「My blood & tears 내 피와 눈물」 ✨ JIKOOK ✨

27

{Octubre 2020}

Jungkook:

Tienes planes para hoy??

El mensaje llegó con una notificación silenciosa al celular de Jimin, dejándolo desconcertado. No era nada de otro mundo, sólo una pregunta sencilla..., pero eso lo hacía más extraño aún. ¿Por qué Jungkook le estaba escribiendo? ¿Por qué era tan casual para preguntarle qué haría durante el día? Como si no hubiesen tenido un momento  amargo y tan íntimo hace un mes.

Siguió mirando la pantalla de su celular, sin saber qué hacer.

No sabía cómo sentirse respecto a Jungkook, por lo que no sabía cómo reaccionar a él.

Durante un mes lo carcomió la culpa por permitir la cercanía con Jeon. Si bien no pasó nada entre ellos, se sentía culpable, porque él debía cuidar su relación con Joo-Hyuk, no revivir viejos sentimientos con otros hombres.

La culpa era peor cuando llegaba a la conclusión que Jungkook no era cualquier hombre. Y ahora lo llevaba anclado en su cabeza a diario.

Decidió responderle con la misma naturalidad empleada por Jeon, que estaría ocupado con sus propios asuntos.

Jimin:

Iré a comprar mi auto-regalo de cumpleaños

Jimin pensó que eso sería suficiente, porque básicamente decía "estaré ocupado, gracias por preguntar". Pero su celular no tardó en sonar con una respuesta.

Jungkook:

Qué genial!!

Te puedo acompañar??

«Uhm, no, gracias». Pero ¿cómo decirlo sin ser maleducado? ¿Cómo lo hacen las otras personas para negarse? Ése no era su fuerte, mucho menos si se trataba de decirle que no a Jeon Jungkook. En el pasado no pudo decirle que no, pero debía cambiar aquello. Ahora era un hombre hecho y derecho, por todos los cielos.

Practicó mentalmente cómo fingir quedar con amnesia, pero no era convincente. También pensó en decirle que iría acompañado, o que se compraría algo muy privado y no quería que nadie lo viera. Pero entonces su celular volvió a vibrar, con un nuevo mensaje de Jungkook.

Jungkook:

Te puedes negar, si te complica

No quiero importunar

Por la tardanza en obtener una respuesta, Jungkook había asumido que algo de aquello ocurría con Jimin, y era entendible. Aunque él quisiera seguir construyendo un camino que lo llevara a estar junto al rubio, podía comprender que no se encontraban en la misma página.

Jimin:

Hoy a las 6, puedes?

Jungkook:

Ahí estaré, a las 5:59🙂

Y, por supuesto, así fue. Como nunca antes, Jungkook cumplió con el horario y la ubicación acordados. Llegó antes que Jimin, y lo esperaba con una cálida sonrisa.

Jimin se sentía miserable por estar disfrutando cada uno de esos gestos, porque sabía que eran por y para él. Exclusivamente.

«Bueno, jodida mierda».

Se sentía jodido.

Pasó un mes sintiéndose culpable porque su novio le servía el desayuno y lo trataba como a un príncipe, pero él seguía imaginando escenarios con Jungkook. Aunque no le dijo concretamente que quería besarlo también, no fue necesario. No para toda la comunicación se necesitan palabras, y definitivamente, él había dejado entrever que quería lo mismo que Jungkook. Porque sí, lo quería. Y que lo parta un rayo, pero la jodida culpa no era tan grande como el anhelo de sentir el contacto.