Jiang Cheng despertó la mañana siguiente cuando sintió que Lan Huan ya no estaba a su lado, decidió no prestarle atención, seguramente se había levantado al baño o a buscar algo, solo tomó un poco de cobijas y las abrazó, volviéndose a quedar adormilado casi que al instante.
-A-Cheng ¿me devuelves las cobijas? -preguntó el Lan cuando llegó a la cama y se encontró con la escena.
El menor se despertó al escuchar la voz de su novio y lo miró de inmediato.
-¿Qué sucede?
-¿Por qué preguntas eso? -en su tono intentaba no darle la razón de que algo pasaba, pero todo su cuerpo daba otro mensaje.
-Te conozco.
Eso fue todo lo que dijo, pero es que luego de casi cuatro meses de convivencia ya conocía muchas de las pequeñas manías que tenía el Lan al despertarse. Lo más común y casi que diario era que él se levantara y se fuera a lavar los dientes mientras Jiang Cheng seguía durmiendo o comenzaba a despertarse, luego volvía a la cama y se quedaban abrazados un largo rato mientras el Lan encendía la televisión y como buen joven con alma de viejo, se ponía a ver las noticias.
Incluso ahora que Jingyi había sido admitido en uno de los mejores colegios de todo el país (claramente en el que había estudiado cada generación Lan conocida) y necesitaba el adaptarse a ese ámbito entonces por medio año iría a un preescolar y por lógica todos tenían un horario fijo ahora, Jiang Cheng podía oír todos los días la televisión de la sala con las noticias mientras el Lan preparaba el desayuno y él despertaba y cambiaba a Jingyi.
-A-Cheng... Se fue todo a la mierda -dijo seriamente el Lan luego de un tortuoso silencio.
-¿Qué cosa?
Jiang Cheng rápidamente se sentó frente a Xichen, quien tenía una expresión demasiado difícil de comprender. Estaba tan serio que podría ser fácilmente confundido con su hermano menor.
-A-Huan ¿Qué se fue a la mierda?
Debía ser algo realmente grave para que estuviera así, incluso lo había hecho decir esa palabra que Jiang Cheng nunca creyó que iba a escuchar saliendo de la boca del mayor.
-Lo nuestro.
Mierda, eso también había logrado la seriedad absoluta y ese aura asesino en Jiang Cheng.
-¿Decidiste romper conmigo mientras dormía? -preguntó algo (muy) exaltado.
-¿Qué? No no no, no quise decir eso mi amor, perdón -se apresuró a decir sabiendo que su novio ya había planeado más de ochenta formas diferentes de matarlo y otras cuarenta de cómo castrarlo.
-¿Entonces qué quisiste decir Lan Huan?
Tomó aire y lo soltó, era mejor no seguir manteniéndolo en secreto, tarde o temprano Jiang Cheng se enteraría.
-Alguien filtró fotos y videos nuestros en los que se ve que somos una pareja... Nuestro secreto se fue a la mierda.
Jiang Cheng palideció de inmediato y continuó desmejorando mientras veía el video que Lan Huan le mostraba desde su celular, porque pruebas no faltaban.
Desde fotografías de ellos caminando por algún parque o playa tomados de la mano hasta incluso un video de ellos besándose en navidad fuera de la casa Wei-Jiang. Fotos de ellos besándose en distintos sitios, un corto video de cuando Xichen lo había acorralado en el estacionamiento el día anterior y como no también miradas entre ellos en las diferentes entrevistas.
-Se sabe y se puede asegurar de que también crían juntos a un niño adoptado por el Lan, además de que conviven desde fines del año pasado -dijo la reportera con voz neutra.
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El detrás de escena - Xicheng
FanficA los 23 años, Jiang Cheng podría asegurar que su carrera como actor solo podía ir en ascenso, pero ¿Qué hay de su vida amorosa? Todo el mundo cree que su relación con la cantante Wen Qing es tan perfecta como la muestran en los medios, claramente n...