Cuando la revolución termina

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El cuarto día durante la mañana, una mujer entró a mi habitación cargando una bandeja con comida, desde el momento en que entró pude notar que ella era del Capitolio y además que la había visto muchísimas veces en televisión; era Effie Trincket, se veía mucho mejor de cómo creí que estaría.

- Effie.

- Asi es.- dijo ella y sonrío un poco, después me ofreció la bandeja que llevaba, la tomé.

-¿Por qué esta vez no vino un guardia? le pregunté

- Yo me ofrecí para venir, querida.- me volvió a sonreir, era la primera vez que alguíen me sonreía en mucho tiempo.

- Gracias.- le dije, me senté en la cama. ¿Qué es lo que está pasando afuera?

- Lo podrás ver tu misma en cuanto termines tu comida.- me dijo, pero no lo decía como si fuera algo bueno.- ¿Tienes alguien con quién ir cuando salgas de aquí?

- No.- y le decía la verdad, no tenía a nadie más aparte de mi abuelo ya que mis padres habían muerto cuando era niña.

- ¿Algún amigo con quíen quedas ir?

Alexander, era la única persona con quien podía contar en estos momentos.

- Si, se llama Alexander Illinworth

- Bien ¿Cómo podemos encontrarlo?

.- Sé donde vive.- Además de que sus padres serían fáciles de encontrar: han sido durante años los patrocinadores que más han "apoyado" a los tributos durante los juegos, ellos ayudaron a Katniss en sus primeros juegos cuando Haymitch se los pidió.

- Bien, entonces quizá cuando salgas te acompañe a buscarlo.- me sonrió de nuevo y luego salió de la habitación. Justo cuando iba hacia la puerta escuche la voz de Haymitch afuera, también la de Katniss.

- Tu juicio ha terminado, nos vamos a casa.- le dijo a ella. Eso significaba que regresarían al distrito 12, se fueron y yo también lo hice pero no tenía una casa a donde regresar...

Cuando abrí la puerta y salí, ellos ya habían tomado su camino, se fueron por un pasillo en la izquierda que daba hacia uno de los elevadores, yo camine por el otro lado tratando de encontrar otro elevador, lo hice, en el momento en que la puerta se cerró, me dí cuenta que no tenía un plan, no tenía nada que hacer ahora, las puertas se volvieron a abrir cuando llegue abajo, cuando salí Effie estaba alli, sin embargo no me sonrío, solo se límitó a decir:

- He encontrado a tu amigo.- yo si sonreí.
- ¿Donde estaba? Le pregunté

- Estaba con otros jóvenes en la mansión en la que vivías.- comenzó a caminar hacia la salida.

- ¿Y por qué estaba allí? le dije mientras la alcanzaba.

- Bueno, la presidenta Coin tuvo una pésima idea en cuantó derrotó a... bueno, tu sabes...

- A mi abuelo.- le dije como si no tuviera importancia, yo misma me sentí cruel por decirlo de ese modo.

- Si, el punto es que fueron a buscar a los jóvenes que tuvieran que ver con las personas que de cierto modo tenían un lugar importante.

- Cómo sus padres.- le dije.- ¿Qué les paso a ellos?

Su silencio me dió la respuesta, y aunque nunca había hablado lo sufuciente con ellos como para llegar a tenerles cariño, ya que, sus ideales eran muy parecídos a los de mi abuelo y además estaban demasiado apegados a las reglas de los juegos, por lo que llegaron a odiar a Katniss, estás razónes me fueron sufucientes para alejarme de ellos voluntariamente.

- ¿Me llevaras a verlo?. Le pregunté mientras cruzabamos el umbral para salir

- No será necesario, el esta aquí.- dimos unos pasos más y entonces lo vi.

Después de sinsajoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora