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– ¿Qué tal si mezclamos el Petting con el Rubbing, unnie? – preguntó coquetamente.
– Tú... ¿Q-Quieres mezclar ambas cosas? – la mayor estaba completamente perpleja.
– ¿Por qué no? – sonrió – Al parecer el Putting es como una previa del Rubbing, ¿no crees que es divertido?
– ¿Quién eres y dónde metiste a mi Chaeyoungie? – cuestionó casi horrorizada – ¿Segura que no has tenido tu primera vez?
– Bueno, dijiste que creaste un monstruo, ¿no? – pasó su mano por debajo de la playera de Mina – El monstruo siempre estuvo, el punto es que tú lo has despertado.
– ¿Hace cuánto has estado esperando esto?
– Mucha pregunta, poca acción – murmuró aburrida quitándose de encima para ponerse de pie – Creo que necesitas un incentivo – Mina quedó un poco confundida y se apoyó en sus codos para mirar a la rubia.
– ¿De qué estás...? – las palabras se quedaron en su garganta cuando la coreana se quitó la parte superior de su ropa, quedando en un sujetador deportivo blanco y su falda de uniforme.
– ¿Mejor?
– ¿Qué te crees? ¿Un Snickers? – bromeó aunque la vista que estaba teniendo, era fantástica para ella y para su "gran" amigo.
– A juzgar por tu mirada, al parecer sí – le siguió el juego – En cualquier momento me comes.
– Si lo dices así, suena horrible – rió – Me gusta tu incentivo, pero no es suficiente.
– Vaya, qué exigente eres – hizo un mohín casi burlón – Pero no te daré en el gusto, debemos estar iguales.
– ¿Quieres que me saque la playera? – alzó una ceja.
– No exactamente la playera – se acercó lentamente hacia ella y sin previo aviso, empujó sus hombros para acostarla nuevamente – Quiero tus manos quietas, ¿de acuerdo?
– Se supone que la activa soy yo...
– Es bueno salir de la rutina a veces – puntualizó – Quieta.
La japonesa asintió respirando profundamente pero aquel oxigeno regenerado se desvaneció cuando sintió las manos de Chaeyoung desabrochar su pantalón.
– O-Oye... – quiso protestar pero la menor le lanzó una mirada que la hizo cerrar la boca.
– Te dije que te quedaras quieta – recordó bajando el cierre del pantalón – Ahora, levanta las caderas.