El factor común es el sexo (Ateez/BL)

29 |Te extrañé|

JONGHO

–Me abandonaste.–dije antes de sentarme en el escenario.

–No te abandoné, nunca lo haría.

Lo miré con seriedad mientras se sentaba a mi lado.

–Jeongin, lo hiciste. Primero me arrastraste a Nomin's en contra de mi voluntad. Segundo, prometiste quedarte conmigo pero tan pronto viste a Hyunjin desapareciste con él. Tercero, tuve que ahogarme en alcohol para poder soportar ver al tipo ese con Yeosang y por último tuve que regresar solo.

Era lunes, había pasado todo el fin de semana pensando en como ese hombre había pasado sus manos por toda la anatomía de Yeo. Era un recuerdo imposible de borrar.

Estábamos en el teatro, reunidos con todos los estudiantes de teatro de diferentes años. Los libretos para la obra estaban listos, nos entregarían la lista de los personajes, ésta incluía una descripción de cada uno, el propósito era elegir el personaje al que nos gustaría interpretar, luego se nos daría el libreto correspondiente. En dos semanas se llevarían a cabo las audiciones.

–Soy un pésimo amigo, realmente no merezco tu amistad.–habló con tono dramático, muy digno de un estudiante de teatro.

Suspiré y pensé bien mis palabras antes de hablar.

–Escucha, no eres un mal amigo. Me has ayudado incontables veces.

–¿Pero?–preguntó con diversión.

–Pero en serio odio que me saques de mi zona de confort y luego me abandones.

–Cariño, esas experiencias son necesarias. No te puedes quedar en el cascarón para siempre, necesitas desarrollo de personaje.

–Como sea.–hice un gesto con la mano, restándole importancia.

Se escucharon unas fuertes carcajadas, ambos miramos a la dirección de la que provenían.

Los dos estudiantes de intercambio de teatro habían llegado y con ellos estaba...

–Ese tipo...–dije en un susurro.

Jeongin me miró curioso.

–¿Es el que estaba con Yeosang?

Asentí.

–Ya vete, regresa con Wonwoo o vete a molestar a Seungheol.–lo empujó suavemente y luego señaló la salida.

–Seungkwan, sabes que molestar a Cheol es una misión suicida.–fingió sentir escalofríos.

–Justo por eso lo digo,–señaló la puerta–adiós Mingyu.

El mencionado rodó los ojos, resopló y luego se fue.

–Tengo una idea.

Me volteé hacia él, era la misma expresión que tenía cuando me ayudó a averiguar la universidad a la que Yeosang asistía. No importaba las medidas necesarias, siempre hacía lo que fuera para ayudarme.

–Dios, me asustas pero habla.

Hice un ademán para que continuara.

–Si nuestro compañero nuevo lo conoce, definitivamente le sacaré información.

Nuevamente esa expresión entre seriedad y diversión.

–Estás loco.–reí mientras negaba.

–¿Por qué Jeongin tiene cara de haber
ideado el crimen perfecto?–preguntó Yunho, se sentó con nosotros.

–Quizás porque si lo hizo.–respondí, encogiéndome de hombros, luego me reí.

–Esa expresión, este mocoso está ideando algo.–dijo Minho, tomando con delicadeza la cabeza de Jeongin para moverla de un lado a otro.