El factor común es el sexo (Ateez/BL)

14 |¿Puedo?|

JONGHO

Solo dormirás con él, no debes estar nervioso.

Dormiría con Yeosang y se sentía muy irreal para mi.

–San,–dije casi en un susurro–ya desocupé el baño.–no tenía rencor alguno hacia él pero si me causaba un poco de molestia el recordar como había tratado a Yeosang en el pasado.

–Gracias por avisar. Te deseo mucha suerte.–palmeó mi hombro.

–¿A que te refieres?–pregunté con evidente confusión.

–Bueno, dormirás con Yeosang, ¿no? Sin duda alguna, necesitarás mucha suerte.–fue lo último que dijo antes de entrar al baño.

Entonces pude entender sus palabras. Claramente eran insinuaciones sobre Yeosang. Estaba familiarizado con eso debido a los constantes rumores que surgían sobre Yeo. Ignoraba todos y cada uno, nunca me dejé llevar por terceras personas. No tomé en cuenta nada de eso, quería conocer a Kang Yeosang, por mi cuenta.

Toqué la puerta de su habitación.

–Pasa.

Estaba sentado en la cama leyendo lo que supuse era un manhwa. Lo dejó sobre la mesita de noche y me miró fijamente, se acomodó en el lado izquierdo de la cama y con su mano palmeó el lado derecho.

–Ven.

Al principio dudé pero luego me recosté.

–No como personas, ¿sabes? No hay razón para estar nervioso.

–Yo...no es eso, es solo que...–mierda, definitivamente no sabía que responder.

–Te gusto, lo sé.

Sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo, comencé a sudar y se me dificultaba respirar. No pude formular palabra alguna.

–Jongho, sé que eres inteligente pero quizás no te has dado cuenta de que soy un asco. Así que, ya sea que te guste o que sientas admiración hacia mi, pues no entiendo el porqué. No debería ser así.–dijo como si nada.

Entonces mis nervios desaparecieron, podría decir que incluso sentía coraje en ese momento. ¿Por qué piensa de esa forma sobre si mismo?

Cuando me dispuse a contradecirlo el me interrumpió.

–Solo...ignora lo que dije. Suelo decir muchas tonterías. Es obvio que alguien como tú no sentiría admiración por una basura como yo. En fin, estoy cansado. Dormiré y tú deberías hacer lo mismo. Descansa.–finalizó sonriendo, dando por terminada la conversación.

–Tu igual, descansa.–me acomodé y me dispuse a dormir.

~~~

–¿Podrías detenerte? Suéltame, por favor.–escuchaba un llanto a lo lejos pero todo estaba oscuro.

Me removí en mi lugar, pensaba que estaba soñando.

–Suéltame...–sentí golpes en mi espalda, ocasionando que despertara.

–¿Un sueño?–susurré, recibí otro golpe y supe que no era yo quien estaba soñando.