Siempre Te ame [CEC #2]

Capítulo 9: Alex

Primer comentario dedicatoria del próximo capítulo.

PD: El Lunes 20 de Abril empieza un maratón.

Al levantarme corrí al baño. Me tomé todo mi tiempo en el baño antes de salir. Eso es uno de los problemas de la vida, el agua es tan rica que no sabes como dejarla. Agarré de mi armario un conjunto que consistía de una camisa blanca, un short negro y mis zapatillas. Decidí hacerme una trenza de lado. Al terminar de arreglarme, bajé a donde Ryan. Le pediría a Ryan que cuidara los niños y luego me iría sola.

Ryan, ¿Puedes encargarte de los niños un rato?–pregunté.

Claro Leah, ¿A dónde vas?–preguntó.

Iré a ver la casa en la que vivía con mi mamá antes de que nos mudaranos con Steven–le dije.

¿Y eso para qué? ¿Tu mamá se piensa volver a mudar?–siguió preguntando.

Bueno, ahora que Sebastián me dio una nueva oportunidad no creo que sea conveniente que siga viviendo contigo. Además esa casa me queda más cerca del trabajo, la casa de mi mamá, de este apartamento y se que se me hará mas fácil todo–respondí sonriendo.

–Estoy tan orgulloso de ti. Puedes ir tranquila que yo los cuido.

–Gracias.

Me despedí y salí del apartamento y caminé hacia las escaleras, pero un brazo en mi cintura me aguantó. Una sonrisa se formó en mi rostro.

–¿A dónde tan temprano y sin avisar?

La pregunta seria, ¿Qué haces por aquí tan temprano?–pregunté–Lo que pasa es que voy a ver la casa en la que antes vivía con mí mamá–dije volteandome.

Contestar con otra pregunta es de mala educación–rodé los ojos ante su réplica que ya veía venir–Y para contestar tu pregunta venía a ver a mis hijos y pasar un rato–contestó–¿Para qué vas a ver la casa?–se acercó a mí.

Estoy pensando en mudarme sola. Así dejaría a Ryan empezar de nuevo y ya que me diste una oportunidad lo creo aún más conveniente–contesté.

¿Te puedo acompañar?–preguntó dándome un corto beso.

¿Seguro? ¿No tienes algo que hacer?–le pregunté.

A ver querías una oportunidad y creo que lo mejor es pasar tiempo juntos. Así que no discutas–contestó.

–Esta bien.

Minutos después......

Miré la casa con detenimiento desde el auto cuando me estacioné frente a ésta. Me volteé para ver a Sebastián y estaba sacandose selfie en el asiento. Rodé los ojos y me baje del auto.

Suspire, traía muchos recuerdos tanto buenos como malos. Desde que dejé está casa mi vida cambió por completo. Aún no sé si para bien o para mal, pero jamás lo sabré con exactitud. Luego de irme de aquí fue cuando conocí mucho mejor a Sebastián. ¿Quién diría que terminaría amandole?

Entonces fue cuando aprendí que del odio al amor solo hay un paso y yo lo había dado. Y no me arrepiento para nada. Lo volvería a dar con los ojos cerrados.

Ahora tengo dos hermosos hijos. Los cuales amo tanto o más de como lo amo a él. Y siento que eso es lo mejor del mundo. Pudo haber sido un error ni planeado pero había sido el más bonito error de mi vida.

Oye ¿Por qué no me esperaste?–me protestó Sebastián llegando a mi lado.

No iba a interrumpir tu sesión de selfie–le sonreí.