Siempre Te ame [CEC #2]

Capítulo 6: Te odio Leah

Narra Leah:

Había tomado una decisión luego de pensarlo varias veces. Hablaría con Sebastián y cerraría por completo ese pasado que yo misma dejé abierto.

Sebastián-lo llamé, mis nervios se me comenzaban a centrar en el pecho dejándome sin aire- Emm...¿Podemos hablar?–le pregunté.

Claro Leah. Solo espera, voy a recoger antes mi guión de mañana–contestó antes de alejarse.

Me senté en la silla giratoria que decía tenía bordadas sus iniciales. Esperé a que él llegará pero como no llegaba le mandé un mensaje a Ryan para avisar que tardaría en llegar a la casa.

¿A dónde vamos a hablar?–preguntó llegando a mí lado.

No lo sé, te parece si te invito a comer a la cafetería que está cerca de donde vivo. No se si vendan cosas buenas, pero podemos ir a ver–sugerí.

Claro vamos–me contestó.

15 minutos después......

Está lleno, ni siquiera hay espacios para sentarnos–le dije mirando por el lugar.

¿Te parece si pedimos la comida para llevar?–preguntó él.

Me parece buena idea-me limite a contestar.

Luego de pedir la comida para llevar caminamos hacia mi departamento, ya se acercaba la hora de la verdad y no había vuelta atrás. Al llegar abrí y entramos. Noté que Ryan no estaba dentro pero dejo una nota. Así que me acerqué a leer.

Salí con alguien. Cuando termines de hablar con Sebastián llamame. Espero que todo te salga bien.

T.K.M,
Ryan

Miré a Sebastián que estaba de espaldas buscando en la bolsa de comida lo suyo. Noté que de la manga de su mano se podía notar un poco de un tatuaje. Uno más de los tantos que ya tiene. Él había cambiado bastante, pero yo no podría decir nada porque también tenía un tatuaje.

Espero que me vayas a decir la razón por la que te fuiste–comentó, lo mire y suspire.

Me fui por tu bien–contesté.

Estoy cansado de escuchar eso. ¿Por mi bien? Volviste para lo contrarió ¿Verdad? No es lindo ver que tienes dos hijos con Ryan a y eso sin contar que Max te dice mamá–me dijo esté.

Suspire. Tenía razón. No debía de ser fácil para él.

De eso quiero hablarte–le dije.

No sabia de donde sacaría el valor pero debía sacarlo. Ya no podía dar vuelta atrás. Era hoy y solo hoy. 

Te escucho–me dijo animandome con su mano para que hablara.

Ni siquiera se como comenzar tofo esto-suspire soltantando una risa nerviosa- Bueno ¿Recuerdas la fiesta que fuimos cuando no podía recordar nada? En esa fiesta nos drogaron y todo el alcohol del juego no ayudó. Ya sabes que hasta estuvimos juntos y ni siquiera me acuerdo–suspire.

Sí me acuerdo, hablamos de eso el día siguiente. No entiendo que tiene que ver eso Leah. Recuerdo que no es por eso que te fuiste porque te fuiste tres meses después–contestó mirándome incrédulo.

Tiene que ver mucho Sebastián. Es que ese día quedé embarazada. Me fui tres meses después, pero fue porque ya no podía ocultarlo. Sebastián me fui por tu bien–le dije despacio.

Temí todos estos años que este día llegara y hoy temo su reacción a mis palabras. Temía que me odiara.

Espera...No ¿Qué quieres decir? No te estoy entendiendo. ¿Por mi bien?–me dijo confundido.