Capítulo X

908 54 7
                                    

Discurso, Arena, Recuerdos.

 
La mañana se cuela por las ventanas de la oficina.A duras penas logro levantarme y lavarme la boca.Suelo tener cepillos de repuesto y cosas así por si me tengo que quedar a dormir en el despacho.

Estoy cansada y la cabeza me da vueltas.Adam hizo miles de llamadas perdidas toda la mañana, las cuales fueron ignoradas.

Enrick pasó a invitarme a desayunar pero me excusé con que no me sentía muy bien.Quiero irme a casa pero antes de eso necesito verlo a él.

Con disimulo me dirijo hacia su cubículo y me paro frente a la puerta.El guardia no pone peros porque me conoce ya.Tomo aire hondo y entro.

Él está sentado mirando por la ventana como siempre acostumbra.Tiene bolsas bajo los ojos y unas terribles ojeras.

-¿Qué haces aquí?.

No me mira.

-Solo quería hablar contigo-Digo.

Realmente no tengo razón para venir pero es como si mis pies caminaran solos en su dirección.

-No quiero verte.

Me acerco use levanta de golpe.

-Vete ya- espeta.

-No, me vas a escuchar- lo encaro- no entiendo qué mierda te pasa conmigo pero necesito que me expliques por qué me apartaste sin razón alguna.

-No tengo que explicarte nada, no eres nadie- me mira con frialdad.

-Creí que habíamos progresado-le digo con decepción.

-Tú siempre creyendo cosas, ese es tu problema.

-¿Me vas a decir que nunca te abriste a mí?,¿o que nunca sentiste mínima confianza?-comienzo a alterarme-¿me vas a decir que eran ideas mías?.

-Creo que olvidaste algo- se acerca poniendo su cara frente la mía.

-¿Qué?.

-Que yo no siento nada.

Algo en mí se rompe.Por un momento pensé que había llegado a una mínima parte de él.Pensé que había sido él mismo.

Me quedo estancada sin saber qué decir.

-Por eso entiende que no te quiero ver, me entretuve contigo sí, jugué con tu mente , pero ya me aburres , dejaste de ser mi juguete, supéralo- escupe como veneno en palabras.

Siento un dolor dentro del pecho y no escondo mi cara de decepción.Me echo hacia atrás dando pasos lentos.

-¿Qué pasó?¿Caíste en mis redes?-sé ríe irónico-¿Estás sintiendo cosas?.

Se acerca y yo retrocedo.

-¿Pretendes que sea tu príncipe azúl?¿Qué cambie lo que soy por ti?.

Rompe en carcajadas.

-Oh darlin , creo que olvidaste que soy un monstruo.

Sus palabras queman como fuego ardiente sobre mi pecho.Le doy una última mirada de desprecio y salgo corriendo por la puerta.No lo quiero ver más.Es un puto enfermo.Lo único que hizo fue confundirme y llenarme la cabeza de mierdas.Lo que más me duele es que yo lo dejé.Le permití que me usara como uno de sus tantos juguetes.

Entro al despacho de Trevor.

-Quiero adelantar mis vacaciones-suelto son saludar.

-Oh Ellie- me mira-¿Estás bien?.

El diablo en disfrazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora