que se encontraban sentadas frente a mi. Inmediatamente hubo un personaje que se gano mi completa atención. Este no mostró ninguna expresión al momento que se dio cuenta de mi presencia, solo se mantuvo con su mirada fija en mi. Por lo que tuve que reprimir un risa.
Pobre ingenuo.
Con total tranquilidad tome asiento en la silla que encabezaba la mesa de juntas. Joel se posiciono a mi lado, junto con mi secretaria.
-Un placer verlos señores- dije escaneando a cada uno de los presentes- los escucho.
Cruce mis manos sobre el escritorio, mientras mis ojos iban directo a la persona responsable de todo este espectáculo.
-Creo que el motivo por el cual estamos todos aquí, cada quien lo sabe- dijo el joven tranquilamente, mientras se colocaba de pie- hace algún tiempo di una propuesta en esta misma sala, la cual se basaba en implementar una alternativa independiente que fuera de vital provecho, sin la necesidad de recurrir a una sociedad fuera de la empresa.
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Siempre Mi pequeña Flor [#2 Saga Flores]
Storie d'amore"Volvi a caer. Eres mi perdición" El dolor de perder a su hermana casi acaba con ella. Sin embargo, no todo es tristeza. Con la llegada de su hija, Ella volvio a sonreír, se hizo mas fuerte y logro salir adelante. Pero a pesar de tratar de olvidarlo...