El destino los puso en el mismo camino pero las
circunstancias cambiaron el rumbo de las cosas.
Dos almas unidas, una por amor, otra por
presión. Se suponía que todo sería para mejor
pero a veces las cosas no salen como uno espera.
Las mentiras y se...
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___________________________ ✨ Narra Ferran:
Han pasado casi dos años, tiempo en donde mi vida a sido de altos y bajos, con la situación de mi familia, con el estrés de la universidad, pero sobre todo con mi relación con Rachel. La amo, pero esa chica está completamente loca. Vino a mi universidad sin avisarme y acaba de golpear a mi compañera con la cual solo estaba hablando , sus celos enfermizos han llegado demasiado lejos y esta fué la gota que rebasó el vaso. -Eres un hijo de puta- me grita furiosa Rachel luego de que logré alejarla de toda la gente. -¡Joder Rachel!, deja de insultarme, nosé que coño te sucede pero ya me canse, ¡se acabó!- le digo furioso y ella se burla. -Cariño, te eh escuchado tantas veces decir lo mismo y siempre vuelves a mí, si pegue a esa zorra fué porque se acercaba mucho a ti- se encoge de hombros como si fuese normal actuar así. -Vete a la mierda Rachel, no quiero volver a verte- le respondo y subo a mi coche en dirección a casa. Nuestra relación desde un principio a sido así... peleas, gritos, insultos y luego reconciliarnos. Hemos terminado más de 10 de veces en estos dos años juntos, incluso un par de veces que terminamos, nos alejamos algunos meses, pero siempre volvía a ella. Ya no más, debo preocuparme de mis estudios para titularme y ayudar con el equipo de papá. La salud de mi padre sigue igual, ahora utiliza oxígeno y está en silla de ruedas, por lo que no puede hacerse cargo del equipo . A mi solo me queda un año para terminar mi carrera.
Llego a casa y todo está en silencio. Me acerco al despacho de mi padre y escucho algunas voces, la puerta está entre abierta... -Es la única ayuda o solución que les puedo dar- dice un hombre, si no me equivoco es Ricard, el padre de Laila. -No... no podemos hacer eso, sería obligar a alguno de nuestros hijos a hacer algo que no quieren- dice mi madre con la voz temblorosa. No entiendo nada... -Janet, me deben mucho dinero y sé que no pueden pagarmelo, ya no les puedo seguir prestando más, por lo mismo ese es el único trato que les puedo ofrecer, lo siento amigos...- dice Ricard y no entiendo ni una mierda. Se quedan callados algunos segundos y luego se despiden. Corro hacia la escalera para que no se den cuenta que les espiaba. El padre de Laila se va de casa y voy a ver a mis padres, ambos están tristes . -Mamá ¿qué sucede?- pregunto mientras la abrazo pero solo niega con su cabeza. Me parte el alma ver a la mujer que me a cuidado y amado como su hijo- tranquila, no llores mamita... cuentame qué pasa... -El club de tu padre ya no da para más - dice mi madre sollozando- debemos mucho dinero y nosé qué haremos ahora. -Pero... no... ¿no hay ninguna solución?- pregunto angustiado. Mi madre niega con su cabeza. -Hay una...- dice mi padre en un susurro. -¡Rodolfo!- chilla mamá- eso no... ya lo hablamos- mi padre asiente y sigue mirando el suelo sin moverse. Se ven destrozados y no es para menos. Luego de unos minutos me encierro en mi cuarto. Ver mal a las personas que me han dado todo y no poder hacer nada me hace sentir una mierda. Me eh fumado casi la mitad de la cajetilla de cigarros con la angustia... hasta que recuerdo la conversación que escuché en el despacho de papá...Ricard ,el padre de Laila nos puede ayudar y sea lo que sea haré lo posible para ayudar también a mis padres.
Apenas llego a la gran casa de Ricard ,una señora del servicio me hace pasar a su despacho, el silencio de aquí me pone aún más nervioso de lo que estoy. -Cuéntame muchacho, ¿qué te trae por aquí?- dice Ricard. -Usted le ofreció ayuda a mis padres...- digo y él asiente. -Pero se negaron- hace una mueca y se encoge de hombros. -¿Puedo saber qué condiciones impuso para ayudarlos?- le pregunto nervioso y él asiente. Ricard siempre a sido un muy buen amigo de papá, pero de presencia es intimidante. Me explica cuidadosamente cada detalle, sinceramente es una completa locura, pero debo hacerlo por mi familia... estoy seguro que si Jake se entera será el primero en aceptar el trato... pero no, es egoísta pensar así pero quiero que mis padres estén orgullosos de mí, no de él. -Yo lo haré- le respondo. -¿Estás seguro?- me pregunta, asiento y él me sonríe- de acuerdo Ferran ... debes saber que esto debe ser confidencial, nadie, absolutamente nadie debe saberlo a excepción de tus padres- vuelvo a asentir- ven mañana a casa, tendré listo un acuerdo por escrito donde queda todo lo dicho estipulado, tendrás un plazo de un año para cumplir el primer punto, si no cumples dentro de el plazo, el trato quedará anulado y toda la ayuda económica a tu familia también.
De camino a mi casa reviso mi teléfono, tengo un par de mensajes de Rachel pidiéndome perdón... creo que ella es la primera persona a la que visitaré mañana antes de firmar el acuerdo con Ricard, la necesito lejos para cumplir el primer punto...
