29

727 89 29
                                    


Cuando nos separamos, Sana me miró de forma coqueta y al mismo tiempo burlona.

— ¿Por qué estás tan sonrojada?, ¿Te ha gustado mucho mi beso? —preguntó descarada.

La empujé nerviosa y cubrí mi rostro con las palmas de mis manos. Sana me volvió a atrapar contra su cuerpo y se acercó de forma peligrosa a mi oído. Un leve estremecimiento recorrió mi cuerpo.

— ¿Por qué has hecho eso? Podrían vernos.

— ¿No era eso lo que querías? Para eso me trajiste para fingir ser tu novia, no actúes tan tímida ahora, querías darle celos a tu jefa —susurró en mi oído—. Está justo atrás de nosotras, mirándonos.

Me aparté de Sana y voltee mi vista, era verdad, Nayeon estaba ahí, mirándonos con los puños apretados. Me giré a Sana, ahora era yo la que estaba molesta.

—Vámonos, lo has entendido todo mal.

Me aguanté las ganas de maldecir, nunca me había sentido tan miserable.

—Ahora, eres tú la que está enojada.

Dijo, pero ya no la escuché, caminé en dirección al salón y pasé de largo a Nayeon. Cuando me di la vuelta para ver si Sana me seguía, al parecer estaban hablando.

Así que regresé.

—Déjala, sólo va a lastimarte, Mina no te ama.

Sana me miró, su atención estaba por completo en mí.

—La que debe dejarla eres tú.

La cabeza empezó a dolerme, yo no debería estar aquí, mucho menos debí hacer pasar a Sana por esto, ella tampoco debió besarme, mucho menos por obligación.

Caminó en mi dirección y tomó mi mano, con fuerza haciéndome avanzar con ella. Regresamos a la mesa en la que estábamos y recogimos nuestras cosas. Me despedí de Jihyo y de su esposo y salí con Sana.

Habíamos entrado nerviosas, con nuestros brazos entrelazados, salíamos, ambas molestas pero con nuestra manos entrelazadas.

Cuando subimos al vehículo nos tomamos un tiempo para respirar.

—En realidad si estoy molesta —aclaró Sana —no me gusta fingir, no me gusta actuar como alguien que no soy ni hacer cosas por obligación. Tampoco entiendo por qué no puedes superar a esa tipa, jugó con tus sentimientos pero sigues detrás de ella, intentando darle celos. ¿Qué quieres ganar? ¿Quieres verla hacer un berrinche por ti, que se retuerza de celos?... ¿Buscas que se divorcie para volver con ella?

—No actúes como si fueras una víctima, nadie te obligó a qué me acompañaras, tampoco nadie te pidió que me besaras por obligación —arranqué el vehículo molesta. ¿Qué era lo que esperaba? Que me dijera que lo hizo porque me amaba. Sana y yo no podíamos ser más diferentes. No había forma de que pudiéramos encajar juntas—. Tampoco intentes adivinar mis sentimientos. No quiero a Nayeon, no quiero darle celos, sólo quiero que se olvide de mí, y que entienda que estoy volviendo a rehacer mi vida y que no dependo de ella. Si, tal vez, sólo lo hice lo hice por ego.

—Lo lamento, no debí besarte —sus palabras me enojaron más.

—Exactamente, no debiste besarme, no necesito besos falsos y sin sentimientos. Sólo has arruinado nuestra amistad, ahora todo se volverá incómodo y sabes que es lo peor, que no quiero perderte.

Mis ojos empezaron a empaparse, amenazaban con llorar y eso sería lo peor.

—Te quiero —Sana soltó de la nada y frené el vehículo en medio de la calle. Mi respiración estaba agitada y los pitidos de los vehículos que traía atrás sonaron con fuerza y de manera insoportable—. ¡Te has vuelto loca! No frenes así, puedes causar un accidente.

— ¡Entonces no digas estupideces! —grité y me orillé en una esquina, a pesar de todos los sentimientos que revolucionaban en mi cuerpo, no quería causar un accidente.

— ¡Ah! ¡Mis sentimientos no son estúpidos!—Sana esperó unos segundos para calmarse mientras que yo no sabía exactamente que decir—. Si digo que te quiero es porque te quiero, y ahora sólo estoy irritada y celosa por lo que dijo esa mujer molesta.

Volví a encender el vehículo, todavía tenía que ir a dejar a Sana a su casa. Ella miró por la ventana, realmente no sabía que decirle, pero tampoco podía quedarme callada.

—En realidad no me molestó que me besaras —aclaré—. Lo que me molestó fue la idea de que lo hicieras por obligación. Si vas a besarme debes hacerlo porque quieres.

—Lo hice porque quise y realmente quiero besarte de nuevo.

—Sí, yo también, podemos hacerlo en tu casa.

Asintió, y ambas sonreímos nerviosamente. Después de unos minutos, estacioné mi vehículo fuera de la casa de Sana, tomé mi teléfono y las llaves.

Apenas cerró la puerta, me besó, con sus manos aferradas en mi rostro, de forma tímida.

Cuando se separó, me miró como si fuera una persona preciosa, sus ojos brillaban en la oscuridad como dos perlas cafés. El siguiente beso lo inicié yo, me aferré a su cuello y no pude parar.

Caímos al sillón entre risas y miradas cómplices. Nos besamos de nuevo, mientras fingíamos ver películas, sólo fue un pretexto, para mantenernos juntas y abrazadas, hasta que finalmente fuimos a la cama y dormimos abrazadas.

Hace tiempo atrás había creído que jamás me volvería a enamorar. Apenas había pasado un año y unos meses, pero mi corazón parecía volver a latir con fuerza.


Díganme ¿con quién les gustaría que Mina quedara como pareja?  ¿Sana o Nayeon? 👀

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Díganme ¿con quién les gustaría que Mina quedara como pareja?  ¿Sana o Nayeon? 👀

Quédate con él [Adaptación Minayeon/ 2na]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora