Narra Laila:
Alonso siempre me deja tan agotada hasta el punto de dormirme en un par de minutos, pero hoy no pasó. Sí me siento agotada pero no pude dormir de inmediato. Me levanto silenciosamente y voy a la cocina a por un vaso de agua, estoy tan metida en mis pensamientos que de pronto veo una sombra pasar por la ventana de la cocina. Doy un salto del susto y se me cae el vaso de las manos. Alonso llega corriendo a mi lado.
-¿Qué pasó?, ¿estás bien?- me pregunta asustado y yo solo cierro los ojos apoyada en su pecho. Desde hace algunos días que siento que me observan, no he visto a nadie raro a mi alrededor pero sí siento una mirada puesta en mi a cualquier lugar que voy. Se lo comento a Alonso y solo me mira preocupado- deberíamos llamar a la policía, vamos a la habitación y esperaremos seguros ahí- yo asiento solamente. Algunos minutos más tarde llega la policía a casa. Hago la denuncia y me indican que enviarán una patrulla para que vigile los alrededores. Cuando los policías se van ya estoy casi quedándome dormida de pie.
-Estoy agotada- digo lanzándome a la cama.
-Deberías descansar... yo debo irme mañana pero prometo volver lo antes posible- solo hago un ruido asintiendo y me quedo profundamente dormida.Agustín acaba de llegar y ya tiene todo desordenado. Está hiperventilado porque Alonso está aquí, me encanta ver sonreír a mi niño, lo echaba demasiado de menos.
-Mami- dice mi pequeño haciendo un puchero- no quiero que se vaya tío Alonso, ¿puedes convencerlo de que se quede?- junta sus pequeñas manitos, se ve tan tierno y me parte el alma no poder hacer nada.
-Mi amor, sabes que Alonso debe ir a ver algunos de sus pacientes pero volverá muy pronto, él lo prometió- le guiño un ojo y suspira no muy convencido. Almorzamos todos juntos y por la tarde vamos a dejar a Alonso al aeropuerto. Me da pena que se vaya porque es un gran apoyo para mí y para Agus, pero no puedo ser tan egoísta de retenerlo aquí sin poder ofrecerle nada más que sexo ocasional.
Llevo a mi hijo a comer a un restaurante que nos encanta, disfrutamos de la comida y río por las ocurrencias de mi pequeño. Pago la cuenta y cuando ya vamos caminando hacia la salida, Agus me suelta la mano.
-Mira mamá, es mi amigo Ferran , ¡Ferran !- miro en dirección a donde me apuntaba Agustín pero me arrepiento de inmediato. Está con su supuesta amiga Alejandra , tomados de la mano. Nosé si es la comida que me sentó mal, o los putos celos me están revolviendo el estómago y haciendo que la bilis me suba hasta la garganta. Como me gustaría arrancarle esa sonrisa que tiene pegada la maldita pelirroja de un solo bofetón. Ferran le sonríe a mi hijo e intenta sonreírme a mí, pero soy incapaz de fingir.
-¿Cómo estás campeón?- le pregunta Ferran a Agus.
-Bien... ¿ella es tu novia?- mi pequeño mira Alejandra y ésta le sonríe.
-A que nos veríamos bien juntos, ¿que crees tú?- pregunta ella y Ferran la observa sorprendido pero no dice nada, y ya me arté.
-Eso lo decide el corazón de mi amigo Ferran , no yo- mi pequeño se encoge de hombros y solo me quiero reír en su cara, su tan resplandeciente sonrisa se desvanece.
-Tienes razón pequeño, eso solo lo decide el corazón de cada uno- dice ella.
-Ya debemos irnos amor, despídete- le digo a mi pequeño que se despide de ambos y salimos rápidamente del restaurante , no quiero seguir viendo esa maldita escena. Subo a Agus a su silla, lo ato y antes de abrir mi puerta vuelvo a escuchar esa maldita voz.
-Wow, que bonito tu hijo amiga- dicen a mi espalda, nisiquiera tengo que girarme para ver quién es.
-¿Qué quieres Rachel?- le pregunto. Me doy la vuelta y veo una desastroza mujer, río con burla- ¿dónde dejaste el glamour querida?, te ves fatal...
-Si crees que burlándote de mí lograrás algo creeme que no- dice orgullosa- de todas formas me follé como quise y cuando quise a tu adorado hombre, y él siempre me prefirió a mí- quién ríe con burla es ella.
-Me importa una mierda, eso es pasado, si viniste a eso pues pierdes tu tiempo, ve a fastidiar a otro lado- sin esperar respuesta me subo al coche . Por el espejo retrovisor la veo como ríe a carcajadas, está completamente loca.Narra Ferran :
-¿Porqué hiciste eso?- le pregunto algo enfadado .
-Porque quería ver algo, y lo acabo de confirmar- responde despreocupadamente.
-Mira Alejandra , fuí bastante sincero ayer y solo acepté venir hoy porque sentía que te lo debía, pero no era necesario hacer esta escenita preguntand...- le digo completamente enfadado.
-Ella te ama aún- dice interrumpiendome- cuando te cogí la mano encima de la mesa fué porque quería ver la reacción de ella, y aunque intentó disimularlo, pude notar sus ganas de arrancarme los pelos- ella ríe y sigo sin entender.
-¿De qué hablas?- pregunto confundido.
-Ella te sigue amando Ferran - dice suspirando- si te cité aquí fué porque quería contarte que la próxima semana me iré a vivir a París, un amigo de mi padre me consiguió empleo de modelo y creo que es lo mejor, debo alejarme de tí por el bien de ambos- sonríe con nostalgia- ¿te puedo dar un consejo?- yo asiento- deberías decirle a Laila lo que sientes, esfuérzate por recuperarla y quizás algún día puedas volver a su lado, se nota que aún guarda sentimientos por tí- ella termina por decir y toma un gran sorbo de su copa. Mi teléfono suena con un mensaje, es Laila: "Ten cuidado en la salida, estába la enferma de tu amante. Espero que no te arme escándalo estando con tu chica". Suspiro pesadamente mientras cierro mis ojos. Esto no está bien.
-Debemos irnos- le digo a Alejandra y ella asiente sin protestar.
-¿Hoy no me puedo quedar contigo?- pregunta ella.
-Debo hacer unas cosas- le respondo y antes de poder subir al coche veo a Rachel acercarse. Sin darle tiempo me subo al coche y lo pongo en marcha. Rápidamente dejo a Alejandra en su casa y me dirijo a la casa de Laila , necesito hablar con ella, solo espero que aún siga despierta.
Al llegar me recibe una chica que trabaja ahí y me dice que suba a la habitación de Laila , al entrar persivo ese exquisito aroma que me vuelve loco, cierro la puerta detrás de mí y al ver a Laila recostada en su cama se me acaba el aire. Laila solo tiene puesto un conjunto de ropa interior rojo con encajes y es demasiado sexy, tan así que Ferran ya despertó.
-Ho... hola- digo tartamudeando.
-¿Te gusta lo que ves?- me pregunta y bebe de su copa de vino. Nisiquiera soy capaz de responderle, debo parecer un maldito pervertido mirándola, pero no puedo evitarlo. Ella se mueve y gatea hasta los pies de la cama, me llama con un dedo y sin pensarlo me acerco a ella. Me tira hacia la cama y antes de que pueda hacer algo se sienta sobre mí. Esto no me ayuda a controlarme- cuéntame una cosa... ¿tienes novia guapito?- me pregunta coqueta.
-No... no tengo novia, guapa- le respondo y ella sonríe. Se mueve un poco restregandose encima de mí y suelto un jadeo, mi pantalón está por explotar y ella me está torturando- me estás torturando bonita...- sin dejarla reaccionar giro con ella, quedándome yo arriba. La observo lentamente y paso mis manos por su silueta, ¡dios!, esta mujer es tan perfecta. Sin perder más tiempo me quito la ropa, necesito sentirla y hacerla mía...La habitación está completamente oscura pero gracias a la luz de la luna puedo observar el rostro del Laila . No hay sensación más grande que tener a la mujer que amo durmiendo en mi pecho y abrazada a mi cuerpo. Con la felicidad en mi corazón me quedo dormido.
Despierto asustado al sentir que la cama se mueve bruscamente, aún está oscura la habitación pero logro distinguir que alguien tiene a Laila y ella patalea.
-¡Sueltala hijo de puta!- me abalanzo hacia él pero por detrás de mí me sujetan y ponen un paño húmedo en mi nariz con un olor asqueroso, intento soltarme pero poco a poco voy perdiendo mi fuerza y todo se vuelve negro.[...]
Últimos capítulos ❤️
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El tiempo - Ferran Torres
RandomEl destino los puso en el mismo camino pero las circunstancias cambiaron el rumbo de las cosas. Dos almas unidas, una por amor, otra por presión. Se suponía que todo sería para mejor pero a veces las cosas no salen como uno espera. Las mentiras y se...