T&V: Antes del beso en el andén.

Punto de partida

Queridos mamá y papá:

¡Beauxbatons es preciosa!

Merlín, mi corazón está en Hogwarts, pero me alegra estar lo que pudo ser mi escuela, aunque sea solo un año.

La gente aquí te recuerda con mucho cariño, mami. Me han detenido profesores a preguntar por ti y mandarte sus buenos deseos. No me aprendí los nombres de todos, pero Madame Máxime en persona se me acercó para eso.

En fin, antes de que me lo preguntes: tío Charlie ya se comunicó conmigo, y en cuento comuniquen salidas, le diré para que sepa donde verme, papá, no te preocupes.

¿Adivinen a quien me encontré? ¡Ian también vino! ¡Merlín, es alto como una columna! Lo extrañaba mucho. Camille y Zade por fin lo conocieron. Él, curiosamente, sí parece emocionado por participar del Torneo. Todos lo parecen. Zade puso 10 veces su nombre el primer día, por decir algo.

Camille y yo literal solo queremos ver los juegos en paz, la verdad. Ella les manda saludos, por cierto, que me ha pedido mandárselos.

¿Cómo van las cosas por allá? No sé cuándo lean esto, pero por favor que la distancia no me impida enterarme de cualquier novedad en la familia.

Con todo el amor del mundo, y extrañándolos desde ya,

Toire

- ¿Qué haces, Toire?

-Escribo a mis padres, Cam.

- ¡Ay, me los saludas! Es más, mira, la foto que nos tomaron llegando. Bueno, una copia. Seguro les alegrará el día- ofreció Camille recordando aquello, haciéndola sonreír. Victoire la metió en el sobre junto a su escrito, sonriente.

- ¡Que guapos salimos, la verdad! - dijo sonriendo, agradeciendo de nueva cuenta a su amiga.

- ¡De que! Te dejo, tengo clase. ¡Me choca! - la chica se rió de su amiga, quien le enseñó la lengua infantilmente-. ¿Qué haces, Winston?

-Miro a los chicos- reconoció sin pena alguna-, Cam, ¿Cómo es que no te has fijado en alguno? ¡Son lindos! - reclamó Zade, haciéndola reír algo apenada.

- ¿Qué quieres que te diga? No soy ciega, soy tonta...-se burló de sí misma, aun avergonzada.

-...Enamorada...-se burló Victoire risueña, haciéndola enrojecer aún más.

-Es lo mismo. En fin, no hagan nada irreversible. Nos vemos en un rato- se despidió Camille antes de dirigirse a su aula.

- ¿Entonces tú y Wood terminaron? – preguntó Victoire confundida. Zade suspiró.

-No. Al menos, eso creo. Pero no estamos bien...- respondió claramente dolida-. Siento que exagere. Pero es que, si me fastidió, además, estaba tan abrumada...por la noticia...

-Desde luego... ¿Él lo sabe?

-Asumo que sí. Orión ya le habrá dicho...-pensó en voz alta, perdida en sus cosas.

- ¿Qué planean hacer?

-Buscar a Alexander. O a Sarah. Espero que no sea algo complicado. Sus cuerpos, quiero decir. Quien se hizo cargo, donde los enterraron, si nadie lo hizo, por qué nadie lo hizo. Me niego a creer que vivieron sin conocer a nadie...