El detrás de escena - Xicheng

VI-Solo un abrazo... ¿o no?

El sonido de un celular arruinó la preciosa postal de una familia perfecta.

El pequeño niño de cuatro años que dormía entre los dos adultos se despertó y comenzó a llorar, acurrucandose rápidamente a uno de los hombres que tenía a su lado, este lo tomó en brazos y contestó el maldito celular.

-¿Qué necesitas? -pregunto molesto.

-¿Eso que se escucha es un niño llorando? -Preguntó la otra persona.

-No te importa, dime que necesitas.

Xichen sonrió, sólo había una persona con la que hablaba con ese tono tan altanero, quien estaba del otro lado del no era sin duda Wei Wuxian.

-¿Estás en tu casa ahora? Estoy hace media hora golpeando la puerta, olvide mis llaves -dijo el chico.

-No Wei Ying, si no te abri despues de veinte minutos ya sabes que es porque no estoy -dijo tratando de sonar tranquilo para no asustar al pequeño en sus brazos.

-¿Puedes volver?

-En media hora llegó.

Dicho esto, colgó el teléfono y le dio un beso en la frente al niño.

-¿Pasó algo grave? -pregunto Xichen preocupado.

-No, solo que mi primo es idiota, olvido sus llaves -Explico mientras caminaba hacia el.

Jingyi estaba ya muy acomodado en los brazos del hombre y se molesto levemente cuando fue dejado en los brazos del otro adulto, pero se acomodo rápidamente.

-Bueno, debo irme, cualquier cosa que pase, ya sabes, llámame -dijo Jiang Cheng tomando las llaves de su departamento.

-¿Quieres venir a cenar esta noche?

Xichen estaba intentando que el niño en sus brazos se quedara quieto y no se sintiera triste por que el otro se fuera.

Jiang Cheng acarició el cabello del niño y le dio un pequeño beso por donde había pasado su mano.

Mientras terminaba con ese pequeño gesto de cariño y le explicaba al niño que ahora debía irse pero que en breve se volverían a ver, Jiang Cheng pudo sentir como un fuerte brazo lo volvía a tomar por la cintura, y nuevamente la sensación no le desagradaba en lo absoluto.

-¿No puedes quedarte cinco minutos más? -pregunto Xichen apoyando su rostro en el espacio entre el hombro y el cuello del otro.

Un leve calor subió por sus mejillas e intentó apartarse, pero su intento de escape se vio frustrado por el fuerte agarre del mayor.

-Empiezo a creer que a-Yi es menos demandante de atención que tu -dijo en un suave susurro.

-Es que me gustas y ya no se como dejarte ir luego de haberte podido tener en mis brazos, a-Yi nunca ha experimentado eso -dijo mientras lentamente levantaba la cabeza para mirarlo a los ojos.

-Vamos lento ¿si? Por favor, necesito tiempo para procesar todo.

Xichen asintió y lentamente retiró su brazo.

-Puedo esperarte toda una eternidad si tu me lo pides.

El color rojo se apoderó de toda la cara de Jiang Cheng, pero bueno, ¿quien en su sano juicio podría seguir como si nada luego de que te dijeran eso?

-Adios.

Los labios del mayor se posaron en la mejilla izquierda del contrario, mientras que la derecha era besada por el pequeño niño.

Jiang Cheng les sonrió a ambos y se encaminó hacia la puerta, la vocecita del niño lo detuvo.

-Papi, ¿volveras?