Capítulo 4

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Punto de vista de Marcos.

Todos estábamos sentados en el comedor, reinaba el buen rollo y las risas, además de anécdotas durante la fase de grupos de la Nations League y la de la Eurocopa, que seguimos sin superarla, ahí ha empezado todo esto.

Sin la Eurocopa no tendría a Daniela sentada en mis piernas mientras juega con su osito de peluche, sin la Eurocopa no existiría Marcale y sin la Eurocopa no tendría este equipo que considero una familia, el Atlético estaba bien, pero la selección era superior, ver la cara de Alejandra cuando estábamos con la selección no tenía precio.

—Venga ya, Unai. Se te escapó el balón, asúmelo. —dijo Dani, riéndose de Unai.

Conversábamos sobre el gol en propia puerta de Unai en los octavos de Eurocopa ante Croacia, tuvo más cantazos desde ese día, es como que abrió una bóveda, pero ese hombre sin duda era Unai Casillas.

—Me tenéis hasta Los Santos huevos ya. —dijo el Vasco enfadado ante la risa de todo el equipo, hasta Lucho se reía.

—No te piques. —dijo Gavi, intentando parar de reír.

Este niño debería haber estado en la Eurocopa, aunque bueno todavía era menor y no habíamos descubierto su calidad. Ahora ya es mayor y presiento que va a darnos muchas alegrías en el mundial.

—¿sabéis que? —dijo Pedri, subiéndose en su silla.

—Verás... —dijo Carla llevándose su mano a la frente.

—Cosas que nunca cambian. —empieza a tocar las palmas. —Quiero sentir tu cuerpo
Juntito al mio, Por que mi alma, Ya tiene tiempo, Sintiendo frio, Si tu lo quieres vete acercando, Junto conmigo, Poquito a poco, Muy despacito que, Estoy sintiendo mas que bonito.

Todos nos estábamos riendo. La selección de Brasil Nos miraban como si estuviésemos locos.

—Nos están mirando mal. —dijo Jordi.

—Normal, ellos no pasan de la Capoeira. —dijo Pablo.

—Les tengo cierta manía. —habló Dani.

—Dani, tú le tienes manía a cualquiera que os haya ganado algo. —habló Alejandra, dándole de comer a Daniela.

—Hombre, Italia ya tuvo su merecido, Francia se va a cagar y Brasil también tendrá el suyo, por quitarnos el oro. —habló el jugador del Leipzig y mi mujer rodó los ojos.

—No os lo quitaron, jugaron mejor y ya está. —dijo Carla.

—Pero si tú le tienes asco a Richarlison. —habló Javi Puado, otra de las novedades en las convocatorias.

—Es distinto, Javier.

Cuando terminamos de comer, fuimos a dar una vuelta con Dani, en plan familia feliz que viene a ver y jugar el mundial y si nos lo llevamos mejor.

—Me alegro tanto. —habló Neymar sonriéndole a mi mujer.

Estaba agradecido con ese hombre por habernos vuelto a juntar a mí y a Ale, la verdad que si no hubiese sido por él, tal vez no hubiésemos vuelto.

—Vuestro primer partido es después del nuestro. —dijo Ale, el brasileño asintió. Llegué yo a la conversación.

—Hola. —Neymar, ya no estaba tan risueño.

—Hola. --dijo Alejandra, dejando un beso en mi cara.

Neymar empezó a mostrarse serio y a la misma vez incómodo.

—Bueno, me alegro mucho de que todo esté bien, ya sabes no quiero perder contacto. Nos vemos. —dijo Ale abrazándole. Me molestó un poco porque entre esos dos siempre hubo química.

Pero tranquilo, Marcos. Ale es tu mujer, la madre de tu hija, y esos celos no tienen sentido, porque sé que pase lo que pase estaría conmigo. Se encargó de demostrármelo.

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HOLAAAAAA.

¿Qué son esos celos Marcos? ¿Y Neymar por qué tan serio? ¿Qué opináis?

10 votos y subo capítulo 5.

ONSIDE -Marcos LlorenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora